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Opini�n: The legend of Heroes: Trails in the Sky The 3rd

Tue, 06 Jun 2017 22:35:00

Como medio narrativo el videojuego es fant�stico para la creaci�n de mundos inmersivos gracias a que en un juego de aventuras o del rol con exploraci�n contin�a el grado de conciencia espacial del jugador es mucho mayor que en cualquier otro medio y a la capacidad de crear una ilusi�n de continuidad temporal haciendo que el mundo y sus habitantes evolucionen seg�n avanzamos en la historia de manera org�nica. El rol japon�s es un g�nero lleno de mundos fascinantes y bien construidos.

Esta introducci�n se debe a que The legend of Heroes: Trails in the Sky tiene el mundo m�s trabajado de toda la industria. Pero no s�lo por su incre�blemente amplio plantel de personajes o por sus naciones definidas a la perfecci�n; cada cual con inter�s propios y conflictos con las dem�s. Tampoco por su intrigante lore o su detallismo a la hora de justificar lo mejor posible su propia l�gica interna. Es que estamos hablando de una franquicia que coge lo que estaba resumiendo en el p�rrafo de arriba y lo aplica no s�lo en una entrega individual, sino en todas ellas. Trails in the Sky The 3rd es el cierre del primer arco argumental de la serie y la tercera aventura ambientada en Liberl. Es indispensable haber jugado a los dos anteriores antes de jugar a esta entrega.

A nivel gr�fico no hay mucho que decir. En pleno 2017 desde luego puede parecer anticuado, aunque hay que recordar que el juego sali� en Jap�n hace diez a�os y Falcom nunca ha destacado por tener unos bolsillos muy hondos ni hacer triples A en lo que al apartado visual se refiere. Los dise�os de los personajes tienen un olorcillo a anime noventero muy atractivo y la direcci�n art�stica es fant�stica, destacando por encima de todo unas ciudades detallad�simas que por desgracia est�n todas rescatadas de las dos entregas anteriores. De hecho el juego recicla demasiados escenarios de sus precuelas, se nota que fue un desarrollo m�s corto y un juego s�lo para fans. Los nuevos escenarios, en su mayor�a mazmorras, funcionan bien a nivel visual aunque como es costumbre en la saga su dise�o no es lo que uno llamar�a alucinante. La jugabilidad no pone nunca demasiado �nfasis en el mazmorreo, la chicha est� m�s en los combates y los juegos est�n construidos con esto en mente.

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En cuanto a la banda sonora, aunque es cierto que el juego no se corta a la hora de utilizar temas de los dos cap�tulos previos su banda sonora original es tan abultada como la de cualquier juego individual. Esto significa que Trails in the Sky The 3rd tiene el equivalente a tres juegos en m�sica a su disposici�n para acompa�ar su historia y jugabilidad. Hay alguna escena donde da la impresi�n de que escogieron una canci�n al azar de alguno de los juegos sin pensarselo mucho, pero por regla general las composiciones est�n elegidas a la perfecci�n y cuando llegan los momentos m�s intensos y dram�ticos la m�sica hace un trabajo de libro acentuando o generando los sentimientos que tocan. Un pu�ado de tanto motivos como temas recurrentes muy bien puestos acaban por redondear una banda sonora espectacular.

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Los nuevos temas presentan unos tonos muy melanc�licos o a veces misteriosos, cuando no ambas cosas a la vez. Esto funciona a la maravilla dada la naturaleza de los escenarios y el tono de la historia. Aqu�, en este juego, podemos encontrar algunas de las mejores composiciones de la franquicia, ya sean devastadoras composiciones tr�gicas que evocan con una facilidad pasmosa las escenas en las que suenan o los casi espirituales temas que suenan en las localizaciones m�s de ensue�o.

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En cuanto a la jugabilidad, el sistema de combate permanece inalterado respecto al de Trails in the Sky SC. Batallas por turnos en un escenario dividido en cuadr�culas donde moverse es una forma perfectamente v�lida de gastar un turno y los ataques tienen distintos radios de acci�n. Entre las t�cnicas que podemos utilizar se incluyen aquellas que se fijan sobre un enemigo pero afectan tambi�n a un �rea a su alrededor o las que s�lo afectan a un �rea del escenario con independencia de que haya o no blancos v�lidos en la susodicha. A mayores de los cl�sicos ataques f�sicos, la ya mentada opci�n de moverte o las opciones de objetos y hu�r, los personajes pueden utilizar artes m�gicas o habilidades �nicas llamadas crafts. Hay dos barras separadas que rigen el uso de magia y habilidades, EP y CP respectivamente. Los EP funcionan como los puntos m�gicos de toda la vida, gastandose cada vez que lanzamos un hechizo y recuper�ndose con objetos o descansando.

En cuanto a los CP, todos los personajes parten de cero y el medidor se va llenando seg�n recibimos da�o o lo causamos. Es interesante que cuantos m�s enemigos atrapemos en nuestras ataques m�s nos subir� el CP, por lo que las magia de �rea encuentran aqu� un valor estrat�gico a�adido. A veces puede venirnos bien que un enemigo invoque a montones de aliados si podemos atraparlos todos en un poderoso conjuro y aumentar de forma dr�stica nuestros CP. Otro factor importante a tener en cuenta a la hora de luchar es que, mientras que las artes m�gicas tienen un retardo, ejecut�ndose no cuando las seleccionamos sino en el siguiente turno del personaje, los crafts son inmediatos.

Cualquier personaje que haya superado los 100 CP puede interrumpir el fluir natural de los turnos para lanzar su ataque definitivo, su S-craft, a cambio de devolver el medidor a cero. El m�ximo de CP es 200 y en caso de lanzar un S-craft con tal cantidad el movimiento resultar� incluso m�s devastador. El jugador puede ver el flujo de los turnos en la parte izquierda de la pantalla en todo momento. Antes de ejecutar cada acci�n se muestra d�nde caer� el siguiente turno del jugador en el flujo. Algunas acciones provocan m�s retardo que otras. Lo m�s interesante de todo esto es como ciertos turnos tienen asociadas bonificaciones o penalizaciones. Por ejemplo, algunos turnos garantizan golpe cr�tico al personaje que caiga en el mismo mientras que otros pueden anular todo el da�o, haciendo los ataques inmediatos in�tiles. Esto crea una din�mica muy interesante en la que no siempre convendr� usar la mejor acci�n, sino que ser� necesario prestar atenci�n al flujo de los turnos para intentar que nuestros personajes caigan en las bonificaciones y eviten las penalizaciones. Por ejemplo, yo me he encontrado cargando un hechizo curativo aunque est� al m�ximo de vida para evitar que el enemigo caiga en una bonificaci�n que le permitir�a causar K.O. de un golpe en ese turno o he tenido que repensar qu� hacer con mi atacante f�sico cuando por desgracia ca�a en un turno en el que el da�o se anulaba teniendo en cuenta c�mo afectar�a lo que decidiera al flujo.

Es un sistema de combate f�cil de aprender pero que tiene la suficiente complejidad como para permitir que el jugador pruebe con varias estrategias y nunca llega a aburrir. En el lado malo de las cosas puede hacerse algo lento. El combate no se agilizar�a y pulir�a al m�ximo hasta el paso a la tercera dimensi�n y aun as�, este juego se siente muy completo y satisfactorio a nivel mec�nico, sobre todo si lo comparamos con los otros componentes de su arco. Esto es porque, debido a su naturaleza como tercera entrega, se asume del jugador cierto grado de maestr�a sobre el sistema de combate, atrevi�ndose a plantear retos bastante interesantes en forma de largos jefes donde es necesario conocer las distintas magias y saber gestionar bien los CP. Amen de cuidarse de cambios de estados y bajadas de estad�sticas, pues ambas cosas pueden ser mort�feras y es algo que los jefes no dudar�n en intentar. Durante todo el juego al menos la mayor�a de enemigos normales tambi�n son susceptibles a esto, y es una estrategia m�s que viable para lidiar con grupos molestos de enemigos o monstruos invocados por el jefe de turno. En otras palabras, The 3rd le saca todo el jugo posible a su sistema de combate. Tampoco es un juego demasiado dif�cil en su dificultad normal, pero no da la sensaci�n nunca de ser f�cil en exceso.

Con 16 personajes jugables que parten, como m�nimo, del nivel 90, la sensaci�n de acabar controlando a un enorme grupo de h�roes para hacer frente a la amenaza m�s poderosa de la trilog�a es impagable. Los crafts se aprenden por nivel y la magia se sigue desbloqueando utilizando los quartz, gemas que podemos sintetizar y que proporcionan subidas de estad�sticas u otros efectos a los personajes a los que se las equipemos, as� como contribuir con una �puntuaci�n� elemental. Y es que as� se aprenden artes m�gicas. Los quartz se equipan formando l�neas y los valores elementales de todos en una misma l�nea se suman. Alcanzar ciertos valores es lo que desbloquea los diferentes hechizos. De esta forma todos los personajes pueden aprender cualquier las magia pero nunca todas y es importante construir un equipo equilibrado mirando adem�s que sus estad�sticas no queden hechas un desastre por equipar, por ejemplo, un quartz que sube el ataque y baja la defensa junto a uno que sube la defensa y baja el ataque. Se deja a elecci�n del jugador equilibrar una buena selecci�n de hechizos con unas buenas estad�sticas y el sistema es bastante flexible sin ser tampoco necesario pasar demasiado tiempo haciendo pruebas para conseguir un equipo capaz de derrotar al jefe final.

La acci�n se ambienta en una sucesi�n de mazmorras intercaladas de vez en cuando con alg�n escenario reciclado de los juegos anteriores, a veces tal cual otras con m�nimos, si bien efectivos en m�s de una ocasi�n, cambios. El n�cleo jugable est� en los combates as� que como estos cumplen el sistema funciona, pero nadie deber�a esperarse explorar enrevesadas estructuras aqu�. Las mazmorras son sencillas y lineales, con alguna bifurcaci�n y peque�os secretos. Es interesante que esta es la �nica entrega de la saga donde no seguimos el viaje de los personajes a lo largo de un pa�s, por lo que la estructura, ya no en cuanto a jugabilidad sino de la narrativa, es muy distinta. No se puede decir que sea mejor pero es un cambio de aires y adem�s a la historia que quiere contar The 3rd le acaba sentando bien.

A nivel argumental Trails in the Sky The 3rd es un ep�logo y unos ap�ndices de toda la trilog�a. Por un lado tenemos un argumento principal que se va desarrollando a un ritmo m�s r�pido de lo normal en esta saga seg�n superamos mazmorras. Por regla general cada cap�tulo abarca una mazmorra en la cual hay algunas interacciones entre personajes para, justo al final, tener un encontronazo con uno de los villanos y cerrar con un recuerdo del pasado de nuestro protagonista. Gracias a las diferencias en las propias mazmorras y a un par de momentos en los que la historia juega con nuestras expectativas alterando un poco su estructura, la narrativa nunca llega a hacerse repetitiva aunque si algo se le puede criticar es que s� es siempre bastante irrelevante en el gran esquema de las cosas. No pasa demasiado en la trama principal de The 3rd que haga avanzar la historia global de la saga. En realidad esto es porque m�s que otra pieza del gran puzzle este juego es un gigantesco arco argumental para dos personajes al que se le suman las interacciones entre un plantel incre�blemente carism�tico y que el fan lleva siguiendo desde la primera entrega. Y podr�a argumentarse que la historia es fant�stica en el sentido de que logra lo que se propone y no se limita a aprobar raspado, sino que saca matr�cula de honor. Aqu� el protagonista es uno de los mejores personajes de la serie, acompa�ado por una nueva cara que no se queda atr�s. Est�n muy bien escritos, siendo personajes multifac�ticos y con una din�mica muy entretenida en los momentos m�s desenfadados; enternecedora y emocionante en los dram�ticos.

Los otros personajes son tan buenos como en entregas anteriores aunque muchos se nota que est�n aqu� un poco de paso. Esto no significa que no se impliquen en la historia. Esto es Falcom, aqu� cuando hay una escena todo personaje presente habla y hay conversaciones muy interesantes y tambi�n personajes que si bien hab�an cerrado su arco argumental en el anterior juego encuentran en esta entrega un agradecido ep�logo que acaba por redondearlos a�n m�s. Ayuda que los di�logos sean de un alt�sima calidad como de costumbre. Se puede criticar que a veces recurren a frases algo t�picas para rellenar, pero acostumbrar fluir muy bien y cada personaje es reconocible cuando habla. M�s all� de manearismos o patrones de habla forzados, cosas de las que en un vistazo superficial s�lo podr�a acusarse a un personaje y ser�a un error juzgar ese libro por su portada, las diferencias las encontramos en las sutilezas, porque todos los miembros de este grupo son personajes con varias capas pero tampoco necesitan gritar c�mo son a los cuatro vientos sino que sus personalidades surgen con naturalidad a partir de sus di�logos y acciones.

A todo estoy hay que sumarle que, por fortuna, Falcom respeta a sus jugadores lo suficiente como para saber cuando callarse. El mundo de Trails in the Sky tiene algunas mec�nicas internas algo complejas y, de hecho, la ciencia ficci�n m�gica de esta saga es bastante original e intrigante y en este juego se abordan varios aspectos de su funcionamientos, pero nunca sienten la necesidad de soltar un tocho de exposici�n redundante. Conf�an en la capacidad de su p�blico para entender todo a la primera, algo que me encantar�a que hicieran todas las desarrolladoras. Tambi�n voy a decir que algunas de las explicaciones resultan demasiado convenientes y otros detalles del mundo se dejan en el aire o se excusan de forma vaga un poco con la cantinela de l�gica de videojuego.

A parte de la historia principal existen varias puertas repartidas por las distintas mazmorras. Hay tres clases: lunares, estelares y solares. Casi todas requieren del jugador que cumpla alg�n requisito para abrirlas y algunas vienen con jefe incluido. Detr�s de ellas est�n los ap�ndices de Trails in the Sky. B�sicamente contienen o bien informes que dan informaci�n sobre el lore o peque�as historias ambientadas en el maravilloso universo de la saga. Las puertas lunares contienen historias m�s largas, las de las estelares son algo m�s cortas y tras las puertas solares hay minijuegos que pueden o no incluir alguna escena de historia. Sobre estas �ltimas: los minijuegos alternan entre lo divertido y sorprendentemente trabajado, lo curioso y lo frustrante. Y me refiero al minijuego de pesca cuando digo frustrante, s�. Son en el mejor de los casos una buena distracci�n de tanto mazmorreo, aunque bueno, todas las puertas lo son. Porque aunque hay un pu�ado que son s�lo v�deo, las hay jugables. Y algunas de las puertas lunares esconden de hecho segmentos jugables bastante largos y que nos sacan de las mazmorras para plantarnos en alguna zona ya explorada en los anteriores juegos pero en otro marco temporal. Y aqu� entran de nuevo las l�neas con las que abr� este texto.

