Doki-Doki BOMB! Capítulo 1

Capítulo 01: Encuentro

Akira se había quedado mirando a Lisa, sin terminar de creerse lo que estaba ocurriendo.

“¿Qué…? ¿Estaré soñando? ¿Es… real? ¿O soy yo quien no es real?”

-¡Eh! ¿Quieres espabilar? ¡Te estoy hablando a ti! – Akira por fin pareció salir del trance en el que se encontraba.
-Ah… Er… Hola…
-Al fin dices algo… ¿Se puede hacer qué haces tumbado en un lugar como este?
-Pues… eso me gustaría saber a mí – contestó el chico rascándose la cabeza.
-¿Qué? – la joven se quedó perpleja - ¿Cómo que no lo sabes?
-Pues… Es que… he aparecido aquí de repente… Yo estaba tranquilamente en casa, y de repente me encuentro en este bosque.

Lisa puso cara de no enterarse de nada, y repentinamente volvió a emprender su camino.

-¡Eh! ¿A dónde vas? – ahora era Akira quien se había quedado perplejo.
-Voy a seguir con mi viaje, si no me importa… No tengo tiempo para andar escuchando historias de un loco…
-¡Que no estoy loco! Hablo en serio, estaba viendo una serie en mi ordenador y… - Akira detuvo sus palabras. “… y de repente me metí dentro de ella”, ¿iba a decir algo así? Ella no le iba a creer – Escucha, no tengo ni idea de cómo he llegado aquí, pero este lugar es peligroso, ¿verdad?
-Bueno, supongo que para alguien que no tenga ni idea de cómo defenderse, esto es un infierno…
-¡Por favor, déjame ir contigo! Si me quedo aquí van a matarme en un instante… - el chico juntó sus manos, suplicando.
-Buf… Vaya problema… - Lisa puso su mano izquierda en su sien, con cara de no estar muy a gusto con la situación – En fin, más allá de este bosque debe haber algún lugar habitado… Te acompañaré hasta allí, y luego te buscas la vida, ¿vale?
-¡Estupendo, muchas gracias! – Akira agachó un poco su cabeza. Al menos, era mejor que pudrirse en aquel bosque – Me llamo Akira, encantado – tendió su mano a Lisa.
-Yo soy Lisa Windtail – contestó, mientras le daba su mano para un apretón -. Bueno, creo que podemos hablar mientras andamos, ¿te parece?
-Muy bien – dicho esto, los dos jóvenes empezaron a caminar hacia el este.

Durante el camino, se toparon con un par de arañas, algo menores que la que Lisa había derrotado momentos antes, las cuales no supusieron un problema para la muchacha.

-¿Sabes? No me apetecía mucho tener que andar sola por un bosque como este, así que en realidad me alegro un poco de que nos hayamos encontrado… - comentó Lisa mientras seguían andando.
-¿Ah, sí? – Akira respondió como si estuviera sorprendido, pese a que momentos antes había visto a Lisa comentarlo cuando él aún estaba frente a su portátil. Súbitamente, Lisa detuvo sus pasos, haciendo lo propio el chico un instante después - ¿Qué ocurre?
-Viene algo… - contestó Lisa, quien comenzó a mirar a su alrededor, preparándose para lo peor.

Una brisa recorrió la zona, acompañada del sonido de algo acercándose a gran velocidad a los dos jóvenes. Una voz grave comenzó a resonar:

-¡¿Qué hacen unos insignificantes humanos en mi territorio?! ¡Más os vale que hayáis venido a ser devorados por mí!
-¡¿Quién anda ahí?! – Lisa no parecía intimidada por el hostil ser que se acercaba.

Akira notó que una enorme sombra se proyectaba sobre ellos. Tembloroso, se giró rápidamente para descubrir que, justo detrás de él, se encontraba una gigantesca serpiente de color grisáceo, con sus fauces bien abiertas.

-¡¡Uaaaah!! – el chico cayó al suelo de la impresión - ¿Qué… qué demonios es esto?
-Yo soy Shisath, y vosotros estáis en mi territorio… ¡Ahora recibiréis el castigo por haber cometido tal osadía! – sin más, la serpiente se abalanzó hacia Akira, dispuesta a devorarlo.

