Carde Reviews: Never Dead

El Devil May Cry de Konami...


Sin mucha pena ni gloria ha pasado por nuestras consolas este juego de acción que intenta ser una especie de Hack and Slash inspirado en Devil May Cry obra de Rebellion y auspiciado por Konami. Descubramos qué ofrece.

No pierdas la cabeza

Hace mucho, mucho tiempo, ya se luchaba contra los demonios. Concretamente un cazador necesitaba de una oradora para poder realizar versos que otorgaran el poder suficiente al cazador como para herir y vencer al demonio. De esta forma se convertían en una poderosa pareja.

Never Dead nos ofrece la historia de uno de estos cazadores que perdió a su oradora, pero logró la inmortalidad en una batalla sin igual.

Siglos después, en nuestro presente, dicho personaje llamado Bryce colabora con la agencia NADA (Angencia Anti Demonios) y suelen enviarle misiones cuando se detectan según que presencias demoniacas o activades paranormales.

Así los primeros niveles del juego, nos encargaremos de investigar un hospital abadonado o un museo por la noche, para liberar esos sitios de los demonios, pero a medida que avancemos veremos como se aproxima una gran guerra demoníaca y la trama se complicará.


Al protagonista lo acompaña en cada misión Arcadia, una humana que también es de la agencia y nos hace de guia, al tiempo que nos ayuda con los enemigos y nos da conversación, formando una divertida pareja que no deja de discutir.

Bryce tiene dos tipos de armas al igual que Dante, su espada y toda una serie de armas de fuego, comenzando por las pistolas, metralletas, fúsil de asalto, escopeta y lanzagrandas entre otras, siendo bastante clásicas. Podremos alternar el uso entre una y otras pulsando un botón, y es que hay enemigos que las armas de fuego normales no les hacen daño, por lo que tendremos que recurrir a nuestra espada, y al mismo tiempo hay enemigos explosivos que es mejor matar a distancia.

Uno de los tres puntos negros del juego, sería precisamente el uso de la espada, ya que lejos de blandirse con un botón, se usa, apretando un gatillo y luego haciendo movimientos con el stick derecho (el que controla la cámara) de forma que al pulsar el gatillo perdemos el control de la cámara. No es que sea muy molesto, pero se podría haber resuelto de otra forma, ya que es incómodo.


A medida que derrotemos enemigos conseguiremos experiencia que luego podremos cambiar en una tienda de habildades entre niveles y que permite conseguir suculentas mejoras. Estas se equipan en otra pantalla habiendo un límite, por lo que tendremos que decidir que habilidades tienen prioridad o nos interesan más.

Bryce también podrá arder si se acerca al fuego o electrificarse si hace lo mismo con alguna fuente eléctrica, y de esa forma dañar a los enemigos quemándolos con el solo contacto.

Tendremos que superar algunos puzzles gracias al desmembramiento, ya que Bryce puede arrancarse a voluntad los brazos o la cabeza y lanzarlos a zonas de otras forma inaccesibles. Están bine, pero son pocos y algunos se repiten, perdiendo la gracia. También hay alguna zona plataformera usando la cabeza, lo cual es curioso.


El juego cuenta con un modo on-line cooperativo que nos propone superar toda una serie de desafios. No deja de ser interesante para alargar la vida útil del juego, que rondará las diez horas y consta de 9 niveles que suelen ser largos, al menos en la primera partida.

La personalidad del juego, y sus coleccionables (una serie de objetos dorados), nos pueden hacer darle una segunda vuelta, además de para sacar algunos logros/trofeos que nos queden pendientes.

Es lo que tiene ser inmortal

La principal habilidad de nuestro personaje es que es inmortal, por tanto no podemos morir. Sin embargo los enemigos que nos hieran podrán desmembrar nuestro cuerpo. Es sin duda el principal atractivo del juego.

Podremos perder una o las dos piernas, igual con los brazos o perder literalmente todo el cuerpo, quedandonos para controlar nuestra cabeza. Nuestros enemigos tienen una facilidad asombrosa para despedazarnos, por lo que será normal que perdamos algún miembro en medio de la batalla. Tan sólo tendremos que acercarnos y rodar sobre el miembro perdido para recuperarlo.