En los dos anteriores juegos el jugador ha viajado a lo largo de su naci�n donde los di�logos de los NPCs cambiaban pr�cticamente cada vez que estornudabas. Y lo que hace especial a esta saga es que se trata de una �pica que ya abarca siete entregas y todo un continente con m�ltiples naciones. En los dos primeros juegos de este primer arco argumental vemos a los habitantes de un reino vivir sus vidas y hay buenos personajes entre los NPCs, que te hacen sonre�r con sus tonter�as o con los que empatizas con sus problemas. Aqu� no puedo evitar destacar otra vez la calidad de los di�logos y, antes de que se me olvide, de la genial localizaci�n de XSEED. Por eso, cuando tras una puerta me espera una ciudad cinco a�os antes de los acontecimientos del primer juego y veo a un personaje que conozco abrir su tienda o a cierta chica problem�tica tom�ndose un helado sin ninguna preocupaci�n en el mundo� Me importa. Es algo a lo que toda narraci�n deber�a aspirar, a lograr que a tu p�blico le importe lo que le est�s contando.

Hay alguna ida de olla que resulta hasta divertida y otro par de puertas que exploran momentos en la historia de la saga que ning�n fan querr� perderse, como la juventud de cierto miembro adulto del grupo. Pero la verdad que que estas puertas s�lo tienen sentido si has jugado a anteriores juegos. Est�n ah� para que mientras exploras y hablas con todos tengas momentos de �aj�, as� que este personaje estaba haciendo esto hace cinco a�os� o ��dios m�o, no sab�a que x e y se conoc�an, ahora todo tiene m�s sentido!� y en ese sentido son maravillosas. Me decepciona que existan aisladas de la narrativa central: los personajes s�lo reconocen la existencia de las puertas de forma vaga y se deja claro que sus contenidos s�lo son visibles para el jugador. Pero quitando eso me parecen un recurso de cine para meter fanservice. Qu� es lo que es, fanservice de la mejor calidad.

Fuera de las puertas no hay muchos NPCs con los que interactuar, aunque los que hay cambian sus di�logos siempre que tenga sentido que lo hagan y dentro de las puertas los cambian m�s de lo que cabr�a esperar. En una de ellas en concreto existe un gran ejemplo de lo que hablaba en la introducci�n de este texto. Se trata de una historia que te hace vivir los primeros meses en un instituto, y a parte de varios momentos que son puro oro para los fans de la saga, lo que m�s recuerdo de esta puerta en concreto es a la chica que quer�a revivir el club de m�sica y como al final lo consigue con ayuda del chap�n de la clase. Es una tonter�a como una casa, una historia sencilla y bastante est�pida si la analizas como tal aislada del resto del juego. Pero la gracia es que est� ah�. Es una subtrama opcional que se desarrolla de forma cre�ble al margen de las acciones del jugador y como para descubrirla tuve que buscarla por mi cuenta, pues para cuando llega a su final resulta que Falcom ha conseguido que esta tontada me importe. Este es el poder del medio interactivo en una de sus formas m�s sencillas y sin embargo yo al menos no puedo negar su eficacia. Me encantan estos juegos.

Por �ltimo, me gustar�a aplaudir la valent�a de los escritores a la hora de abordar ciertos temas tab� en la historia del juego y su talento para hacerlo con una madurez y elegancia dignas de elogio. En general se trata de una historia muy juvenil con un marcado estilo de anime shonen, pero cuando toca tratar temas algo m�s turbios evita caer las trampas m�s t�picas de este tipo de tramas y consigue que esas escenas complementen y mejoren la narraci�n en vez quedar forzadas como un intento de fingir madurez. La madurez no est� nunca en los temas que se tratan sino en la forma en la que se hace. Y en ese sentido esta historia, en principio para adolescentes, sabe mostrar en algunos momentos una gran madurez.

Por todo lo que se ha ido mencionando a lo largo de este texto Trails in the Sky The 3rd es un juego dif�cil de valorar. Su calidad en muchos sentidos depende de sus predecesores. De por s� no hace gran cosa para construir su propio mundo, sino que se apoya en el que ya hab�an construido los dos juegos anteriores y lo expande. Pero al mismo tiempo es un juego que rezuma encanto, por las puertas y por su historia que tiene cierto tono nost�lgico que le viene de perlas al conjunto. Y el cierre, lo que viene siendo la escena final, es absolutamente perfecto. Los personajes son fant�sticos, siendo el arco argumental de los dos principales uno muy bien llevado, lleno de momentos emocionantes y las puertas son el peor de los casos una curiosidad graciosa y en el mejor un regalazo para los fans. Entiendo que este juego sea visto como el mejor de la saga por muchos fans. Yo creo que desde un prisma m�s objetivo no lo es, pero se trata de una experiencia que es muy f�cil recordar con cari�o una vez te lo has pasado. Para fans de los dos primeros Trails in the Sky este juego es imprescindible y para fans del g�nero toda la trilog�a lo es.

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Opini�n: NieR:Automata

Sat, 29 Apr 2017 09:37:00

NieR:Automata es un juego muy especial. Se trata de una obra de autor con una jugabilidad que se niega a acomodarse en un �nico g�nero y cuya narrativa busca explorar los l�mites de lo que es posible en el medio interactivo. Tambi�n es el cuarto videojuego dirigido por Yoko Taro ambientado en el multiverso de Drakengard por lo que, aunque puede disfrutarse a la perfecci�n como producto independiente, los fans tendr�n mayor facilidad para comprender algunos puntos del gui�n y disfrutar�n m�s de las m�ltiples referencias a otras obras del creativo japon�s. Se lanz� en todo el mundo entre febrero y marzo de 2017 y lleg� a Espa�a con doblaje tanto ingl�s como japon�s, as� como subt�tulos en castellano.

A nivel t�cnico el juego deja ver un presupuesto ajustado, con un apartado gr�fico m�s cercano a la anterior generaci�n y alg�n que otro problema de popping y ocasionales bajones en la tase de im�genes por segundo, si bien suceden sobre todo mientras exploramos el mundo abierto y durante los combates acostumbra mantener unos s�lidos y agradecidos 60 fps. Exploramos un mundo sin tiempos de carga que, aunque en tama�o se hace peque�o para lo que estamos acostumbrados en los tiempos que corren y tampoco destaca en especial forma por su dise�o de escenarios, resulta a nivel art�stico una aut�ntica delicia. La paleta de colores elegida es perfecta y hay momentos donde el fondo es digno de un cuadro. Pero no uno cualquiera, y esto es importante, sino uno que simboliza las emociones y los temas que el juego pretende transmitir. Automata tambi�n juega de forma muy inteligente con sus colores, presentando por ejemplo tonos monocromos en algunas zonas y secciones. S�lo con los paisajes que recorres Automata establece un tono y ambientaci�n opresivos, desesperanzadores y a la par nost�lgicos, a las mil maravillas. Lo mismo podr�a decir de los dise�os de personajes y enemigos. Le quedan como un guante a NieR:Automata y acaban por darle al t�tulo una personalidad visual �nica. Podr�a quejarme de que la selecci�n de enemigos no es demasiado variada, pero la verdad es que el juego hace un gran trabajo aprovechando al m�ximo los que tiene y presentando m�ltiples variantes de sus dise�os que, adem�s, tienen cierto sentido l�gico en la ficci�n que nos presenta. De la misma manera, los personajes que controlamos cuentan con un aspecto marcadamente diferente al del resto de NPCs que nos toparemos durante la historia pero, de nuevo, esto es una decisi�n consciente que no s�lo tiene sentido argumental sino que ayuda a hacer destacar el dise�o de los protagonistas a�n m�s gracias al contraste. Destacar tambi�n el gran trabajo en las animaciones, que sobre todo en combate ayudan a darle mucho estilo y sensaci�n de velocidad a la acci�n.

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La banda sonora de NieR:Automata, obra principalmente de Keiichi Okabe y Keigo Hoashi, no deber�a encontrarse con demasiadas dificultades para ser la mejor del a�o. Hay s�lo un pu�ado de juegos que podr�an competir por el puesto. Adem�s, en lo que concierne al uso de la m�sica dentro del juego, se trata directamente de uno de los mejores que ha visto esta industria nunca. Las composiciones se complementan con los escenarios para acabar por redondear la ambientaci�n, pero lo que de verdad destaca es como cada una cuenta con un n�mero insano de variantes que van entrando y saliendo de la melod�a de forma din�mica en funci�n de la situaci�n en la que se encuentre el jugador, y alguna que otra reservada para momentos clave del argumento. Las transiciones dentro de una misma canci�n son muy fluidas y rara vez quedan forzadas, por lo que mientras jugamos es casi como si tuvi�ramos una orquesta sigui�ndonos a todas partes. No obstante, es durante los combates contra jefes finales o escenas importantes de la historia es donde m�s destaca. Por ejemplo, la m�sica bajar� el tempo y usar� s�lo una base instrumental cuando un jefe se aleje y estemos a la espera de una oportunidad para da�arle... Para subir el volumen y a�adir coros en el momento en el que arremete contra nosotros y podemos contraatacar. Los propios temas tienen un estilo particular que s�lo podr�a encajar en este tipo de historia. No exagero cuando digo que el acompa�amiento musical en Automata es siempre perfecto. Sus escenarios, sus combates y sus escenas, son inseparables de su m�sica.

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En cuanto a su jugabilidad base, NieR:Automata es un ARPG japon�s con un sistema de combate que bebe de los hack and slash. Sin embargo es importante tener en cuenta que en cuesti�n de combos ni se acerca a la complejidad de algo como Bayonetta, lo cual es lo normal si tenemos en cuenta que sigue siendo un juego de rol y no un hack and slash de verdad. A lo largo de la aventura manejaremos a distintos personajes con habilidades �nicas, pero en esencia todos luchar�n usando combos simples con una o dos armas (en este �ltimo caso una se corresponde a un ataque ligero y la otra a uno pesado). Hay m�ltiples tipos de armas que pueden cambiar dr�sticamente la forma en la que jugamos, y adem�s se puede establecer un segundo set de armas al que podemos cambiar en cualquier momento incluso en mitad de un combo. Las armas pueden mejorarse usando materiales que encontramos por el escenario o al derrotar enemigos a fin de aumentar su poder de ataque y desbloquear ciertos beneficios como un bonus en la velocidad de ataque. En batalla tambi�n podemos esquivar con un bot�n. Esto supone la �nica forma de evitar ataques enemigos, pues no existe opci�n de defensa. Esquivando en el momento justo podemos ganar la oportunidad de realizar un combo devastador contra el enemigo de manera autom�tica. No hay l�mite a cu�ntas veces seguidas podemos esquivar y a decir verdad el juego es bastante permisivo con el timing. La forma en la que balancea esto es haciendo que no contemos con frames de invencibilidad mientras esquivamos. No es un sistema tan t�cnico como otros, pero sigue existiendo el riesgo suficiente al usarlo y en caso de lograr ejecutar el contraataque el resultado es muy satisfactorio gracias al puro espect�culo visual que supone. Sin olvidar que al basar el sistema en la inexistencia de un comando de defensa el jugador nunca deja de moverse, saltar y esquivar, dotando a los combates de agilidad y estilo. Aqu� es donde entran en juego tambi�n las ya mentadas animaciones, que acaban por redondear un sistema de lucha que, sin ser especialmente profundo de por s�, es por lo menos todo un espect�culo de ver. Luchar nunca se vuelve aburrido en NieR:Automata, en parte gracias a sus constantes cambios de perspectiva y a los pods. Empezar� hablando de estos �ltimos. Con un bot�n podemos hacer que el peque�o robot flotante que nos acompa�a dispare a los enemigos ya sea una r�faga de balas, misiles teledirigidos u otra clase de proyectil dependiendo del pod que tengamos equipado. A mayores cada pod podemos equiparlo con un programa que activamos con otro bot�n y cuenta con tiempo de cooldown. Estos son por regla general destructivos ataques especiales, desde un rayo l�ser que atraviesa l�neas de enemigos hasta una bomba de gravedad que los atrapa en un punto del escenario. Los enemigos y sobre todo los jefes adoran atacar desde la distancia, por lo que a veces el juego puede convertirse en un intercambio de disparos hasta que consigamos reducir las distancias entre nosotros y nuestro objetivo. Tampoco es como si usar el pod nos limitara nuestras otras acciones. Podemos estar atacando con nuestras armas blancas al mismo tiempo que disparamos y lanzamos ataques especiales.

A a�adir variedad tambi�n ayuda que la perspectiva cambie en muchos puntos del desarrollo para experimentar con distintos estilos jugables. De pronto este juego de acci�n tridimensional en tercera persona puede cambiar a vista cenital o convertirse en un Castlevania. Los cambios son r�pidos y fluyen muy bien. Otro estilo que al juego le encanta adoptar es el de los bullet hell. En ciertos momentos de la historia nos montaremos en una nave transformable en mecha y surcaremos los cielos enfrentando a numerosas naves enemigas. Los controles y las reglas del juego no cambian ni siquiera entonces y ah� est� la clave por la que todo el popurr� de g�neros de Automata funciona tan bien. Incluso en el mecha podemos usar una espada combinada con los disparos de la misma forma que har�amos en tierra y tenemos tanto ataque ligero como pesado. Ciertas balas pueden ser repelidas con disparos, otras s�lo con un ataque bien medido con la espada y esquivar sigue funcionando para evitar ataques enemigos de la misma forma, aunque es verdad que no existe contraataque en el aire. Al final lo que el jugador debe aplicar en cada situaci�n es m�s o menos siempre lo mismo. El juego proporciona variedad sin obligar al jugador a aprenderse distintos esquemas de control y reglas.

Una cr�tica al sistema de combate ser�a el fijado de blanco, que no siempre funciona como deber�a y a veces es frustrante cuando se empe�a en fijar a un enemigo lejano en vez de al que queremos atacar. Pero en general, sin llegar a ser ni de cerca el mejor de su g�nero, destaca gracias a sus particularidades y cumple su funci�n durante todo lo que dura la aventura. Y todo esto sin contar los chips de ampliaci�n, que son los que de verdad a�aden profundidad rolera a la jugabilidad. B�sicamente contamos con un espacio ampliable para equipar chips que nos dan ciertos beneficios tanto pasivos (recuperaci�n de vida cuando no estamos combatiendo) como activos (a�adir una onda a los ataques f�sicos para que tambi�n puedan da�ar a enemigos en la distancia). La forma en la que optemos por distribuir nuestros chips es lo que har� que podamos crear un personaje propio, para el estilo de juego en el que nos sintamos m�s c�modos. Pero ojo, pues si caemos en combate perderemos todos los chips equipados y la experiencia acumulada desde el �ltimo guardado, teniendo que volver al lugar donde fuimos derrotados para recuperarlos. Si perdemos la partida otra vez o tardamos demasiado se perder�n para siempre. Esto se ata directamente con los temas del juego. Todo el sistema de guardado, que como el juego insiste en recordar nunca es autom�tico, est� construido de forma que conecta con los miedos y preocupaciones de los protagonistas. Es dif�cil explicar sin entrar en detalles que podr�an estropearle la sorpresa a quienes quieran empezar el juego sin saber nada, y tampoco es perfecto. Si asumimos la existencia del sistema de guardado dentro de la ficci�n surgen algunas inconsistencias menores y alg�n punto del gui�n puede parecer demasiado conveniente. Pero, sigue siendo brillante como la narrativa de Automata coge algo tan sencillo como guardar la partida, y lo integra en su historia de forma inteligente para transmitir una idea al jugador a trav�s de jugabilidad pura y dura. Y es que a partir de aqu� no podemos seguir hablando de mec�nicas jugables sin hablar tambi�n de c�mo se entremezclan con la trama para acabar de construir la maravillosa experiencia que es NieR:Automata.

