Deus Ex: Human Revolution

Era muy difícil hacer una secuela digna de uno de los mejores juegos que existen, y más teniendo en cuenta que sus propios creadores no fueron capaces de conseguirlo con Invisible War (que a pesar de todo, es muy buen juego), pero Human Revolution, pese a no llegar a las cotas de grandeza del original, se acerca mucho. En una industria en la que priman los juegos scriptados y lineales, en los que el jugador sigue "órdenes" y sólo puede hacer una cosa para seguir avanzando, aparece un juego en el que los rehenes se mueren antes de que llegues si no te tomas la situación en serio.

Juegos como este me recuerdan por qué sigo dedicándole tantas horas a esta afición: los avances tecnológicos en implantes cibernéticos están ensanchando aún más las diferencias entre ricos y pobres, lo cual crea recelos entre el pueblo llano, por no hablar de entre los que creen que no hay que cambiar lo que Dios ha dado al ser humano, o entre las corporaciones y las organizaciones que pretenden sacar tajada de todo. Y yo, mientras tanto, creando el caos en mi lugar de trabajo, en el que todo el mundo está preocupado por los misteriosos allanamientos y desaparición de objetos en las oficinas, sin sospechar que el responsable es su jefe de seguridad, ávido de exploración RPGera. Si en el primer Deus Ex el mundo se había ido a la mierda definitivamente, las empresas mandaban por encima de los gobiernos y las calles estaban llenas de mendigos, en esta tercera parte (que sucede años antes) un color ámbar apagado lo impregna todo, como si quisiera decirnos que bajo el oro que reluce hay mucho más, y no es tan bonito como parece.

Antes he dicho que no llegaba a igualar al primer juego, pero en algunas cosas diría que es un poquito mejor: por ejemplo, el combate y el sigilo han ganado gracias al pase a la vista en tercera persona durante las coberturas, lo que facilita los tiroteos y la visión de los alrededores cuando queremos pasar desapercibidos. Los desplazamientos entre coberturas son mano de santo, y el hecho de necesitar menos experiencia para adquirir nuevas habilidades, aunque seguramente juegue en contra de cara a las rejugadas, nos permite encarar las situaciones de forma muy distinta desde la primera partida. Pero no es oro todo lo que reluce, pues el juego no está exento de fallos que empañan el excelente resultado final: el más famoso es el de los jefes que, aparte de ser obligatorios (cuando en la primera parte podías evitar muchos de los combates, o encontrar formas de acabar con los enemigos sin tener que luchar), están un poco descompensados, pues a nadie que se haya especializado en el sigilo le gustará encontrarse encerrado en una estancia con un tiparraco de 2 metros armado hasta los dientes. Por otra parte, la IA es un poco estúpida en ocasiones (y esta vez no hay excusa que valga), y se echa en falta una tercera ciudad por explorar, más cuando estaba incialmente prevista y las otras dos tienen montones de cosas por ver y disfrutar. También añado que los gráficos no están del todo trabajados, aunque el apartado artístico se encarga de solucionarlo, y hay otros fallitos menores aquí y allá.

A pesar de los errores que todo juego tiene, ¿en cuántos títulos, mientras estás saltando tejados pasando de la misión principal, te puedes encontrar un par de guardias hablando a escondidas, seguirlos para ver lo que hacen y descubrir que están vigilando una entrada secundaria del edificio al que deberías ir? ¿Cuántos te hacen pensar en lo inesperada que es la muerte de un personaje al que habías pillado cariño, para luego descubrir en Youtube que podrías haberlo salvado si hubieras espabilado? ¿Cuántos te permiten conseguir una llave a un sitio importante mucho antes de saber que la ibas a necesitar y, cuando mucho después te digan que es imposible entrar ahí, el protagonista vacile a su interlocutor porque ya tienes la llave desde hace tiempo? ¿Cuántos juegos te permiten sobrecogerte al entrar en un hotel donde las habitaciones son pequeñas cápsulas en las que apenas cabe una persona, curiosear los diarios de los que viven ahí porque no tienen dinero y provocarte un escalofrío, porque sabes que ya hay sitios así y te preguntas si habrá muchos más en el futuro...? Y podría seguir, pero es hora de ir terminando.

Si te gustó el primer Deus Ex, probablemente te gustará este, pues es un retorno por todo lo alto, con un profundo respeto por el original. Si, en cambio, este es el primer Deus Ex que pruebas y te ha encantado, ¿qué haces que todavía no has probado el primero ? Hace poco salió una reedición por 5 euros y cualquier PC lo mueve, por no hablar de que existe Steam. No te dejes frustrar por el duro inicio y dale un poco de tiempo, porque tiene su recompensa.