El joven se quedó petrificado de miedo, cuando repentinamente notó que la presencia de la criatura se desvanecía, mientras que empezaba a sonar una canción en japonés. Sin darle tiempo a reaccionar, frente a él se sucedían una serie de secuencias animadas, en las que podía ver a Lisa junto a las otras chicas que aparecían en el cartel de presentación de la serie, en la página donde había descargado el capítulo.

-¿Qué…? ¿He vuelto… a casa? – Akira miró a su rededor. Podía ver una cama cubierta por una colcha con el estampado de una de sus series favoritas, la pared llena de póster y las cortinas de su cuarto. Sin duda, había regresado a su habitación – Uf… - se echó en su cama, agotado.

Miró el reloj de su móvil. Las una y media de la noche. Más o menos media hora desde que había empezado a ver el capítulo.

-¿Habré soñado todo esto? – se preguntó, mientras se echaba una mano en la frente – Todo ha sido tan… extraño… - entonces, alguien abrió la puerta de su habitación.
-Akira, ¿aún andas despierto? – era su madre – Venga, a dormir que ya son horas – dicho esto, volvió a su habitación, dejando la puerta entreabierta.
-… - el muchacho no contestó, y fue a cerrar la puerta. Apagó el ordenador y se dejó caer en su cama – Un sueño… No, era demasiado real… Pero… - sin sacar nada en claro, empezó a dormir.

Al día siguiente le visitó uno de sus mejores amigos, a quien le contó lo que había ocurrido la noche anterior.

-¿Qué dices, una serie que hace que te metas dentro de ella? ¿Qué has comido hoy que te está sentando tan mal? – bromeó, mientras se dirigía a la habitación de Akira.
-Hablo en serio, sé que es difícil de creer, pero…
-Ya, claro… ¿Y cómo dices que se llama?
-“Doki-Doki BOMB”, creo que era…

Una vez llegaron a la habitación de Akira, éste encendió su ordenador.

-Oye… no sé qué ocurrirá si lo vemos los dos… a lo mejor nos mete a los dos en el capítulo, pero puede ser peligroso…
-Que sí, que te creo, anda, dale al “play” – dijo el amigo de Akira en tono sarcástico.

Akira inició el reproductor de vídeo, y abrió el último archivo que se había visto.

“ERROR: no puede reproducirse el archivo “Doki-Doki BOMB! – 01”

En la pantalla del ordenador apareció un mensaje de advertencia que dejó a Akira con una cara de tonto que era para sacarle una foto y enmarcarla.

-¿Es esta? Pues no me he metido dentro, de hecho parece que ni se mete ella misma… - comentó, mientras su cara reflejaba una risa maliciosa.
-Qué raro… si ayer no había problema… Voy a ver si puedo bajarlo otra vez… - Akira abrió el navegador de Internet y se dirigió a la web de donde había descargado el primer capítulo… Sin embargo, lo único que se encontró fue con un cartel que rezaba: “Error 404: La web a la que intenta acceder no existe”.
-¡Juas, pues vaya con la serie, seguro que te absorbe hasta los seso! – el amigo de Akira echó a reír, cosa que hizo durante el par de horas que estuvo en casa de éste, jugando a un juego de videoconsola.

Pasadas las ocho de la tarde, el chico se marchó de casa de su colega, recordando el absurdo suceso, lo que le produjo un nuevo ataque de risa.

-Qué raro… ¿Por qué no se ha reproducido siquiera el archivo? – una vez de nuevo frente al ordenador, empezó a teclear de nuevo la dirección en el navegador - ¿Pero qué demonios…? – la página volvía a estar funcional.

Akira empezó a sudar, nervioso. Algo raro estaba sucediendo con esa serie, y fuese lo que fuese, tenía que afrontarlo él solo.

-¿Qué hago…? El segundo capítulo también está disponible para descargar… - vaciló – No debería de bajarlo… Si lo que me ocurrió anoche es real, en cuanto me vuelva a meter ahí dentro, la serpiente me hará papilla… Pero... me muero de curiosidad por saber qué es lo que está pasando…

Pese a que dudaba, sus dedos habían comenzado la descarga del archivo.

-Bueno… por bajarlo no me va a pasar nada… Puedo decidirlo mientras se baja.

Media hora después, Akira tenía frente a él el segundo capítulo de la serie. Tan sólo un par de clics, y el episodio daría inicio.

-Muy bien… De todos modos, no tengo mucho que perder… Lo que tenga que pasar, que pase – diciendo esto, inició la reproducción del capítulo.