Lo primero que voy a destacar es como el juego integra de forma muy inteligente la configuraci�n b�sica de iluminaci�n sonido y dem�s en la trama, adem�s de justificar argumental y mec�nicamente la presencia de su interfaz en pantalla. Es un peque��simo detalle pero en el que puede empezar a apreciarse la tendencia del juego a buscar formas de explotar el medio interactivo para maximizar la inmersi�n del jugador. Podr�a decirse que la narrativa esencial de un videojuego se compone de interacciones jugador-sistema. En un libro leer�amos como un personaje lanza un tajo, en una pel�cula lo ver�amos en pantalla� En un videojuego pulsamos un bot�n y el sistema responde ejecutando la acci�n. Para simplificar, vamos a asumir que estas interacciones representan el vocabulario de un videojuego. Cuanto mayor espacio le d� al jugador para expresarse m�s rica ser� la narraci�n. Un ejemplo del propio juego lo encontramos en los enemigos pasivos de ciertas zonas. NieR:Automata es un ARPG con un sistema de combate bastante competente, como ya hemos discutido. Sin embargo, de vez en cuando (sobre todo en sus primeros compases) nos presentar� una situaci�n en la que no es necesario luchar, pues los enemigos no actuar�n de forma hostil sin provocaci�n previa. N�tese que el juego toca temas como la violencia y los personajes se cuestionan todo el rato si de verdad hay tanto que los separe de sus enemigos. La opci�n de tomar un acercamiento m�s pacifista al avance por los escenarios tiene perfecto sentido dentro del abanico tem�tico del juego. Pero, �c�mo presenta Automata est� elecci�n? F�cil, no lo hace. No hay elecci�n en un di�logo que determine que vamos a hacer a continuaci�n y las mec�nicas no cambian. Podemos pasear entre enemigos y, en cualquier momento, pulsar el bot�n de atacar para sacar nuestras armas. Incluso existe un minijefe que es por completo opcional y los di�logos siguientes cambiar�n ligeramente para adaptarse a la decisi�n que hayamos tomado, confirmando que todo esto era, en efecto, intencionado. Esta no s�lo es una forma de elegir muy org�nica, sino que exige m�s del jugador que si tan s�lo tuviera que limitarse a escoger entre dos opciones en un di�logo. Y le implica m�s en los temas de la historia. Porque NieR:Automata hace algo imposible en cualquier otro medio de expresi�n art�stica. Le presenta al jugador unas ideas, le pregunta por su opini�n� Y le da la opci�n de actuar en consecuencia. Te das cuenta de lo brillante de la ejecuci�n de esta idea cuando te sorprendes al ver en un v�deo a alguien masacrar a los enemigos que tu dejaste vivir o viceversa. Queramos o no nuestras acciones en estos espacios virtuales dicen un poco sobre nosotros. Y este juego est� emperrado en recordarnoslo. Estas peque�as decisiones en la forma en la que afrontamos una situaci�n, que voy a llamar decisiones irrelevantes (pues no afectan en el gran esquema de las cosas al desarrollo de la trama ni al contenido que tendr� el jugador disponible), existen en todos los videojuegos y usarlas en favor de reforzar la inmersi�n y la narrativa es algo que no hacen los suficientes. En cuanto a Automata, cuando plantea una decisi�n relevante tiende a hacerlo de la misma forma, d�ndole al jugador el control total sobre el personaje y siendo la forma con la que interact�a la que determina su elecci�n. S�lo cuando no le queda m�s remedio tira de opciones en una caja de texto. Y esto se ve tambi�n muy claro en la forma en la que se desbloquean sus finales de broma. NieR:Automata cuenta con cinco finales, A a E, que se desbloquean avanzando con normalidad en la aventura. Los finales D-Z son falsos finales con un tono en general humor�stico que se desbloquean interactuando con el mundo de forma est�pida o llevandole la contraria al juego. Por ejemplo, ir en direcci�n contraria a donde debemos ir por motivos de la historia de inmediato desencadenara siempre uno de estos finales. Es genial porque lo normal ser�a que el juego pusiera una barrera invisible o le quitara el control al jugador para que los personajes se dieran la vuelta solos. Pero no, Automata respeta y recompensa, en cierta forma, las decisiones m�s tontas que podamos tomar dentro de la historia.

Otro concepto interesante con el que Automata juega es la conexi�n avatar-jugador. Es natural que algunos desarrollos argumentales tengan m�s impacto cuando no le est�n sucediendo a un tercero sino al personaje del cual el jugador tiene el control. El juego sabe cuando poner el foco del protagonista sobre el mejor personaje posible para cada momento. Incluso sorprende a veces con estas decisiones (y por esto tampoco me extender� mucho m�s en este punto) pero al final siempre queda demostrado que era la mejor elecci�n posible. Es importante tambi�n que tampoco es algo de lo que el juego abuse. No hay tantos personajes que vayamos a controlar y normalmente nunca nos sorprender� con un cambio repentino. Sobre todo porque cada ruta est� principalmente protagonizada por un �nico personaje. Ah, tan buen momento como cualquier otro para hablar de las rutas. El juego se divide en tres rutas que se van desbloqueando progresivamente cada vez que superamos la anterior. La primera cierra con el final A, la segunda con el final B y la tercera es la que nos llevar� a los tres finales principales restantes. Para entender la totalidad del argumento de NieR:Automata es indispensable jugarlas todas hasta el final. Una sola ruta constituye un tercio de la experiencia, no puede contarse como haber acabado el juego. A fin de evitar chafarle a nadie la sorpresa no mencionar� nada m�s sobre las rutas a parte de que el juego hace en general un buen trabajo explotando un mundo que parece a priori demasiado peque�o para la duraci�n de tres rutas sin llegar a resultar nunca en una experiencia redundante. Volviendo a la conexi�n avatar-jugador, NieR:Automata es de esos juegos que entienden que no es su obligaci�n divertir al jugador en todo momento. En puntos clave del gui�n, cuando el personaje que controlamos siente frustraci�n y angustia, el juego no duda en transmitirnoslo mediante secuencias puramente jugables. Si antes mencionaba como se atreve en un juego de �matar enemigos� a plantearnos opciones pacifistas de forma org�nica y sin ni siquiera avisar, aqu� voy a destacar como tampoco se corta un pelo en dejar que los enemigos nos den una paliza si quiere que sintamos impotencia o en jugar con la curva de dificultad para mostrar c�mo la guerra va subiendo en intensidad y el enemigo manda sus mejores tropas al frente. Podr�a resumir todo lo que he dicho hasta ahora sobre el gui�n de Automata citando a la m�xima de la narrativa: muestra, no cuentes. La forma natural de un videojuego de mostrar es esta.

Aunque tampoco es que Automata carezca de cinem�ticas o cuadros de texto llenos de di�logo. Por suerte cuando toma prestado de otro medio suele seguir teniendo en mente esa m�xima. Durante la historia principal las cinem�ticas est�n muy bien dirigidas y los di�logos entre los personajes rayan un alto nivel. En un intercambio informal entre dos compa�eros de unidad el juego consigue decir mucho m�s de lo que en principio parece sobre ellos como individuos y sobre su relaci�n gracias al subtexto. Aqu� alguien se niegue a llamar a otro por un mote est�pido no es un simple adorno graciosillo, es algo que, por la forma en la que se sucede la conversaci�n, nos dice algo m�s sobre el personaje en cuesti�n. Es una lastima que no todos los personajes importantes tengan tanto tiempo en pantalla y tanto desarrollo como podr�an. Tambi�n podr�a criticarse que las conversaciones no siempre fluyen tan bien como deber�an y en algunos di�logos opcionales se nota un peque�o baj�n en calidad. Igualmente, es verdad que el juego cuida bastante sus di�logos opcionales con NPCs que dejan entrever cierta personalidad y que suelen cambiar lo que dicen para cuando tenemos que volver a pasar cerca, pero tambi�n a veces comete el descuido de reciclar alguno de los di�logos m�s irrelevantes y los NPCs que no participan en misiones secundarias son muy olvidables. Las propias misiones secundarias acostumbran estar muy bien en el �mbito narrativo aunque en el jugable a veces aparezca la t�pica y odiosa misi�n de recolecci�n. Otra cr�tica es que encontrar en el mapa el NPC que te dio la misi�n para confirmar su resoluci�n a veces puede resultar m�s problem�tico de lo que deber�a. Pero el caso es que no son tareas de relleno en lo que concierne a la historia. Proporcionan m�s informaci�n sobre el mundo, complementan la ambientaci�n o exploran los temas del juego desde un �ngulo nuevo. A veces incluso detr�s de alguna se esconde la respuesta a alg�n que otro misterio planteado por la trama, as� que es recomendable estar atento y hacer las m�s posibles. De la misma manera, existen informes que, una vez conseguidos, podemos leer desde el men� para aprender m�s del trasfondo y el mundo del juego, as� como fichas de enemigos e historias de armas.

A nivel tem�tico la historia funciona a las mil maravillas y la conclusi�n que alcanza es apote�sica. Una de las mejores, sino la mejor, que se ha visto en el medio. Por desgracia lo que es la historia en s� presenta m�s fallos de los que me gustar�a. Para empezar el ritmo se me antoja siempre demasiado acelerado y al final directamente el juego mete quinta. Esto hace que algunos conceptos muy interesantes no se desarollen todo lo que deber�an y adem�s me dificulta estimar cu�nto tiempo ha abarcado la historia. Hay varios puntos del gui�n que no se explican lo suficiente. El juego est� tan emperrado en no contar que se niega a explicar datos indispensables para un entendimiento completo de la trama y conf�a en el jugador para saber interpretarlo todo de manera correcta. Y, en lo personal, no estoy poniendo esto �ltimo como algo necesariamente negativo, pero s� crea una sombra de duda sobre alg�n que otro giro para el que no sabes si de verdad los autores hab�an pensado una explicaci�n al respecto o si estaban escurriendo el bulto y a otra cosa. Podr�a argumentarse que el gui�n de NieR:Automata funciona en realidad mejor a un nivel metanarrativo que narrativo, pero esto tampoco significa que sea un desastre. Nada m�s lejos de la realidad. Existen inconsistencias menores, a veces hay alguna secundaria que se contradice con la trama principal y ciertas decisiones sobre giros de gui�n parece que fueron tomadas m�s pensando en c�mo afectaban a los temas, as� como la forma en la que el jugador se relacionaba con el juego y entend�a su mensaje, sin preocuparse por explicar demasiado porque estaba pasando todo. Incluso con los errores mentados sigue siendo una trama de ciencia ficci�n muy interesante. Y esto es algo que no se ve tan a menudo como querr�a en esta industria. Por no mencionar de que sus temas, por mucho que superficialmente no parezcan demasiado originales, est�n tratados de una forma muy original y usando t�cnicas �nicas del medio interactivo. Si lo que contara al final fuera la experiencia, entonces NIeR:Automata ser�a una obra maestra. Ponderando todo lo que el juego tiene que ofrecer y su ejecuci�n, queda bastante claro que no lo es en realidad. Es un juego sobresaliente, eso ni se duda. Pero no es perfecto. Y, a�n as� NieR:Automata es un juego muy especial.

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Opini�n: Yakuza 0

Fri, 03 Mar 2017 08:31:00

Yakuza 0 es una precuela a una de las sagas m�s desconocidas de SEGA en Occidente. Se lanz� en Jap�n en PS3 y PS4 en el a�o 2015 y tardar�a hasta enero de 2017 en llegar al resto del mundo. Estamos ante una perfecta introducci�n a la franquicia, o al menos para servidor as� lo fue. El juego cuenta con un espl�ndido doblaje en japon�s que ayuda a remarcar la ambientaci�n y textos en ingl�s.

A nivel gr�fico llama la atenci�n la cantidad de detalles en el escenario. Kamurocho es un escenario muy denso, a cada lado de la calle hay tiendas con llamativos carteles y luces de ne�n, numerosas personas se agrupan en lugares populares o pasean de un lado a otro, hay basura tirada sin que a nadie le importe en alguna que otra esquina, callejuelas oscuras llenas de matones y antros de mala muerte... Todo sin cargas, aunque si existe algo de popping y otros defectos gr�ficos como el tearing son apreciables si se dan ciertas condiciones. Adem�s algunas animaciones son algo bruscas, lo cual se nota sobre todo en las escenas cinematogr�ficas que usan los modelos ingame. Pero todo se perdona por esa ambientaci�n de sociedad en medio de una burbuja econ�mica en la que, inocentemente, creen podr�n vivir para siempre. La moral decadente y la p�rdida de los valores de anta�o, sustituidos por un capitalismo agresivo y una corrupci�n que se extiende m�s all� de la mafia... Una ciudad sobrecargada de luces de ne�n que parece quieren ocultar la lumbre de la hoguera de los sin techo o las bolsas y cajas de basura tiradas por ah�... Es el escenario perfecto para una historia de mafia, dinero y honor. Aunque Kamurocho se lleva la palma, Sotenbori, la otra ciudad que exploramos en Yakuza 0, tampoco se queda atr�s. En realidad ambas son casi personajes de por s�. Tienen mucha personalidad y aunque representan lo mismo: distritos de placer sin ley donde manda el capital, se las arreglan para ser diferentes entre s� y muy memorables.

El juego apuesta por un dise�o art�stico realista, lo cual es acertado, dada su tem�tica y ambientaci�n, y no implica que no se haya hecho un gran trabajo con los personajes. Claro que se ha hecho. Todos los personajes importantes tienen un dise�o distintivo y que se complementan con su forma de ser o historia personal de alguna forma. Y no hablo s�lo del rostro, que en m�s de un caso est� basado en alg�n actor japon�s, sino tambi�n de la forma en la que visten e incluso cosas en apariencia tan nimias como la forma en la que gesticulan al hablar. Todo muy cuidado. No obstante, en los secundarios, en concreto aquellos que forman parte de las numerosas misiones secundarias del juego, nos encontramos dise�os m�s gen�ricos y que muchas veces pecan de ser intercambiables unos con otros. De todas maneras cumplen su cometido y este tema no llega a molestar nunca, tal vez porque el conjunto gr�fico y art�stico, con sus altos y sus bajos, es bastante s�lido y todo se ve sorprendentemente bien en comparaci�n con otros juegos de nicho orientales.

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En cuanto a la banda sonora, durante las secciones de exploraci�n est� ausente. En su lugar tenemos conversaciones de fondo, la radio sonando en una tienda, entre otras cosas que ayudan a transmitir la ilusi�n de un escenario vivo, aunque luego en realidad no lo est� tanto. De igual manera refuerzan la sensaci�n de densidad. Aunque el dise�o de sonido de Yakuza 0 brillan cuando empieza a sonar la m�sica: en los combates. Los golpes son m�s satisfactorios si cabe al estar acompa�ados por un buen efecto de sonido, y en este apartado el juego cumple con creces. Lo que viene siendo la m�sica tambi�n ralla un alto nivel y por si fuera poco la banda sonora es muy extensa. Vibrante y encima con distintas variaciones dependiendo del estilo de lucha que est� usando el jugador. Aunque lo mejor se lo guardan para las escenas cinematogr�ficas m�s importantes de la historia, donde la banda sonora acompa�a a la perfecci�n, y los jefes, donde encontramos los temas m�s memorables y �picos del t�tulo.

