Skies of Arcadia Legends

Poco a poco, voy completando mi colección de GC, en esta ocasión con este fantástico juego que ha pasado a convertirse en uno de mis favoritos de la consola, aún sabiendo que hay otros mejores. Lo compré aquí en Vandal y me salió caro para ser de segunda mano, pero no me arrepiento de haber pagado hasta el último de esos euros, pues hacía tiempo que no jugaba a un RPG tan bueno. En lo que sigue hay algún spoiler, pero nada que no salga en el manual o en la intro.

Sólo hay dos cosas malas: los gráficos, que a estas alturas ya dan igual y tampoco son tan malos, aunque los personajes tengan unos modelados bastante pobres (pero son muy expresivos); y el hecho de los malditos combates al azar cuando vas en barco, porque es cansino que no pasen ni 5 segundos entre uno y otro y apenas puedas explorar. Por suerte, sólo se hacen pesados en algunas ocasiones, generalmente cuando estás buscando algún sitio en concreto por una zona desconocida.

Todo lo demás es muy bueno, empezando por el sistema de combate, que me ha parecido genial gracias al simple hecho de la barra de espíritu, que le da a las batallas un factor estratégico muy destacable y te produce una gran satisfacción cuando puedes usar desde el primer turno un ataque para el que hasta hacía poco tenías que esperar. También me parece un acierto que todos los personajes puedan aprender todos los hechizos y dependa de ti en qué tipo se especialicen. Y es que ese es otro de los grandes aciertos de Skies of Arcadia: la personalización. No sólo en qué objetos lleva y qué magias aprende cada personaje, sino en esa pequeña maravilla que supone tener una propia base que poder personalizar (dentro de unos límites), y que poco a poco se va llenando de piratas a tu "servicio", a cada cual más variopinto. Si hasta puedes elegir la bandera de tu banda pirata (me quedé con la de Aika porque es graciosa). Como sospechaba, durante el propio argumento se explota ese cariño que le vas pillando a la base, y en un momento concreto es destruida por el enemigo, lo cual fastidia bastante (por cierto, el propio juego se encargó de spoileármelo en una de las escenas de la pantalla de título).

Tal vez el argumento no sea el más original y sea previsible en algunos puntos, pese a no estar exento de sorpresas, pero los personajes tienen un carisma arrollador, incluyendo la mayoría de enemigos, lo cual es muy importante. La historia es emocionante y está bien contada, y no pierde fuelle casi nunca porque va evolucionando constantemente, además de desprender una sensación aventurera que te contagia como jugador. Como fan de One Piece que soy, veo parecidos más que evidentes: Vyse tiene un aire a Luffy y hasta comparte la cicatriz debajo del ojo, y Aika prácticamente es Nami. El juego salió en el 2000, por lo que no sería de extrañar una inspiración en algunas cosas, pero es que al revés también podría pensarse lo mismo, pues aquí tenemos a los almirantes, la armada malvada, las armas del mundo antiguo y una gran puerta que sólo se abre una vez al día. ¿Casualidad?

Lo voy dejando ya, no sin antes destacar las geniales y originales batallas en barco, con montones de decisiones que cambian su devenir y un Delphinus con el que se siente el poder, la estrategia añadida de las debilidades y resistencias a elementos y el hecho de poder cambiarlos en cualquier momento durante la batalla, las interesantes misiones y combates secundarios (la mayoría más difíciles que los de la historia principal) y un enorme mundo lleno de secretos por explorar.