Xenoblade Chronicles

Esta no es una entrada más de impresiones (o trolleo) sobre Xenoblade Chronicles; es la entrada de alguien que se ha terminado el juego tras más de 80 horas que han pasado volando, sin ningún momento de aburrimiento, y dejando con ganas de más. El juego ha creado mucha controversia y no me explico por qué (bueno, en realidad estoy seguro de lo que está pasando, pero el motivo de esta entrada no es crear polémica).

Después de 2 años esperándolo como a ningún otro, de temer por su llegada a Europa y de tener que sufrir un "retraso" en su salida (posteriormente, un adelanto) y de tener que recorrer varias tiendas hasta encontrarlo, ¿ha cumplido con las expectativas que tenía puestas en él? Podría decir que sí... más o menos. En primer lugar, es un juego maravilloso que tiene todo lo bueno que imaginaba y algo más pero, por otra parte, no es el mejor RPG que he probado, aunque sí lo pondría en el Top 5 del género y quizá en mi Top 10 personal. Esto no es algo malo, pero siempre se tiende a fantasear en exceso cuando tienes tanto tiempo para esperar e imaginarte cosas. Por suerte, soy alguien bastante comedido en mis expectativas.

Pasando a lo que es el juego en si, debo destacar por encima de todo sus gigantescos y preciosos escenarios (aunque en la parte final pierden gracia para la exploración y la ganan para los combates). La pierna de Bionis es el mejor escenario que he visto en mi vida, y hay otros que son casi igual de fantásticos: todo está lleno de vida, de cuevas ocultas, de zonas secretas, de objetos, personajes y monstruos. Cada palmo del enorme terreno tiene algo divertido por hacer o algo que no esperabas encontrarte. La visión de Bionis y Mekonis al fondo del escenario no hace sino enfatizar la enormidad de la aventura que tenemos por delante, y he disfrutado casi lo mismo explorando el escenario como admirando las vistas y figurándome a qué altura de Bionis y Mekonis me encontraba. Los combates son muy divertidos, sobre todo a partir de cierto punto en el que ganan emoción y posibilidades, y no llegan a aburrir en ningún momento. Las visiones aportan un toque fresco y novedoso y un extra tensión y estrategia, al tener que preocuparte de evitarlas. Resulta destacable en cierto jefe final, donde contemplamos una visión "distinta" ingame y tenemos que evitarla a riesgo de perecer. Para completar los 3 pilares en los que se basan los RPG's a mi juicio, tenemos el argumento: empieza muy bien, con un punto de partida muy original y alguna que otra sorpresa, pero luego se vuelve muy previsible... hasta que, cuando faltan 10-15 horas de juego, te lo sueltan todo de golpe y cobra un nuevo sentido. El final es precioso y totalmente inesperado, y te hace verlo todo desde otra óptica. Si tuviera que criticar algo en este sentido, sería que no hayan repartido más las sorpresas durante todo el juego, en vez de soltarlo de golpe al final, y que la mayoría de personajes, pese a estar bien construidos y generar simpatía, no son memorables. Mis favoritos son Melia y Riki (aunque este no aporta nada al argumento, más que momentos cómicos), y algún villano que no voy a desvelar. Shulk, aunque es un poco soso, cumple bien con su función de protagonista y oculta más de lo que parece. Por lo menos no es un "emo" odioso o el típico prota tonto de shonen que se tira a la boca del lobo sin pensar.

Ahora no me queda más que esperar a ver el siguiente juego de esta gente (ojalá sea el rumoreado Baten Kaitos 3) y seguir paseándome por esos vastos y hermosos parajes, escuchando la bella banda sonora, hasta que me decida a empezar otro juego que, seguro, no será tan satisfactorio.