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El argumento principal de Yakuza 0 es uno lleno de complejas relaciones entre personajes, drama personal, conspiraciones, traiciones y giros inesperados. Se trata de una muy buena historia escrita de forma competente. A veces cae un poco en di�logos m�s largos y sobreexplicados de lo que parece necesario, pero en general �stos est�n tan bien escritos que se pasan volando. Los personajes est�n caracterizados y son desarrollados a las mil maravillas. La propia historia peca de una red de conspiraciones que acaba siendo innecesariamente enrevesada y, por consecuencias, alguna de las revelaciones en el tramo final deja la impresi�n de ser demasiado conveniente. Es, sin embargo, muy f�cil perdonar esto teniendo en cuenta lo intenso que llega a ser dicho final y lo bien que se construye sobre los cimientos de los cap�tulos anteriores para cerrar la trama de ambos personajes principales y todos los secundarios importantes de forma muy satisfactoria. El juego est� narrado siguiendo una estructura de cap�tulos en la que se alterna entre dos personajes principales, cada uno con su propia historia que en principio puede dar la impresi�n es independiente de la otra. Por supuesto esto no es tan que as� y ambas l�neas argumentales acaban convergiendo de forma bastante inteligente, si bien es cierto que esto supone el punto m�s predecible de todo el gui�n. La propia estructura por cap�tulos es una muy adecuada, y el hecho de que el jugador salte de un personaje al otro permite al juego crear cliffhangers que no se resolver�n de inmediato. Esto crea expectaci�n de cara a volver al personaje que acabamos de dejar en una situaci�n precaria pero, al mismo tiempo, ya llev�bamos con nosotros la expectaci�n de volver al personaje que nos toca jugar a continuaci�n. Lo que nos deja esto es con un sentimiento al empezar cada nuevo grupo de cap�tulos con otro personaje de que ojal� el juego nos dejara jugar un poco m�s con el anterior... Y cuando volvemos a ese deseamos que el juego nos dejar� un ratito m�s con el otro. Adem�s, dividir la historia en estas unidades m�s peque�as le da a todo un aire de novela negra, o quiz�s ser�a m�s adecuado decir de serie de televisi�n, dada la narrativa estrictamente cinematogr�fica de este t�tulo.

El juego tiene tres tipos de escenas. Las m�s b�sicas, que usan los mismos modelos y escenarios que en el juego normal, se utilizan en di�logos largos donde no haya demasiado movimiento. Luego tenemos unas escenas montadas a base de escenas casi est�ticas a las que se suelen aplicar algunos filtros de imagen. No veo claro que quer�an conseguir con este tipo de escenas, pero son usadas en especial en flashbacks, aunque tambi�n en escenas en el presente para alguna que otra conversaci�n. Por �ltimo, cuando el juego de verdad lo considera necesario, utiliza unas cinem�ticas de una factura t�cnica muy superior y donde brilla en especial el trabajo de direcci�n. Yakuza 0 tiene alguna de las mejores cinem�ticas que he visto nunca en esta industria. Es una pena que estas escenas tengan que cargar, por lo que cuando se encadenan varias el ritmo de la narraci�n se resiente debido a esos fundidos en negro que intentan disimular la carga, cuando en realidad la transici�n m�s adecuada ser�a otra. El juego no usa pr�cticamente ning�n otro recurso que no sean estas cinem�ticas para contar su historia, lo cual no tiene porque ser algo negativo per se, pero no puedo evitar pensar que est� desaprovechando el medio en cierto modo al hacer que gui�n y jugabilidad sean entes separados. Por fortuna al menos coexisten sin mayores problemas y el argumento sirve para contextualizar la jugabilidad y a�adir carga narrativa a los combates m�s importantes. Adem�s, la importancia del dinero en el apartado jugable resuena a la perfecci�n con la tem�tica de la historia. Por eso es una pena que haya una secuencia jugable concreta que empa�e el resultado, al no encajar para nada ni con lo que hab�a sido la jugabilidad hasta entonces ni con la narrativa. Al final no es suficiente para hundir el juego, ni much�simo menos, pero es una fea mancha que podr�a haberse evitado sin problema. Mencionar tambi�n que a veces el gui�n hace una torpe labor a la hora de transmitir el paso del tiempo. Pasando de la ma�ana al atardecer tras un evento de la historia que no da ni en broma la impresi�n de haber llevado tanto tiempo.

Por �ltimo, me gustar�a hablar de las historias secundarias. Mientras que la trama principal nos presenta un tono m�s oscuro y dram�tico, mostrando lo peor de ambas ciudades sin endulzarlo, las secundarias apuestan por el humor para presentarnos otra perspectiva de su mundo. Esto est� bien pensado porque a parte de ser los nidos de depravaci�n y corrupci�n que nos vende el argumento, Kamurocho y Sotenbori tambi�n son ciudades habitadas por personalidades muy singulares. Todas las misiones secundarias tienen un contexto m�s o menos igual de trabajado y nos presentan a un nuevo personaje o una nueva faceta de la ciudad con la que los protagonistas interact�an para acabar con un resultado, por regla general, hilarante. Hay algunas que siguen tratando temas bastante turbios pero a�adiendoles un toque sarc�stico del que carece el argumento principal, mientras que muchas otras se limitan a contarnos las tribulaciones por las que pasan algunos de los individuos m�s extravagantes que nos podamos imaginar. Es un humor muy japon�s. Todo esto sirve para vendernos a los protagonistas como habitantes de estas ciudades adem�s de como yakuzas, mostrandonos nuevas facetas de su personalidad en el proceso, y como contraste con la historia principal. Es una mezcla que puede parecer extra�a sobre el papel pero en la pr�ctica funciona... Aunque lo har�a mejor si las secundarias no se sintieran tan desconectadas de la trama central. Puede que un personaje, por motivos argumentales, tenga mucha prisa por llegar a un sitio y, sin embargo, siempre podremos entretenernos durante horas resolviendo estas peque�as historias. En el lado positivo de las cosas est�n muy bien integradas en el escenario. No est�n marcadas en el mapa hasta haberlas encontrado y buscarlas tiene que ser iniciativa del propio jugador. Al final las ciudades no son tan grandes y el propio juego te lanza durante los primeros compases varias misiones a la cara s�lo por desplazarse del punto A al punto B, como si quisiera avisar al jugador de su existencia. No es necesario que se indiquen en el mapa y, de hecho, es mejor as�. El acercarte a una pareja discutiendo y que salte una historia secundaria, con su musiquita caracter�stica, es algo muy satisfactorio y adem�s se siente org�nico. Como jugador no est�s yendo de un marcador de misi�n a otro y tiro porque me toca. Est�s explorando la ciudad y preocupandote de mirar bien todo aquello que llame tu atenci�n; y el juego sabe recompensarte por ello.

A nivel jugable la franquicia Yakuza es bastante peculiar. Se trata de un juego de rol japon�s de acci�n con un sistema de combate que recuerda a los beat'em up. La acci�n se desarrolla en un peque�o escenario abierto que el jugador puede explorar a placer casi desde el principio. Por las calles hay grupos de matones que, de alcanzar al jugador, desencadenar�n un combate. Tambi�n hay tiendas para comprar consumibles, cabinas telef�nicas para acceder a un almac�n de objetos y guardar la partida, establecimientos en los que beber y/o comer algo para recuperar vida... Y tambi�n minijuegos. Aunque llamarlos minijuegos es venderlos cortos. La densidad de Yakuza no est� s�lo en sus escenarios, se trata de un juego que en un espacio m�s o menos peque�o concentra una cantidad de contenido incre�ble. Sus minijuegos en realidad son m�s como juegos extra que vienen de regalo junto a la aventura principal. Uno de batear, bolos, dardos, billar, shogi, karaoke, baile... Muchos de estos con distintas modalidades y dificultades, as� como con sus propios controles y reglas. Suponen a�adidos del todo secundarios que el jugador puede optar por ignorar, y es bien posible que no todos se le den bien o sean de su agrado. Pero aunque sea s�lo por su abrumador numero, tiene que haber al menos un par que todo jugador pueda disfrutar. Y todo esto sin olvidarnos que tambi�n hay salones recreativos donde descubres que, aqu� s�, literalmente te has llevado un pu�ado de cl�sicos arcade de SEGA por la compra de Yakuza 0 y ni cuenta te hab�as dado. Me refiero a las versiones arcade de Space Harrier y OutRun, m�s otros dos desbloqueables que no desvelare. Y no, no estoy hablando de demos o versiones capadas tampoco. Pero no he acabado todav�a de detallar el contenido de este juego, tambi�n existe no uno, sino dos juegos de gesti�n que se desbloquean de manera autom�tica al avanzar en la trama. Uno por personaje. En el primero gestionamos una serie de locales que podemos adquirir en Kamurocho. Entre nuestras funciones como presidente de una peque�a empresa est�n el asignar un manager y un agente de seguridad a cada distrito en el que estemos haciendo negocios o enviar asesores a los locales para mejorar la calidad de sus servicios y, por consiguiente, nuestros beneficios. En el segundo llevamos un club cabaret y a parte de hacer ciertas preparaciones previas antes de abrir al p�blico tenemos que atender en tiempo real a los clientes que van llegando, asign�ndoles una chica de compa�ia que sea de su agrado y gestionando cualquier pedido o problema que puedan tener. Estos dos juegos tienen su propia l�nea argumental, con algun que otro combate entre negocio y negocio e incluso jefes finales. Suponen tambi�n la mejor forma de amasar fortuna.

Que hablando de dinero, en Yakuza 0 lo es todo, no s�lo a nivel argumental sino jugable. Es la recompensa principal por cualquier cosa que hagamos y lo perdemos tan pronto como lo ganamos debido que hasta mejorar los estilos de combate de los protagonistas cuesta ingentes cantidades de dinero. Sobre los estilos, cada uno de los personajes tiene tres que se desbloquean siguiendo la historia y un cuarto secreto. Si bien usan los mismos botones, cada estilo es muy diferente del anterior y aunque hay situaciones donde el juego deja ver claramente que hay un estilo m�s recomendable para salir airosos, durante gran parte del juego deja al jugador luchar con el que m�s le guste. Se puede cambiar de estilo en mitad de combate libremente y sin restricciones. El sistema de combate es simple, usa un bot�n para ataque d�bil, otro para ataque fuerte, uno para un ataque que rompe la guardia, para defender nosotros, para esquivar... Lo esperable. Pero entre los distintos estilo, la capacidad de coger varios objetos del escenario o agarrar enemigos, el uso opcional de armas y el heat... El sistema es muy flexible y no llega a aburrir nunca. Sobre el heat, son tres barras que podemos observar debajo de la de vitalidad de los protagonistas. Se llenan al golpear a enemigos y se vac�an si estamos mucho tiempo sin encajar un golpe o al recibir los pu�etazos nosotros mismos. Si tenemos el suficiente acumulado y se cumplen ciertas condiciones podemos lanzar un ataque devastador sobre el enemigo. Lo curioso es que la naturaleza del mismo es sensible al contexto. Por ejemplo, si estamos sobre un puente el ataque pasar� a ser lanzar al rival al agua, causando un K.O. autom�tico. Si hemos cogido una bicicleta puede que consista en levantarla sobre nuestra cabeza y romperla en la del rival. Algunos pueden incluir un peque�o QTE para aumentar el da�o. El �nico otro punto durante los combates en el que aparecen los QTEs es en momentos concretos durante los intensos combates contra jefes, donde acertarlo nos puede ayudar a causar algo de da�o adicional o, al menos, evitar que nos lo causen a nosotros, am�n de aumentar nuestro heat.

Podr�a hablar en detalle del juego durante horas, pero lo que tiene que quedar claro es que Yakuza 0 contiene, en la relativa peque�ez de su escenario, un juego inmenso. A un jugador completionista el centenar de horas le quedar� corto. Pero lo m�s importante es que en general todo el contenido es de una calidad muy alta. A mi me gusta explorar un mundo abierto enorme como al que m�s y creo que ciertos juegos s� se pueden beneficiar de uno, sobre todo si est� bien hecho. Pero en esa era de los mundos abiertos agradezco much�simo la propuesta de Yakuza. Yakuza 0 es un juego sobresaliente. Un imprescindible para todo poseedor de una PS4.

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Opini�n: Dragon Quest VIII: El periplo del Rey Maldito

Sun, 19 Feb 2017 20:50:00

Dar el salto al 3D no es algo f�cil, sobre todo para una saga tan cl�sica como Dragon Quest. Muchas cosas pueden salir mal, y en una �poca en la que el mercado de los videojuegos estaba en crecimiento la identidad de una franquicia pod�a perderse con facilidad en un intento por atraer al p�blico generalista. Tal vez habr�a sido m�s f�cil, o al menos m�s rentable en Occidente, para Dragon Quest abrazar una narrativa m�s cinematogr�fica, un argumento m�s enrevesado y dram�tico, una estructura m�s guiada... Pero entonces habr�a dejado de ser Dragon Quest. Por fortuna, El periplo del Rey Maldito lanzado originalmente para PlayStation 2 en 2004, no hizo nada de esto. Se trata, en realidad, de una adaptaci�n perfecta de la formula Dragon Quest a las 3D y a los nuevos tiempos en general, pero sin dejarse ni una pizca de su esencia por el camino. En 2013 se lanzar�a en Jap�n un port de iOS, que llegar�a al resto del mundo en 2014. En 2015 en Jap�n el juego se porte� tambi�n a 3DS bas�ndose en la versi�n de iOS. Y por fin, en enero de 2017, esta versi�n lleg� al resto del mundo. En perfecto castellano y con su innecesario doblaje al ingl�s casi intacto. Tener toda la saga desde la cuarta a la novena entrega en la familia DS es algo digno de celebraci�n.

A nivel gr�fico est� claro que la port�til de Nintendo sale perdiendo respecto a la PlayStation 2, aunque quiz�s algo m�s podr�a haber dado de s�. Pero trat�ndose de un port de un port de iOS, era inevitable que la presentaci�n del t�tulo saliera perjudicada. Es en parte una pena porque Dragon Quest VIII es un juego precioso, pero aunque en 3DS a veces sea rid�culo como las texturas de las paredes de las mazmorras van cargando a nuestro alrededor seg�n nos movemos, el juego resulta tan inmersivo que acabamos por restarle importancia. Es porque el juego sigue siendo el mismo y la consola compensa la falta en vistosidad con otras funcionalidades, como una interfaz fiel a los cl�sicos y a la versi�n japonesa, en vez de el extra�o redise�o que tuvo en el lanzamiento occidental original y que estaba fuera de lugar en esta saga. Por no olvidarnos de combates que con una simple opci�n en el men� podemos hacer mucho m�s �giles y enemigos visibles en los mapas que sustituyen a los encuentros aleatorios.

Dragon Quest como saga es hija de tres padres, que ponen su talento al servicio de una jugabilidad que encarna todas las bondades del JRPG cl�sico por turnos sin demasiados adornos superficiales. El primero es el artista Akira Toriyama, cuyo particular estilo le da una personalidad �nica a los juegos de la serie. Brilla en especial en el dise�o de monstruos, aunque tambi�n ha sido en Dragon Quest donde ha realizado sus mejores dise�os de personajes. Con los protagonistas de la octava entrega, y como ya pasaba con el grupo de la s�ptima, lo clava. Son todos �nicos, y sus dise�os son carism�ticos y refuerzan sus respectivas personalidades. Son personajes con apariencias singulares y que se diferencian con facilidad de un NPC normal y corriente, pero que a su vez da la impresi�n podr�an ser un grupo de aventureros de verdad en el universo del juego y tampoco desentonar�an.