Está logrado el hecho de que según nos falten determinadas partes del cuerpo el control del personaje variará. Si perdemos una pierna nos moveremos dando saltitos con la otra, si perdemos un brazo no podremos disparar el arma que llevabamos en él (aunque podremos disparar el arma con el brazo tirado en el suelo). Si somos la cabeza podremos rodar y ir acoplando todas las extremidades o el tronco.


Hay que intentar ser veloz recuperando los miembros porque hay un tipo de demonio, a priori inofensivo que siempre está dando vueltas por la pantalla, pero cuando se desprenda un miembro se lanzará a comerlo. Tendremos unos segundos para matarlo y recuperar el miembro de su interior o lo digerirá.

Aún así, tenemos un poder que permite regenerar los miembros de nuestro cuerpo, ya sea una parte o todo, y que se regenera con el tiempo o bien al coger una poción determinada del escenario.

Aunque seamos inmortales no significa que no podamos ver una pantalla de game over. Esta aparecerá si matan a nuestra compañera, que primero quedará herida en el suelo y nosotros podremos salvar dentro de un límite de tiempo, sino la partida terminará. La otra opción de game over y más angustiosa es si estando desmebrados un demonio nos come la cabeza, impidiendo así regenerarnos y pasando el resto de la eternidad en su estómago. Puaj.


Respecto a los enemigos los principales y más comunes son los doggys, una especie de perro/cerdo con los dientes muy afilados que atacan en grupo, y otros tipo insectoides que van armados con cuchillas, lanzamisiles o ametralladoras y que solo caen ante nuestra espada. También veremos algunos voladores como si fueran arpías, o los enormes panda bears que son bastante duros de roer.
Pero los peores sin duda son unos en forma de "concha marina" que generan más enemigos de forma infinita, y los lanzan al escenario. Sin duda ellos deben ser nuestro primer objetivo, ya que sino toda lucha será en vano.

No faltan a la fiesta algunos enemigos finales de gran tamaño, y todo hay que decirlo, bastante espectaculares en algunos casos. Por desgracia alguno se repite hasta en tres ocasiones durante la partida.


Puntos negros del juego

Hemos hablado del deficiente uso de la espada y la cámara, pero existen otros dos puntos que empobrecen mucho el resultado.

El primero es precisamente su teoricamente noverdad, el desmembramiento, y es que a veces ante una gran cantidad de enemigos que nos rodean (momento en la cámara tampoco ayuda), es muy fácil que nos desmonten, y si sólo nos queda la cabeza no podremos combatir. Por eso hay combates en los que nos pasaremos más rato intentando recomponernos que luchando o jugando en sí, para ser desmontados de nuevo y resulta aogtador y tedioso.

El otro problema es que algunos combates normales contra hordas de enemigos son demasiado largos y se hacen pesados. Posiblemente sea para enmascarar su duración o el tamaño de los escenarios, pero aburre estar luchando 15 minutos en una misma sala contra enemigos que van saliendo (sin contar con los enemigos que producen nuevos).


Apartado técnico

A nivel gráfico destacan el diseño de los personajes con ese aroma japonés que le sienta muy bien, o las secuencias de acción (la Cg's) que narran los momentos más épicos. Las animaciones también son correctas y el hecho de que el personaje se pueda desmembrar es muy original, al igual de como varía su control según nos falten unos u otros miembros.

También podemos destacar la cantidad de enemigos en pantalla, algunos de gran tamaño.

Toda la "magia" que tiene el diseño de personajes se pierde en los escenarios que resultan excesivamente genericos y sosos. A cambio tienen muchos elementos destruibles. De hecho una de las gracias del juego es usar el entorno para dañar o matar enemigos ya que podemos tirar el techo de una sala sobre los enemigos, o romper parades, casi con todo podremos interactuar.


Respecto a la música, muy rockera, en la línea del juego de Capcom para ambientar los combates, incluye el tema principal tocado por la banda Mega Death. Las voces en cambio estan en perfecto inglés, aunque el juego cuenta con subtítulos al castellano.

Conclusión

Never Dead es un juego mediocre en muchos aspectos, y en los que intenta innovar no terminar de funcionar del todo bien. Aún así destila humor y se hace entretenido y espectacular en algunos momentos, especialmente contra jefes, pero la tónica general es de un juego discreto técnica y jugablemente.

Nota: 7

304.340 - 304.711