Anécdotas del día a día que darían para escribir una entrada en el blog

Esta tarde he ido al cine con mi novia (a ver UP en 3D, por si interesa). En el transcurso de las horas han sucedido varias cosas que me han hecho pensar casi de manera inmediata: "Esto daría para hacer una entrada chorra en el blog". Como son varias, y la mayoría gilipolleces del día a día, las resumiré en unos cuantos puntos y así me ahorro, y os ahorro también trabajo.

1º- Qué típico de los viajes en bus que el/la señor/a mayor que se te sienta al lado te empiece a torrar la oreja; aún cuando le estás dando muestras evidentes de no querer seguir con la conversación.

En cuanto he subido al autobús he ido a sentarme, como casi siempre, a la parte media, a un asiento libre que daba al pasillo. No he reparado en la persona que tenía a mi lado hasta que le he echado un vistazo de reojo una vez ya acomodado. Era un hombre de avanzada edad, de unos 60/70 años. La cuestión es que no ha tardado ni cinco minutos en entablar conversación.

Como están de obras por Palma no le ha sido complicado escoger un tema para romper el hielo y ha empezado hablando del estado de las calles, de la temperatura de estos días...

Me considero una persona educada y no demasiado seca, pero desde hace unos años, le he cogido animadversión a este tipo de situaciones, por lo que contesto con monosílabos o un poco desganado, pero sin llegar a ser borde, vaya. Aún así, el hombre ha seguido con la charla hasta que ha llegado a su destino (unos 10 min. en total). Ni ha sido una tortura ni lo he pasado mal hablando con él, pero hubiese preferido ir en silencio, observando a los peatones, los coches, las calles...

2º- Qué rabia da ir al cine a ver una película para todos los públicos y que la sala esté llena de niños repelentes que se anticipan a lo que va a pasar, aún cuando los doblas, como poco, en edad y también veías venir lo que iba a ocurrir (y no por ello te has puesto a gritarlo a los cuatro vientos).

Poco que comentar, como he dicho antes hemos ido a ver UP y niños de mi alrededor gritando cinco segundos antes lo que iba a suceder a continuación. TODOS iban acompañados por sus padres, por lo que no entiendo la actitud tanto de unos como de otros. Llego a hacerlo yo a su edad y me cae una hostia de esas que marcan un antes y un después en tu vida.

3º- "Esta pa'l tuenti"

Aquí seré breve porque habría mucho de lo que rajar y no tengo suficiente tiempo, pero bueno. En el bus de vuelta a casa me he sentado en la última fila, y unas paradas después de mí se han subido dos chicos y una chica, que se han puesto en una zona de cuatro asientos, dos frente a otros dos. Los tres eran completamente normales, es decir, no podría catalogarlos en ninguno de los grupos sociales más comunes (pijos, killos, raperos...). La cuestión es que a pesar de estar a varios palmos de distancia hablaban a voces, como si fuesen simios.

En cierto momento se han puesto a mirar fotos de una fiesta en el móvil de uno de ellos, y mientras uno parecía alardear de no recordar muchas de ellas porque según sus palabras "iba muy drogado", el otro se ha puesto a berrear: "ESTA PA'L TUENTI". Qué puta rabia, joder. Y no, no soy uno de esos anti redes-sociales porque yo mismo tengo tuenti y Facebook, pero no me veréis chillar a grito pelado que esa foto se va "pa'l tuenti".

He dicho. Y otro día me quejaré de la gente que escucha música con el móvil a toda hostia, porque estos se merecen que les atropelle un camión cisterna.