En el bestiario nos encontramos muchos viejos conocidos que se ven de maravilla en 3D y a los que se les suman un par de nuevas incorporaciones que se integran tan bien en el estilo de la saga que casi puede parecernos que llevan ah� desde el primer juego. Es algo que la saga siempre consigue cuando ampl�a el bestiario. Las nuevas criaturas nunca parecen estar fuera de lugar. Es verdad que, como en todo Dragon Quest, a lo largo de la aventura nos encontramos con bastantes recolores de monstruos contra los que ya hemos luchado, pero el juego hace un buen trabajo distribuyendo los monstruos para que entre recolores siempre aparezca al menos una criatura nueva a la que a�n no nos hemos enfrentado. No da la impresi�n de tener el bestiario m�s amplio de la saga, de todas formas, pero aun as� no llega a molestar nunca y los dise�os tienen tanta personalidad, remarcada por lo bien animados que est�n sus modelos en combate, que al final da igual. En cuanto a las ciudades y a las mazmorras, en lo visual cumplen de sobra. Cada ciudad, e incluso cada cueva, se distinguen a la perfecci�n de las dem�s gracias a su atm�sfera �nica junto con una distribuci�n de las casas y una estructura general en los escenarios que no se repite ni una vez a lo largo del juego.

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Sugiyama con su m�sica es el segundo padre de Dragon Quest. El longevo compositor tiene un estilo muy particular, las suyas son casi con total seguridad las bandas sonoras m�s orquestales y cl�sicas de la industria del videojuego japonesa. Como de costumbre en esta franquicia la m�sica es un elemento imprescindible para que funcione el conjunto, y sus melod�as resuenan a la perfecci�n con el esp�ritu del juego. Por ejemplo, en este Dragon Quest la aventura se presenta m�s �pica en escala de lo que era en principio en el juego que le precedi�, y esto se refleja en el tema que suena en el mapamundi, que ahora es a escala y por consecuencia parece m�s grande e imponente que nunca. Por eso la m�sica presenta un tono m�s aventurero, que evoca sensaci�n de descubrimiento e incita a la exploraci�n, en contraste con el tema m�s melanc�lico y sobrio que escuch�bamos en las islas del pasado de Dragon Quest VII. Y cuando la parte central de la melod�a principal hace acto de aparici�n, parece que invita al jugador a tararearla mientras recorre los largos senderos. Esta m�sica no habr�a encajado en el mapamundi del ya citado Dragon Quest VII, pero es que tampoco habr�a pegado para la sexta entrega... La m�sica de cada Dragon Quest se siente compuesta, no para la saga en general, sino para ese Dragon Quest en concreto.

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Como de costumbre se echa en falta una mayor cantidad de temas. Los Dragon Quest siempre han sido m�s sobre la calidad de cada pieza y menos sobre la cantidad de las mismas, pero aun as� algunas escenas tiran de una melod�a que, aunque puede dar el pego, parece un sustituto para otra canci�n que nunca lleg� a componerse. Adem�s, los temas de combate, si bien son muy buenos y vibrantes, no est�n tan inspirados como lo que suena fuera de ellos y palidecen un poco frente a los de entregas anteriores. Por �ltimo mencionar que la banda sonora en el lanzamiento occidental para 3DS es la misma que el juego tuvo en su lanzamiento original japon�s. Es decir, no es la versi�n orquestada que lleg� al lanzamiento occidental en PS2 y que s� tuvo la versi�n de 3DS japonesa. Con todo, la p�rdida no es tan grande como en el caso de Dragon Quest VII porque ese remake fue concebido con m�sica orquestada mientras que Dragon Quest VIII no. De hecho, es curioso, pero las versiones en MIDI de algunas canciones son m�s largas e incluso se sienten m�s adecuadas en puntos donde la orquestaci�n parece olvidarse de que est� en un videojuego y no en un concierto. Y de todas formas la calidad de la composici�n no se ve afectada y los temas en s� se siguen escuchando muy bien, sea la versi�n que sea.

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Para finalizar, el tercer padre, y el m�s importante, de la saga es su creador y escritor, Yuji Horii. Dir�a que Dragon Quest es la combinaci�n de cuatro elementos que tienen que funcionar en perfecta armon�a para crear una obra maestra, a saber: una jugabilidad cl�sica con combates por turnos y �nfasis en la aventura, el arte de Toriyama, la m�sica de Sugiyama y la narrativa de Horii. Y la historia es otro apartado que El periplo del Rey Maldito saca con matr�cula. Tampoco pod�a ser de otra manera, esta serie siempre ha tenido guiones redondos. Pero entrega tras entrega no puedo dejar de sorprenderme por el dominio t�cnico que tiene de la narraci�n Horii y los dem�s escritores de Dragon Quest. Son historias sencillas en apariencia, pero acostumbran tener m�s fondo del que dejan ver en principio, y adem�s est�n contadas siempre de la mejor forma posible y aprovechando el medio como pocos saben hacerlo para crear una aventura inmersiva de la que el jugador se siente parte. Esto funciona porque Dragon Quest relega mucho en el jugador para hacer avanzar la trama. Los juegos consiguen que los intereses del personaje protagonista y el jugador se alineen, y que sea el propio jugador el que con sus acciones decida seguir la historia. Por eso cuando llegas a un pueblo nuevo un Dragon Quest se niega a ense�arte en una cinem�tica que est� pasando. Por lo general ves que algo est� mal, porque ya se nota hasta en el ambiente. Pero vas listo para jugar a un Dragon Quest si esperas que en alg�n momento te salte un v�deo o al menos un mensaje en pantalla que te diga lo que tienes que hacer. Toca ponerte a hablar con los NPCs, esperar a la noche y visitar la taberna, pues bien es sabido que es m�s f�cil que se vaya de la lengua un hombre borracho, interactuar con las estanter�as en busca de alg�n libro, diario o documento que arroje algo de luz sobre la situaci�n... Es resumen, investigar y hacer, bueno, lo que har�a un aventurero en esa situaci�n.

Hablando de cinem�ticas, la verdad es que en Dragon Quest VIII hay un pu�ado, pero est�n muy bien integradas en la narrativa. Acostumbran ser escenas cuyo foco se pone en otro personaje, no en los miembros del grupo, que act�an m�s bien como observadores de la acci�n. Eso, o bien las usan para representar momentos espec�ficos que no quedar�an bien de ninguna otra forma. Esto es un punto importante porque la llegada de gr�ficos 3D a Dragon Quest podr�a tentar a los desarrolladores a depender de una narraci�n m�s cinematogr�fica y eso es algo que no pega ni con cola en esta saga. Por eso se agradece que Dragon Quest VIII supiera integrar con tanta elegancia este nuevo estilo de contar su historia en el conjunto global sin que se sintiera fuera de lugar. Y no es lo �nico nuevo que pone sobre la mesa este periplo. A nivel jugable trae un par de novedades importantes. Sigue siendo un juego de rol por turnos y eso es algo que no deber�a cambiar jam�s. Pero ahora aunque los enemigos siguen apareciendo formando grupos podemos elegir blancos individuales dentro de los mismos, tambi�n tenemos un nuevo sistema de tensi�n, que nos permite acumular energ�a para nuestro pr�ximo ataque, y el pote de alquimia, para fabricar nuevos objetos a partir de otros. Por si fuera poco en vez tener vocaciones o personajes con roles predefinidos el juego presenta un sistema de puntos de destreza. Al subir de nivel un personaje puede recibir un n�mero de puntos de destreza y distribuirlos entre las distintas ramas de habilidades que puede aprender ese personaje. Todas menos una, que es �nica del personaje y se relacione de alg�n modo con su personalidad o apariencia, hacen referencia a las distintas armas que puede equipar. Por regla general las habilidades s�lo se pueden usar si tenemos un arma de su rama equipada. No es mal sistema, permite cierta versatilidad a la hora de construir al grupo protagonista pero es m�s accesible para nuevos jugadores que un sistema de vocaciones.

Con todo, la verdad es que ninguno de los a�adidos al combate, ni el pote de alquimia, se sienten como algo que vaya a pasar a formar parte de la saga m�s all� de las entregas de Level-5. Y es que tampoco eran cosas necesarias, sino m�s bien peque�os gimmicks para hacer los encuentros m�s atractivos a nivel superficial. Lo m�s interesante es la tensi�n, como el jugador puede acumular varias veces tensi�n hasta llegar a un estado de alta tensi�n, pero un enemigo puede romper la cadena con una habilidad, mat�ndonos al personaje en cuesti�n o forz�ndonos a romperla nosotros mismos usando una habilidad para curar o similar. A�ade una nueva dimensi�n estrat�gica al juego. Pero la novedad m�s importante de Dragon Quest VIII respecto a los anteriores es el mapamundi a escala. La transici�n de las mapas cl�sicos a este mundo donde todo pasa a ser de un tama�o realista respecto al modelo del jugador no podr�an haberla hecho mejor. El dise�o del mundo en s� es muy bueno, y acompa�a un dise�o competente de mazmorras, que saben no alargarse demasiado y aportar algo de variedad con alg�n que otro sencillo puzzle.

Tal vez porque supon�a un punto de inflexi�n importante en la historia de la saga, al tratarse de la primera entrega en 3D, se opt� por una historia con una premisa m�s cl�sica que las de anteriores Dragon Quest. El juego comienza planteando una persecuci�n. Y, esto es importante hacerlo notar, no una cualquiera, una en la que el rastro est� caliente. Con una primera aventura introductoria digna de estudio el juego pone en contexto al jugador y caracteriza a los personajes, y a partir de ah� toca perseguir al villano que solo nos lleva un d�a de ventaja a lo sumo. Es muy inteligente. Construyen la historia de forma que los primeros compases en los que los cuatro personajes principales forman su pintoresco grupo sean guiados, asi el jugador se va acostumbrando al nuevo mundo y a las novedades jugables, y lo justifican a la perfecci�n a nivel argumental. Luego el rastro se enfr�a y el juego se abre m�s, permitiendo al jugador visitar zonas opcionales y explorar m�s por su cuenta. Aunque evidentemente esto es un Dragon Quest, el avance de la trama es siempre lineal en esencia. No obstante, el juego no se olvida de que tambi�n es una aventura y el jugador curioso tiene bastantes cosas que descubrir. Tambi�n la narrativa es menos hostil, no hay tantas subtramas y el argumento principal es f�cil de entender en su totalidad para cualquiera. Contrasta con el Dragon Quest inmediatamente anterior donde el juego se empe�aba incluso en esconder detr�s de m�ltiples conversaciones opcionales los or�genes de su protagonista, entre otros detalles m�s o menos relevantes para entender la trama en su totalidad. En Fragmentos de un Mundo Olvidado m�s que en cualquier otro, pero en la franquicia hasta ahora en general la verdad es que el jugador que no se pare a hablar con los habitantes de cada pueblo y ciudad, puede acabar el juego sin entender varios puntos importantes de la historia. No es tan as� en esta entrega. El jugador impaciente que se niegue a sumergirse en la narrativa del juego se perder� matices y desarrollo de personajes, pero lo que es la l�nea argumental principal la podr� experimentar de principio a fin sin encontrarse con demasiados agujeros que no pueda llenar �l mismo con un poco de intuici�n. Adem�s, el perfecto ritmo, m�s r�pido de lo usual en la saga, lo hace disfrutable para pr�cticamente cualquiera. Es un Dragon Quest muy asequible para nuevos jugadores, pero que logra serlo sin sacrificar lo que lo hace ser un Dragon Quest.

A nivel tem�tico el juego muestra especial fijaci�n por las familias, sus conflictos y el concepto del legado. Es algo presente tanto en el arco personal de varios miembros de tu grupo y los de la inmensa mayor�a de personajes secundarios que conoces a lo largo de tu viaje, as� como en la historia principal. Los Dragon Quest suelen usar sus temas como el pegamento que une todas las partes de su narraci�n. Son la raz�n por la que aventuras secundarias que en realidad son opcionales, como lo que concierne a cierto problema con un casino en este juego, no desentonen ni lo m�s m�nimo y hasta puedan llegar a parecer parte de la historia central. Porque aunque no sean unos eventos esenciales para que la trama tenga sentido a nivel superficial, si contribuyen al mensaje que el juego parece querer transmitir. Puede parecer que tampoco es un mensaje super complejo, pero eso es porque esta franquicia funciona bien con temas universales. Adem�s, en este caso importa m�s c�mo lo transmite que lo que transmite. El juego no te restriega en la cara sus temas, aunque tampoco los oculta tanto como otras entregas de la saga. No se ha olvidado de c�mo ser sutil porque sabe que si es demasiado expl�cito parecer�a como si nos estuviera aleccionando y la conexi�n emocional, imprescindible para que los momentos m�s importantes de la historia tengan la fuerza necesaria, podr�a perderse.

Entre otros temas que parecen interesar al juego el que m�s me ha sorprendido es el de la corrupci�n de la Iglesia. Por primera vez en la serie Dragon Quest se cuestiona que una organizaci�n religiosa que pide donaciones a sus creyentes para absolutamente cualquier cosa que no sea guardar la partida, podr�a ser que estuviera un poco corrupta. Es gracioso e inteligente porque resuena con una mec�nica jugable que existe desde los comienzos de la serie. Pero por supuesto, lo que m�s le interesa a un Dragon Quest al final es la sensaci�n de aventura. Y c�mo lo consigue este periplo junto al rey maldito... Dragon Quest VIII, como todos sus predecesores, es una aventura inolvidable. Es una maravilla, pero es que eso ya era de esperar dado el t�tulo del juego. Es impresionante el nivel medio de calidad de la franquicia. Es algo de lo que ninguna otra puede presumir en toda la industria. Para cerrar, mencionar que entre las novedades que incluye la versi�n para 3DS las argumentales son insustanciales, no aportan nada nuevo. Aunque tampoco molestan. La c�mara y sus desaf�os asociados, sin embargo, pueden alargar a�n m�s la grand�sima aventura que es Dragon Quest VIII. La conclusi�n est� clara: sea en PS2 o en 3DS, ning�n fan del g�nero deber�a perderse esta joya.

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Opini�n: Gravity Rush 2

Thu, 16 Feb 2017 21:03:00

La secuela del juego de Vita, Gravity Rush, se lanz� en todo el mundo el pasado mes de enero en exclusiva para PS4. El juego cuenta con textos en castellano y el doblaje es en un idioma inventado con una fon�tica que recuerda al franc�s y el mismo en todo el globo. Se trata de una secuela directa que coge todo lo establecida en el primer juego y tira para delante con la trama hasta llevarla a su conclusi�n. Por esto, es imprescindible haber jugado al primer Gravity Rush antes de empezar este. Tambi�n es aconsejable ver la OVA Gravity Rush The Animation Overture, pues introduce una de las l�neas argumentales que tratar� Gravity Rush 2 en su segunda mitad.

