Ori and the Blind Forest

La belleza de un videojuego...


La primavera es una época ideal para enamorarse, por eso quizá Ori and the Blind Forest ha sido lanzado hace tan poquito. Un juego hecho entre muy pocas personas que rebosa cuidado, detalle, mucho mimo y bastante amor por sus cuatro costados.

Disponible para Xbox360, Xbox One y Pc, no encontramos ante un juego tipo Castlevania o Metroid, en el que tendremos que recorrer el considerable mapeado de un bosque mágico que ha pérdido su poder y se ha sumido en las sombras.

Nuestro prota, un pequeño bichillo, mitad conejito, mitad adorable peluche que ha sido criado por los habitantes del bosque, tendrá la noble tarea de restaurar el equilibrio del lugar. Nosotros le acompañaremos en un entrañable y emocionante viaje para descubrir todos los secretos de tan bucólico lugar.


Pero no nos hagamos ilusiones, no todo es tan dulce como lo pintan. Ori es un juego de plataformeo bastante exigente, en el que tendremos que hacer uso de todas nuestras habilidades y combinarlas bien para poder avanzar. En este sentido recuerda un poco a los movimientos y saltos combinados de Guacamelee.

A medida que vayamos liberando cada zona del bosque obtendremos nuevos movimientos, como doble salto, escalar por las paredes, planear, incluso algunos movimientos algo curiosos como usar a los enemigos o sus disparos para propulsarnos.



Cuando logremos nuevos poderes, tendremos la posibilidad de revisar el mapa, para llegar a zonas que antes no podíamos, y recoger así algunos items que harán más fuerte a Ori, como aumentar su nivel de vida o su capacidad de Magia. Al margen de estos items de mejora, iremos ganando experiencia al eliminar enemigos y con los puntos obtenidos podremos desarrollar nuevas mejoras como salto triple, respirar bajo el agua, más daño con nuestros ataques o mejor defensa, entre otros.

Hablando de la magia, un detalle curioso es que si tenemos energía mágica podemos guardar la partida en cualquier punto, pero a veces nos olvidaremos y si morimos, regresaremos al último punto de guardado perdiendo todo nuestro avance.


También hay zonas especialmente difíciles, donde moriremos decenas de veces, como cuando drenamos el gran bosque (yo perdí unas 50 vidas en la subida).

Con todo es una experiencia sumamente divertida y apasionante si os gustan este tipo de propuestas.



Apartado técnico

Lo mejor del juego junto a su divertida jugabilidad.
Los gráficos son puro amor, con unos fondos y escenarios realmente bellos, que nos hacen detenernos a cada instante. También el diseño artístico es sobresaliente y lo mismo para el diseño de niveles.


Mención especial para la banda sonora, muy, muy buena. De hecho pocos juegos alcanzan el nivel de este, lo que consigue redondear un gran trabajo en todos y cada uno de sus apartados.

Conclusión

Si os lo pasáis al 100% os llevará algo más de 10 horas, descubrir toda la magia que atesora este título. Yo le recomendaría todo el mundo que lo probara porque es deliciosamente adictivo perderse por sus bosques y moverse con Ori por esos escenarios y con esas melodias.

P.D: Habéis visto la referencia a Super Mario?

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