El juego presenta un estilo con claras influencias del anime japon�s, pero con un toque propio que le da mucha personalidad y lo diferencia de otras obras orientales. El dise�o de personajes es sublime, pero lo que se lleva la palma son los escenarios. Se trata sin duda del juego que mejor ha logrado plasmar hasta la fecha una sociedad de ciudades flotantes a nivel art�stico. La arquitectura, si bien desde el primer momento queda claro que no busca seguir ninguna convenci�n de nuestro mundo y est� m�s preocupada de servir a la jugabilidad, es sorprendentemente cre�ble en el contexto del juego. Es posible que falle en la variedad de enemigos, sin embargo tambi�n debo se�alar que �stos encajan a la perfecci�n en la ambientaci�n e historia del t�tulo. Su dise�o no ser� el m�s complejo del mundo pero es el adecuado para Gravity Rush. En el apartado t�cnico tampoco presenta grandes problemas. Quiz�s no sea lo m�s bruto de PS4, pero salvando algo de popping, que era inevitable dada la naturaleza abierta del juego, se ve de maravilla.

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Kohei Tanaka repite con una banda sonora que encaja como anillo al dedo en el juego. En las distintas �reas urbanas que visitamos durante el juego es donde encontraremos los temas m�s memorables, al menos durante los primeros compases. Es incre�ble como la m�sica refleja a la perfecci�n la forma de vida de los habitantes de cada estrato de la sociedad. Con todo, puede parecer durante las primeras horas que los mejores temas van a ser al final aquellos originarios del primer Gravity Rush. Por suerte una vez entramos en la segunda mitad de la secuela, y en especial en su tramo final, el compositor pone por fin todas la carne en el asador y nos regala las mejores composiciones de la bilog�a. Adem�s, no puedo dejar de mencionar como la m�sica participa directamente en la narrativa en este juego. La canci�n que cierra este juego, que ya aparec�a en forma instrumental en el primero, es parte integral de la historia y la escucharemos en distintas variaciones a lo largo del aventura. El uso de la m�sica durante el final es algo que destaca y mucho, por como ayuda a transmitir las sensaciones que quiere el juego. Deja de ser un elemento en el fondo o simple ambientaci�n y se entremezcla con la narraci�n, siendo casi tan importante como los di�logos o lo que vemos en pantalla. B�sicamente Gravity Rush 2 tiene una banda sonora de esc�ndalo y encima cuando toca sabe usarla a las mil maravillas para reforzar su narrativa. Es imposible imaginar los mejores momentos del juego con otra m�sica distinta, y al menos yo considero que este es el mayor halago que puede recibir una banda sonora.

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La historia de Gravity Rush 2 est� muy claramente influenciada por el anime. Hasta el punto que el propio juego parece querer presentarse a s� mismo como un anime interactivo. Pero, y aqu� est� lo que va a resultar m�s divisivo entre los fans, no se trata de cualquier anime. Gravity Rush es un anime de autor. De estos que tienen un claro concepto en torno a lo que todo gira pero son ambiciosos hasta l�mites rid�culos con su abanico tem�tico, queriendo hablar un poquito de todo. En este caso tenemos entre los temas que el juego quiere tratar conflictos sociales, el paso del tiempo y crisis existenciales entre otros. Y en el n�cleo est� Kat, una personalidad muy particular. Es una chica por lo general optimista que siempre ayuda a cualquier sin pararse a pens�rselo dos veces e intenta ver lo mejor en las personas. Busca siempre el lado positivo de la vida y es muy inocente. Esta forma de ser y como influencia a los que est�n a su alrededor y su mundo en general se convierte en el motor de la mayor�a de arcos argumentales y de igual manera es el pegamento que al final hace que todo encaje a nivel tem�tico en el acto final de la aventura. Aunque, no s�lo de Kat puede vivir uno. Bueno, bien pensado tal vez s�. En mi opini�n personal se trata de una de las mejores protagonistas femeninas de la industria, y, la verdad, uno de los mejores personajes principales en general. Pero es que el juego encima cuenta con un reparto de lleno de secundarios memorables. Inclusive aquellos recuperados del primer juego que, si bien en aquel apenas ve�amos m�s de ellos que su introducci�n, aqu� acaban por desarrollarse por completo. Son polifac�ticos, divertidos y muy carism�ticos. Lo mismo puede decirse de los personajes nuevos. Es una pena que muchos no tengan demasiado tiempo en pantalla y la historia falla siempre en los villanos, que suelen ser introducidos de forma abrupta o sus motivaciones resultan demasiado d�biles. En el que antagonista del �ltimo arco argumental se juntan ambos problemas, suponiendo una lamentable mancha en la narrativa.

El juego est� estructurado como un anime dividido en largos arcos argumentales que a su vez se dividen en episodios. Distinguimos en estos �ltimos las misiones principales, que ser�an los cap�tulos que mueven la historia hacia delante, y las secundarias, episodios opcionales que se corresponder�an con el relleno. Aunque es un relleno de alt�sima calidad y, en verdad, llamarlo as� me parece injusto y no del todo correcto. En estos episodios averiguamos m�s del mundo y sirven para caracterizar a los personajes. A veces introducen subtramas con antelaci�n a su aparici�n en la trama principal. Para disfrutar de la experiencia completa de Gravity Rush 2 me parece imprescindible jugar todas las misiones secundarias. El mundo en el que se ambienta el juego es uno de los m�s originales y fascinantes que han salido de este medio en los �ltimos a�os. A parte de los episodios jugables el jugador tambi�n puede platicar con distintos NPCs que le proporcionan a�n m�s informaci�n acerca del mundo y de c�mo viven sus habitantes. Ahora bien, la estructura del juego tambi�n puede que sea un problema para algunos jugadores. No existe una conexi�n argumental expl�cita entre los arcos, �sta es m�s a nivel tem�tico y, es que en realidad esta es la historia del d�a a d�a de Kat y sus amigos hasta el �ltimo acto, donde tanto sobre los personajes como el jugador cae el peso de la realidad al comprender que todo debe acabar alg�n d�a. El sentimiento de nostalgia al ver los cr�ditos pasar con esa canci�n y sabiendo que acabamos de vivir la que casi con total seguridad es la �ltima aventura de la Reina de la Gravedad, es el mejor testimonio a favor de la fuerza narrativa del t�tulo. De esta forma los primeros arcos no s�lo han servido para introducir los temas de la historia y desarrollar personajes, sino que para que llegado el momento de decir adi�s al t�tulo sea m�s doloroso si cabe. Durante gran parte del juego da incluso la sensaci�n de que la trama podr�a extenderse hasta el infinito, no acabar nunca. Y a aquellos que logran conectar con las sensibilidades y la propuesta del t�tulo, tal vez no les habr�a importado.

Pero no es oro todo lo que reluce y el gui�n presenta problemas bastante obvios, la mayor�a en cuestiones de ritmo. El cierre de los distintos arcos llega siempre de forma precipitada. Estamos en la calma que precede a la tormenta y, de pronto, en un pesta�eo hemos llegado al cl�max y la tormenta est� en su punto �lgido. Tambi�n, al final se echa en falta una mayor exploraci�n de las localizaciones que visitamos en el �ltimo tramo. El problema es que no vemos lo suficiente como para hacernos una idea de c�mo funciona realmente su sociedad y esto es un problema teniendo en cuenta que es un punto importante en el argumento. Por �ltimo, por su naturaleza estaba claro que Gravity Rush 2 iba a dejar preguntas al aire para que los fans sacar�n sus interpretaciones. Para entender del todo la historia del juego hay que saber leer su subtexto. Hasta aqu� todo bien, hay partes que a lo m�nimo que uno las piense un poco est�n bastante claras y es que el juego hace un buen trabajo con su narrativa para expresarlas de forma m�s o menos comprensible sin tener que dar una respuesta expl�cita. El problema es que sobre un par de puntos del gui�n parece imposible llegar a ninguna conclusi�n clara y concisa. No queda m�s remedio que tirar de imaginaci�n para rellenar los huecos. Tambi�n dir�a que tanta ambici�n le pasa factura, y no todos los temas que quiere tratar los toca lo suficiente o con el mismo acierto. Dicho todo esto, cuando uno finaliza el juego, si ha conectado con �l, el concepto est� claro y le llega adentro.

La presentaci�n de Gravity Rush 2 es otro de sus puntos fuertes. El idioma inventado es agradable a nivel fon�tico y muy acertado, porque suena familiar a la vez que extra�o. Gran parte de la historia se transmite a partir de di�logos bien escritos y escenas de im�genes est�ticas presentadas con el formato de un c�mic muy atractivo en lo visual. Hay un pu�ado de cinem�ticas muy bien dirigidas, pero por lo general el juego prefiere depender de textos y sus peque�os c�mics para contar su historia. Lo veo una decisi�n acertada, pues le da al juego una mayor personalidad, diferenci�ndolo a�n m�s de otras propuestas de la industria. Adem�s, el juego tambi�n sabe usar sus mec�nicas para narrar cuando lo ve oportuno. Uno se percata de las aspiraciones art�sticas de Gravity Rush 2 cuando el juego no tiene reparo en plantear tramos interactivos pensados para transmitir una emoci�n en particular, que no tiene que ser necesariamente la diversi�n. Y es que, a veces, esa es la idea. Gravity Rush 2 es, por todo lo que he mencionado hasta ahora incluidos sus fallos, arte. Pero no se trata de uno que pretende llevar los videojuegos al siguiente nivel o transmitir un mensaje con la esperanza de cambiarle la vida al jugador ni nada semejante. Nada de eso, y aunque la historia pueda llegar a tornarse m�s dram�tica de lo que aparentaba en principio Gravity Rush 2 tambi�n sabe ser divertido. Ya no a nivel jugable, donde el juego hace de algo tan simple como los desplazamientos de un lado a otro de la ciudad una actividad muy divertida. A nivel de historia tambi�n sabe cu�ndo debe buscar estas sensaciones. Si se piensa bien no podr�a haber sido de otra forma y tiene sentido porque, debido a la personalidad de la protagonista y la perspectiva positivista desde la que aborda sus temas argumentales, la diversi�n es un punto importante que el juego debe abrazar para funcionar en su conjunto. A lo que voy con esto es a que un autor ha de tener claras cuales son las sensaciones que desea transmitir y obrar en consecuencia. Al final del d�a, este juego, o mejor dicho, esta pareja de juegos, lo que pretende es sumergir al jugador en una experiencia interactiva que act�a como ventana a un mundo donde puede seguir a sus personajes mientras viven d�a a d�a y van creciendo. Y lo �nico que pide al jugador es que escuche el relato hasta el final y saque sus propias conclusiones. Se trata de un tipo de arte imperfecto, pero tambi�n muy sincero y memorable.

En el apartado jugable Gravity Rush 2 hace un gran trabajo trasladando su esquema de control de Vita al mando de PS4. Hace adem�s uso intensivo de las posibilidades del mando, incluido el panel t�ctil y el control por movimientos. En el caso de lo segundo su uso es por completo opcional, lo cual tranquilizar� a los que no puedan ver ni en pintura esta clase de controles. En su defensa decir que funcionan bien. Se usan en conjunto con el joystick derecho en modo antigravedad para dirigir a Kat por el cielo. Y ya que hablamos de volar, toda la jugabilidad gira en torno a los poderes antigravedad de la protagonista. Es pulsar un bot�n y entramos en modo antigravitotorio. Desde ah�, al igual que en el primer juego, podemos lanzarnos en cualquier direcci�n para volar por en cielo, correr por las paredes o los techos, o convertirnos en una bala humana y arremeter contra el objetivo con un patada voladora a toda velocidad. Moverse por el mundo exquisitamente dise�ado de Gravity Rush 2 es siempre un placer. En el primer juego tambi�n pod�amos atraer objetos a un campo est�tico pero estaba muy limitado y no era demasiado �til. En esta entrega no s�lo se ha expandido en el mismo y se ha mejorado hasta convertirlo en una opci�n m�s que viable para combatir, sino que el propio juego plantea situaciones donde su uso se convierte en la mejor estrategia para vencer. Si mantenemos pulsado el bot�n m�s tiempo al activar el campo est�tico podemos gastar un segmento de la barra de ataque especial para darle a los objetos que lancemos la capacidad de perseguir y perforar a los enemigos. De igual forma da la impresi�n de que esta vez el combate cuerpo a cuerpo en tierra es m�s viable para enfrentarse a enemigos peque�os y m�s veloces. Estas peque�as mejoras ya hacen que el combate, que en el primero consist�a casi en exclusiva en tirar de patada voladora, sea mucho m�s variado y divertido. Y eso que esto es s�lo un estilo de gravedad...

Una novedad que introduce Gravity Rush 2 son dos nuevos estilos de gravedad que desbloqueamos al avanzar en la historia. El jugador cambia de estilo usando el panel t�ctil. Por un lado tenemos el estilo lunar, donde la gravedad de Kat es mucho m�s ligera. En este estilo Kat puede saltar grandes distancias y rebotar en las paredes sin necesidad de gastar sus poderes gravitatorios. Tambi�n puede lanzarse como un cohete hacia delante y superar grandes abismos. En modo antigravedad tambi�n cambia la cosa. Al ejecutar la patada voladora en estilo lunar en vez lanzarse contra el enemigo Kat crear� un agujero de gusano que la teletransportar� hasta su posici�n si est� lo bastante cerca. Tras esto el jugador puede seguir encadenando un combo de patadas. Esto es especialmente �til cuando nos enfrentamos a blancos m�viles y muy r�pidos. El campo est�tico tampoco est� exento de cambios, en modo lunar si gastamos una tercera parte de la barra de ataque especial los objetos que lancemos crear�n un torbellino al impactar que seguir� da�ando a los enemigos de la zona. A mayores tambi�n tenemos el estilo J�piter, donde la gravedad es m�s pesada. En este estilo Kat apenas puede moverse en tierra pero a cambio es m�s r�pida que nunca en el aire y al usar el deslizamiento de gravedad. Se trata de un estilo enfocado al combate pero tambi�n es el m�s dif�cil de controlar. La patada voladora puede cargarse para que Kat salga disparada a una velocidad incre�ble y cree una onda expansiva al impactar. El campo est�tico crea bolas de escombros a partir de los objetos que capta y podemos hacer la bola todav�a mayor si gastamos el tercio de rigor de la barra de ataque especial. Este estilo est� pensado para combatir enemigos est�ticos o grupos de enemigos, la patada tarda demasiado en cargar y una vez lanzada es casi imposible de controlar y no sigue de ninguna forma al blanco fijado, por lo que un enemigo r�pido podr� esquivarla sin mayores problemas. Por �ltimo, cada estilo cuenta con su propio ataque definitivo que podemos desencadenar con un bot�n cuando tengamos los tres segmentos de la barra de ataque especial llenos.

Salta a la vista que cada nuevo estilo se dise�� pensando en que el jugador lo usar�a en una serie de situaciones espec�ficas, mientras que el estilo normal es el m�s equilibrado y puede usarse para afrontar casi cualquier combate u obst�culo, aunque de forma menos eficaz. S�male que cambiar de estilo es autom�tico, por lo que en mitad de un combate el jugador puede ir rotando para afrontar cada situaci�n seg�n se le presentan de forma fluida, y tienes una jugabilidad, como m�nimo en los combates, mucho m�s interesante y variada que lo que ofrec�a el juego anterior. Pero es que los desarrolladores lo llevan un paso m�s all�. En una jugada t�pica de los juegos de anta�o deciden, en ciertos tramos de la historia, bloquear al jugador en un estilo u otro y forzarlo a afrontar situaciones para las que en principio uno no pensar�a en usar ese estilo. Es posible que esto moleste algunos jugadores, pero yo considero que se trata de una buena decisi�n y una muestra de la confianza que los creadores ten�an en sus sistemas jugables. Obliga a pensar en c�mo sacarle el m�ximo partido a cada estilo. Por ejemplo, luchar contra un blanco m�vil y al menos tan r�pido como Kat en el estilo J�piter fuerza a prestar m�s atenci�n a los patrones de movimiento del enemigo y al timing de sus ataques para poder encajar esa patada voladora o a hacer un uso inteligente de las capacidades del campo est�tico. A veces es bueno sacar al jugador de su zona de confort. Gravity Rush 2 es un juego que entiendo esto.

Como los combates en general, los jefes tambi�n son mejores que los de la primera entrega. Sin duda resultan m�s atractivos en dise�o y �picos en escala. Aunque, a nivel de lo que son los combates, incluso siendo mejores que lo que ten�amos antes, no son gran cosa y no recordaremos a pr�cticamente ninguno por sus mec�nicas. En los personal mis favoritos los jefes del mismo tama�o de Kat que vuelan por el cielo a gran velocidad. Los combates contra estos consisten en saber seguir sus movimientos, colocarte bien, y explotar la patada a trav�s del agujero de gusano del estilo lunar. Dan la impresi�n de ser los combates m�s t�cnicos del juego, mientras que los enemigos m�s grandes y est�ticos parecen girar m�s en torno a colocarse de la forma adecuada para poder lanzar la patada del estilo J�piter y pillar el timing de sus ataques para evitar recibir da�o mientras la cargamos.

Por desgracia un apartado que no ha mejorado especialmente respecto al primer t�tulo es la c�mara. Dada la naturaleza del t�tulo quiz�s es de esperar cierto grado de confusi�n y, a decir verdad, la mayor�a de las veces una vez el jugador se acostumbre a los poderes de gravedad orientarse en el aire no resulta tan complicado... Excepto en el estilo J�piter. Fallar una patada contra un enemigo puede suponer que Kat salga disparada contra el cielo o contra una pared a una velocidad a la que nos es imposible detenerla. Recuperar el sentido de la orientaci�n despu�s de que esto pase puede ser dif�cil y da lugar a algunos de los momentos m�s frustrantes del t�tulo. Lo m�s grave es que la fase en la que se introduce el estilo J�piter se desarrolla en un espacio con un mont�n de giros y pasadizos llenos de escombros que Kat destruye s�lo con tocarlos. Se trata de una de las secuencias m�s mareantes del juego y aunque evidentemente es jugable y puede pasarse sin problema, est� claro que no funciona todo lo bien que deber�a.

Sobre las fases en las que se consiguen los nuevos estilos de gravedad, son el equivalente a los niveles lineales que hab�a entre cap�tulos en el primer juego. En esta ocasi�n est�n planteadas como una serie arenas de desaf�os que el jugador debe completar para ir avanzando. No siempre se encuentran al final de los arcos argumentales, de hecho pueden aparecer en mitad de uno o puede haber m�s de una secuencia del estilo en el mismo arco. Los desaf�os est�n pensados primero, en el caso de ser una fase donde se desbloquea un nuevo estilo, para ense�ar al jugador a usarlo. Y segundo, son los segmentos donde el jugador nos har� m�s jugarretas como bloquearnos en un estilo de gravedad concreto o plantearnos desaf�os que ponen a prueba nuestros conocimientos de las capacidad de la Reina de la Gravedad y nuestra habilidad para controlarla. Muchos desaf�os consisten en derrotar a un grupo de enemigos pero no unos escogidos al azar. El juego pone frente al jugador un grupo de enemigos escogido de forma que, si quiere ser eficaz, ganar r�pido y minimizando da�os, tenga que usar sus poderes con cabeza. Aun con esto no se trata de un juego dif�cil en ning�n momento. La penalizaci�n por morir es casi nula, pues el jugador es devuelto al �ltimo punto de control sin m�s, y de todas maneras cualquier zona donde se produzca un combate a gran escala tendr� usualmente un buen mont�n de gemas curativas flotando por ah�. Es s�lo que, aun siendo f�cil por regla general, tampoco toma al jugador por idiota... Bueno quiz�s en las partes tutoriales un poco s�. Aunque en cierto modo se le perdona porque salta a la vista que la idea era asegurarse de que cualquier entendiera sin problema como desenvolverse en cada estilo gravitatorio.

Fuera de estas fases exploramos varias zonas urbanas, como en el primer juego. El dise�o de las mismas es espectacular y muy inteligente. Con un vuelo de reconocimiento r�pido el jugador puede aprender a moverse sin problemas por los escenarios pero, al mismo tiempo, si se para lo suficiente incluso cerca del final del juego puede encontrar recovecos que no conoc�a llenos de mena de gravedad, unas gemas coleccionables y que sirven para comprar mejoras que aumentan la eficacia de los poderes de Kat desde el men�. Aunque esto es casi un bonus, porque gracias a la adictiva mec�nica de vuelo recolectar estas gemas es sorprendentemente divertido de por s�. Es desde estas �reas habitadas que podemos emprender un episodio de la historia o uno secundario. Respecto a los secundarios, no s�lo cuentan con un contexto argumental que en el mejor de los casos es divertido e interesante y en el peor se contenta con lo primero, que ya es bastante y m�s de lo que ofrec�a el primer juego, sino que a veces plantean desaf�os bastante estimulantes. Muchas veces son una variante de ir del punto A al punto B... Pero o bien sin poderes de gravedad, o sin que te detecten, o llevando contigo una mercanc�a fr�gil, o usando un estilo predeterminado... Por el mero cambio de contexto y las mec�nicas ya se sienten misiones mucho m�s variadas y entretenidas de jugar. Las misiones de la historia principal tambi�n introducen algunas de estas ideas y otras para diferenciarse las unas de las otras. Es curioso, pero los dise�adores han decidido crear varias misiones, tanto obligatorias como opcionales, con �nfasis en el sigilo. Con todo, no deber�an tomarse como misiones de infiltraci�n al uso en el sentido de que en realidad las mec�nicas jugables no var�an. Gravity Rush 2 no se convierte de repente en un Metal Gear Solid y en mi opini�n es la decisi�n correcta, de hecho el juego mantiene las mismas mec�nicas base e interfaz en todas las misiones independientemente de su tipo. Estas secciones en realidad se basan en observar los movimientos de los enemigos, que suelen ser muy b�sicos y repetitivos, desde un lugar oculto, y planear la mejor ruta para evitarlos. Siendo franco, a veces funciona y a veces no. Funcionan cuando el juego presenta varias rutas posibles que el jugador puede elegir tomar y se premia su creatividad en el uso de los poderes de la gravedad. Por ejemplo, yo super� una corriendo la mayor parte del tiempo por el borde de una ciudad sostenida en el cielo, donde nadie pod�a verme. Pero no funcionan cuando s�lo existe una ruta que el juego quiere que tomes s� o s�. Y aunque cojas otra que tambi�n parece viable, algo se sacara de la manga para decir que te han descubierto. En general incluso las peor dise�adas pasan r�pido y no son suficiente para enturbiar la experiencia.

Gravity Rush 2 tiene contenido a rabiar. La historia con las secundarias ronda las 30 horas y luego est�n las misiones desaf�o, la miner�a, los talismanes, las funcionalidades en l�nea que est�n integradas a la perfecci�n en el conjunto, la c�mara de fotos... Se trata de un juego con varias imperfecciones, de hecho tambi�n cuenta con alg�n que otro bug molesto. Incluido uno que puede saltar justo en el �ltimo episodio del juego. Puede pasar que a veces algunas texturas no carguen bien... O incluso una ciudad entera, aunque esto es muy raro que pase. Tambi�n sufre ralentizaciones en un par de momentos puntuales en los que la pantalla se llena de enemigos. Pero aun con todo esto, se trata de una experiencia tan �nica y carism�tica, que no puedo dejar de recomendarlo. Es un juego sobresaliente y uno que dudo vaya a olvidar.

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Opini�n: Shin Megami Tensei IV: Apocalypse

Wed, 08 Feb 2017 18:34:00

Shin Megami Tensei IV: Apocalypse es la primera secuela directa dentro de la saga principal de la franquicia MegaTen. El juego arranca su historia en paralelo a la ruta neutral de Shin Megami Tensei IV y desde ah� desarrolla su propia historia que sirve para cerrar ciertos cabos sueltos de la entrega anterior. Se lanz� en Jap�n a principios de 2016 y, para fortuna de los jugadores occidentales, lleg� en el mismo a�o al resto del mundo, aunque bastante m�s tarde: a finales de a�o. En Europa lleg� incluso en formato f�sico, aunque con una distribuci�n limitada. El juego cuenta con voces y textos s�lo en ingl�s.

A nivel gr�fico no presenta mayores diferencias respecto a su precuela. La ambientaci�n est� muy conseguida. El juego recrea a la perfecci�n una Tokyo devastada por la guerra entre fuerzas que sobrepasan lo humano alternando entre claustrof�bicos distritos subterr�neos donde sobrevive como mejor puede lo que queda de la raza humana y espaciosas zonas al aire libre inspiradas en localizaciones reales de la capital nipona convertidas en ruinas y nidos de demonios. A nivel de dise�o de personajes el grupo principal destila personalidad y sus dise�os no desentonan con los escenarios, aunque tal vez s� en cierto modo con el resto de secundarios menos relevantes. Aunque Shin Megami Tensei IV ya abrazaba un estilo algo m�s cercano al anime convencional en este Apocalypse esto parece acentuarse m�s, dir�a que en especial en lo que se refiere al dise�o de la ropa de los personajes. Esto no es un problema per se, pero esta direcci�n art�stica s�lo est� presente en los protagonistas o secundarios importantes para la trama, mientras que los NPCs cuentan con unos gr�ficos mucho menos detallados pero de los que se puede adivinar una apariencia y vestimenta m�s realistas. Esto no supone bajo ning�n concepto un problema grave, y lo m�s probable es que el jugador ni siquiera note la discrepancia durante su partida, pero es una decisi�n art�stica que se me antoja algo extra�a.

Los demonios siguen siendo en su mayor�a sprites con m�nimas animaciones, aunque hay que admitir que se siguen viendo muy bien. Muchos de los dise�os siguen siendo los cl�sicos de Kazuma Kaneko, tan buenos como de costumbre. Aunque tambi�n mantiene los nuevos dise�os de Shin Megami Tensei IV y suma un par m�s a mayores. En Shin Megami Tensei IV m�s all� de que los nuevos dise�os gustar�n m�s o menos hab�a un problema, y es que no siempre su estilo art�stico era coherente con el del resto. En esta secuela se ha solucionado esto, ahora todos los dise�os, incluyendo aquellos de la entrega anterior, presentan un mismo estilo y el resultado es mucho m�s agradable a la vista.

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A nivel musical repite Ryota Koduka con una gran banda sonora que, si bien recupera algunos temas de la anterior entrega, tambi�n presenta una muy notable cantidad de nuevas composiciones y todos de una gran calidad. La m�sica resulta muy adecuada para cada momento. Ayuda a reafirmar la ambientaci�n en las sesiones de exploraci�n y durante los combates a aumentar la tensi�n con r�pidas melod�as que en los jefes adquieren tonos m�s ominosos.

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En cuanto al argumento el juego presenta un pu�ado de problemas. El m�s evidente es que, al tratarse de una secuela no planeada, alg�n que otro detalle queda forzado respecto a la historia de su precuela. Para empezar, el juego ni siquiera puede continuar la trama desde uno de los finales de Shin Megami Tensei IV, pues estos eran autoconclusivos. En su lugar el juego arranca desde m�s o menos la mitad de la ruta Neutral y, tras un par de horas en las que la acci�n se desarrolla en paralelo a lo que ser�an los acontecimientos normales en una partida de Shin Megami Tensei IV, las acciones de los protagonistas desencadenan un suceso que no hab�a acontecido en el juego anterior y a partir de ah� la historia sigue un camino distinto que la lleva hacia cuatro finales posibles. Dos de ellos representan las rutas Ley y Caos. Son finales prematuros, similares al final nihilista de su precuela. El problema es que �ste a�n ten�a cierto sentido en el contexto argumental de ese juego, mientras que estos dos finales en Apocalypse no son coherentes con la narrativa hasta ese punto y se nota que existen s�lo como curiosidades. Finales no can�nicos que representan las dos rutas cl�sicas ausentes en esta entrega. Una peque�a concesi�n a los fans que no estar�an contentos con ninguna clase de final neutral.

Los otros dos finales son, en efecto, dos variantes de la ruta neutral basados en los conceptos de individualismo y colaboraci�n. Plantean la pregunta de si un humano es m�s fuerte como un individuo libre de toda atadura y dependencia de sus cong�neres, o como parte de un grupo actuando con una meta com�n. Aunque el juego no se contenta s�lo con jugar con estos temas. Tambi�n plantea un conflicto de monote�smo contra polite�smo, el cual sabe desarrollar mucho mejor y supone la parte m�s interesante de la historia sin lugar a dudas. Es en parte una pena que los finales no se basaran en estas ideas. El problema de las rutas en este juego es que no sientes que se te hayan presentado suficientes argumentos a favor del individualismo y casi puede llegar a parecer que lo intenta pintar como la ruta mala. Es quiz�s inevitable que haya cierto bias por parte de los desarrolladores hacia una ruta concreta en esta clase de juegos y, no obstante, a esta franquicia siempre se le dio bien equilibrar las cosas para que no pareciera que un final era definitivamente el mejor final. Tal vez el problema radique en que s�lo un personaje representa la ruta individualista mientras que toda una troupe de personalidades dispares act�an como representantes de la colaboraci�n. Esto en principio parece tener perfecto sentido, pero el resultado es que durante todo el juego tienes much�simos m�s argumentos, provenientes de distintas fuentes, a favor de una ruta. Mientras que s�lo una voz, y de forma m�s espor�dica, te proporciona razones para apoyar a la otra.

Los protagonistas se supone pertenecen a una asociaci�n de cazadores que est�n empezando a tomar cada vez un papel m�s activo en la salvaci�n de la humanidad. Esto hace que la ambientaci�n desde el principio parezca algo m�s positiva y es debido al momento en la l�nea temporal del primer juego donde empieza la historia. Ning�n problema aqu� pero s� con el hecho de que en varias misiones se haga hincapi� en que hay refuerzos en camino, pues se trata de una organizaci�n que cuenta con un n�mero de efectivos relativamente grande... Y sin embargo sean los protagonistas los que lleguen primero a la acci�n y lo solucionen todo antes de que cualquier otra persona consiga siquiera acercarse al lugar de los hechos. Lo que llama la atenci�n es que en otros momentos el juego s� hace un muy buen trabajo transmitiendo la sensaci�n de que los personajes forman parte de una organizaci�n mayor, lo cual hace que salten m�s a la vista esas instancias en las que parece que, por conveniencia del gui�n, pasan a ser los �nicos miembros competentes.

Incluso con todos estos problemas el gui�n sigue siendo competente. Plantea, como se ment� antes, ideas muy interesantes y en el caso del conflicto entre deidades lo hace muy bien. Tambi�n cuenta con un n�mero mucho mayor de personajes principales que en cualquier entrega anterior, y sabe construir y desarrollar a la mayor�a a la perfecci�n. Por desgracia uno s� presenta un desarrollo algo inconsistente, aunque para ser justo las inconsistencias aparecen en di�logos opcionales. Pero siguen mostrando una falta de atenci�n al detalle y pueden molestar al jugador que se de cuenta. Tambi�n hay otro cambia su forma de ser de forma algo abrupta, aunque justificada. Por �ltimo, mencionar que se agradece que el juego represente con un icono NPCs que tengan nuevos di�logos. No tienen mucha personalidad pero cambian sus di�logos bastante a menudo. Atlus los usa sobre todo para reforzar el contexto en el que se desarrolla la historia, los NPCs refleja en sus di�logos la dif�cil situaci�n en la que se encuentran y refuerzan la ambientaci�n postapocal�ptica del t�tulo.

En cuanto a la jugabilidad, permanece inalterada en sus bases respecto al juego anterior pero ha sido muy pulida para una experiencia en c�mputos globales superior en este apartado. Como siempre los combates son por turnos y el jugador tendr� que o bien negociar con demonios para reclutarlos para su equipo o luchar contra ellos. Negociar en esta entrega sigue siendo m�s o menos sencillo y divertido, lo mismo en cuanto a la fusi�n y todos los aspectos de la gesti�n de nuestros compa�eros infernales. Los combates, por su parte, siguen usando el Press Turn System que recompensa con turnos extra los cr�ticos y el golpear debilidades y penaliza con menos turnos los errores del jugador. Igual que en anteriores entregas es un sistema que exige atenci�n constante, con el que hasta un grupo de monstruos normal y corriente puede barrer el suelo con el jugador si �ste no tiene cuidado. Tambi�n es un sistema muy satisfactorio de dominar y tampoco demasiado dif�cil una vez el jugador comprende c�mo funcionan sus reglas. De Shin Megami Tensei IV vuelven los Smirks, un estado que un combatiente puede alcanzar al acertar contra una debilidad o golpear con un cr�tico. Esta vez han sido rebalanceados, eso s�. Ya no proporcionan inmunidad total a debilidades y el juego desde el principio da al jugador herramientas para anular enemigos que dependan de este estado para sus estrategias. De hecho, Apocalypse hace un grand�simo trabajo con su primer jefe serio. Mientras que en su precuela pod�a ser frustrante al depender en parte de la suerte por no poder anular sus Smirks, en este juego el primer jefe est� planteado para ense�ar al jugador como puede sobreponerse a esta estrategia. Otros aspectos del combate y las estad�sticas parecen haberse tocado un m�nimo para una experiencia global m�s justa.

Ahora el jugador cuenta con una gran selecci�n de ayudantes, de los cuales el que tenga asignado llevara a cabo una acci�n en combate al finalizar cada turno que, dependiendo del personaje, puede ir desde lanzar habilidades curativas sobre el protagonista y su grupo hasta subir sus estad�sticas o ejecutar un ataque adicional sobre los enemigos entre otros. Adem�s, se ha quitado toda penalizaci�n por morir durante gran parte del juego. Si el jugador cae en combate puede elegir volver a intentarlo desde justo donde perdi�. Esto tiene sentido si pensamos que el juego permite guardar en cualquier momento, en teor�a s�lo ahorra al jugador el tener que andar guardando cada dos pasos. Pero por otro lado permite un tipo de juego quiz�s demasiado temerario. Podr�a haber estado mejor que penalizara aunque fuera s�lo un m�nimo al jugador descuidado devolvi�ndole al �ltimo terminal visitado. Todo esto, sumado a que se puede cambiar la dificultad en cualquier momento, puede crear la ilusi�n de que estamos ante un juego m�s sencillo. Pero no es tan as�. Los jefes son m�s duros, vienen en grupos m�s numerosos y con combates m�s largos y que requieren de pensar buenas estrategias. Tampoco puedo dejar de mencionar un dif�cil pero muy intenso combate final al que ninguno de los enemigos que cerraban la historia de Shin Megami Tensei IV pueden hacer sombra.

La exploraci�n del mapamundi es m�s sencilla ahora lo cual no s�lo se agradece a nivel mec�nico sino que tiene cierto sentido argumental. El progreso del juego en s� es m�s lineal, estructurado en misiones que nos har�n ir de un punto a otro de Tokyo, ciudad donde muchas de sus localizaciones al aire libre est�n rescatadas de la anterior entrega y, sin embargo, en alguna que otra se ha cambiado la distribuci�n del mobiliario, distintos obst�culos y dem�s elementos. En esos escenarios da casi la sensaci�n de estar jugando una expansi�n con versiones mejoradas de los originales. Por fortuna tambi�n hay numerosas nuevas zonas, en su mayor�a mazmorras. Si en Shin Megami Tensei IV �stas se presentaban menos inspiradas que de costumbre, en esta secuela la cosa mejora con mazmorras m�s laber�nticas y ambientaciones �nicas. Sobre esto �ltimo, sigue habiendo dominios, unas mazmorras generadas de manera aleatoria que ya aparec�an en el anterior juego y presentaban siempre la misma est�tica, pero esta vez s�lo en tareas secundarias. No atravesaremos ni uno en nuestra aventura principal. Por regla general las mazmorras de Apocalypse cumplen sin problema, aunque la mayor�a no resultan demasiado memorables. Eso s�, durante gran parte del juego son relativamente cortas pero en la recta final pegan un subid�n en duraci�n y dificultad con las dos �ltimas, en especial la mazmorra final, que no sabe cuando terminar y puede llegar a agotar a algunos jugadores.

Hay dos nuevas mec�nicas que s� que no terminan de encajar. Primero unas trampas invisibles en las mazmorras que nos atraparan en un torbellino oscuro y tendremos que pulsar X r�pidamente para liberarnos. El problema es que, aparte de que fallar estos peque�os eventos es casi imposible, la penalizaci�n no es suficiente. En caso de fallar el jugador es teletransportado a otro punto al azar de la mazmorra en el mismo piso� Y relativamente cercano. Mientras el jugador est� atrapado los enemigos nunca intentar�n acercarse, por lo que no supone tampoco un problema por eso. Al final esta mec�nica es m�s una molestia a la hora de explorar los calabozos que otra cosa. En cuanto a la otra, desde cierto punto del juego el jugador contar� con una daga que servir� para romper unas barreras especiales para avanzar o destruir una suerte de tent�culos adheridos a las paredes para obtener diversas recompensas. Para hacerlo el jugador tendr� que recargar la daga en unos puntos especiales y llegar al objetivo antes de que se agote la carga. En teor�a esto deber�a poner a prueba sus dotes de navegaci�n, haci�ndole atravesar la mazmorra de la forma m�s eficaz posible, tal vez con un uso inteligente de atajos. En la pr�ctica rara vez el juego hace esto y muchas veces se limita a poner un punto de recarga de la daga cerca de la barrera que el jugador debe destruir. Al final es s�lo un desv�o molesto. S� es verdad que a veces hay alguna que tiene algo m�s de chicha. La mazmorra final usa esta mec�nica un par de veces mezclada con teletransportadores, por lo que al menos pone a prueba los conocimientos del jugador respecto a d�nde lleva cada teletransportador y cual es la v�a m�s r�pida. Pero es m�s bien la excepci�n que confirma la regla.

Shin Megami Tensei IV: Apocalypse es muy bueno. Casi tanto como Shin Megami Tensei IV, quiz�s sin el casi y en algunos aspectos es mejor. Pero dista de ser un producto redondo. Su interesante historia se ve lastrada por alg�n error y malas decisiones y su jugabilidad, si bien muy pulida en lo que respecta a combates y jefes, y superior a su precuela en todo, sigue sin estar a la altura del mejor mazmorreo de la serie. Con todo es un JRPG muy recomendable y uno de los mejores de 3DS.

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Opini�n: The Last Guardian

Wed, 04 Jan 2017 21:17:00

Tras un largo y dif�cil desarrollo, la tercera obra de Fumito Ueda lleg� en exclusiva a PS4 el 6 de diciembre de 2016. Se trata de una obra dif�cil de discutir. El juego es una experiencia eminentemente narrativa y como tal Ueda dirige todos los elementos que componen el medio a ese fin. En muchos sentidos se trata de la obra cumbre del creativo, sin embargo su desarrollo peca de ser algo irregular, pero vayamos por partes.

El juego no est� exento de problemas. El juego sufre de ralentizaciones muy notorias en ciertos momentos y la c�mara da serios problemas en varias ocasiones. Respecto a los controles, por regla general responden como deber�an y son funcionales, pero a veces nos pueden traicionar en un salto y no estoy del todo seguro de que haya sido a la larga una buena decisi�n el prescindir de bot�n de agarre. Se entiende que, al contrario que con los colosos en el anterior juego, Ueda quiere que nos sintamos seguros cuando estamos encima de Trico, pero de aqu� surgen dos problemas. El primero y m�s notorio a lo largo del juego es que el ni�o tienen tendencia a imantarse a la bestia y a veces cuesta hacer algo tan sencillo como bajarse para ir a accionar una palanca. Y por otro lado, en ciertas secuencias parece, a priori, que hubiera tenido m�s sentido a nivel narrativo que s� existiera ese bot�n de agarre. A fin de no traicionar lo que el jugador sabe de los controles y mantener la coherencia a nivel mec�nico el juego nunca usa una mec�nica de agarre, lo cual es tambi�n una decisi�n respetable pero hace a uno plantearse si no podr�a existir una soluci�n intermedia. Para acabar de discutir los aspectos negativos del juego, decir que aunque The Last Guardian toma la muy acertada decisi�n de prescindir casi por completo de trofeos que salten durante el juego propiamente dicho, por alguna raz�n los dise�adores decidieron tener unas molestas notificaciones para recordarle al jugador los controles apareciendo en pantalla de vez en cuando. Aunque probablemente se podr�an haber evitado del todo, no ser�an un problema tan rese�able si se limitaran a aparecer al principio para ense�ar al jugador los controles. Pero incluso durante la recta final seguir�n apareciendo y lo peor es que a veces ni siquiera tendr�n raz�n para aparecer. Por ejemplo, cuando el jugador est� avanzando por un bordillo casi siempre aparecer� la notificaci�n que le explica como colgarse del mismo� �Incluso cuando no es necesario colgarse para nada!

Pero aunque estos problemas pueden llegar a suponer peque�as molestias, bajo ning�n concepto logran enturbiar el resultado final. A nivel t�cnico el juego tambi�n tiene muchos logros, la mayor�a concentrados en Trico, la bestia que coprotagoniza el t�tulo y que cuenta con un genial dise�o art�stico. Las animaciones de la criatura son fluidas y alcanzan un nivel de realismo que no suele verse en la industria muy a menudo, si es que hay algo como Trico. Se trata de un monstruo sacado, a nivel de dise�o, de un cuento de hadas. Pero est� dise�ado de tal forma que nos creamos que puede, en efecto, ser un animal real. Trico es m�s que tu t�pico personaje de un videojuego, es a todos los efectos y dentro del contexto del espacio virtual del juego, un ser vivo cre�ble. Y esto es muy importante y tiene peso en la narrativa. Porque The Last Guardian cuenta una historia de dos personajes de mundos distintos, incapaces de comunicaci�n directa, que se ven obligados a colaborar para una causa com�n y que, por el camino, acaban desarrollando una profunda amistad. Pero Ueda no nos cuenta esto usando escenas cinem�ticas, ni siquiera hay apenas texto en el juego. El creativo japon�s es capaz de alcanzar con solvencia su objetivo mediante herramientas casi en exclusiva jugables. Se trata de uno de los usos m�s puros del videojuego como lenguaje narrativo. Y una de las cosas m�s destacables de Ueda es que en su af�n de contar historias en un medio interactivo es casi con toda seguridad el autor que m�s provecho le ha sacado a lo largo de los a�os a las nuevas tecnolog�as. The Last Guardian no ser�a posible hace diez a�os, por un lado est� el tema ya mencionado del incre�ble logro t�cnico que es Trico, pero hay m�s. Est� el tema de la inteligencia artificial.

La mejor forma de transmitir su visi�n a trav�s de las mec�nicas jugables era neg�ndole al jugador cualquier clase de control directo sobre Trico. De esta forma el jugador encarna s�lo al ni�o y es �l quien debe aprender a entenderse con la criatura para avanzar a trav�s de los puzzles que plantea el juego. Esto, de por s�, ya refuerza la conexi�n que el propio jugador siente con la criatura, pues la relaci�n entre �sta y el ni�o ya no es s�lo un elemento narrativo, sino que tiene peso real en la jugabilidad. Pero ser�a muy f�cil que se rompiera la inmersi�n si Trico se comportara de forma mec�nica y predecible, respondiendo siempre de la misma forma a las mismas �rdenes. Por fortuna no es el caso, y es que el comportamiento de Trico sobrepasa la frontera de ser complejo y pasa a resultar directamente fascinante. No s�lo est� animado como un ser vivo, se comporta como tal. A veces nos damos la vuelta y descubrimos que no ha atendido una orden porque estaba rasc�ndose detr�s de la oreja, o jugueteando con un barril. De hecho, al principio del juego ni siquiera podemos darle �rdenes directas a la criatura. S�lo llamarla para que nos siga e intentar trabajar con ella lo mejor posible para avanzar. La capacidad de darle �rdenes no es un poder que adquirimos de repente, es consecuencia directa del creciente v�nculo entre ni�o y bestia y esto se ve reflejado en c�mo evoluciona el propio sistema. Al principio es algo duro, Trico se muestra confuso ante nuestras �rdenes y no sabe muy bien qu� hacer. Y eso es brillante porque cuando en la recta final el monstruo ya es a veces capaz de adelantarse a nuestras �rdenes y encontrar el camino por su cuenta sin necesidad de que hagamos nada, cuando ya no duda en tirarse desde lo alto o en intentar saltar grandes distancias, sabemos que la confianza entre los dos es plena. Sabemos que han pasado de ser compa�eros de cautiverio trabajando juntos por un objetivo com�n a ser amigos. Y todo esto sin que el juego tenga que decirnos ni una sola palabra al respecto. Mediante jugabilidad pura y dura, mediante la progresi�n de los sistemas de juego y los puzzles, The Last Guardian cuenta su gran historia de amistad improbable. Es verdad que incluso al final hay secuencias donde el animal se hace un l�o y se nota que conseguir que ejecute una orden es m�s engorroso de lo que el juego pretend�a. Pero una vez pasan es f�cil perdonarlas o incluso olvidarlas porque cuando llega lo bueno de verdad el juego sabe compensar por sus momentos menos inspirados.

Y los hay, una pena pero los hay. Alguno de los momentos de The Last Guardian suponen lo mejor que nos ha dado Ueda. En especial hay muchos segmentos en los que el creativo logra crear un nivel de tensi�n alucinante en el jugador. Esto puede ser especialmente cierto en los combates contra los guardianes, estatuas vivientes que intentar�n atrapar al jugador y arrastrarlo hasta unos misteriosos portales esparcidos por el escenario. Si lo consiguen, fin del juego. El ni�o no puede hacer mucho para luchar por s� mismo, sobre todo antes de entrar en la recta final, y durante la mayor parte de los combates buscaremos siempre la protecci�n e Trico. Por eso, cuando nuestro compa�ero no est� y aparecen los guardianes, nuestro primer instinto es correr a buscarlo. Si est� atrapado tras una puerta buscamos fren�ticos la forma de abrirla. Adem�s, si puede vernos desde el otro lado, Trico rugir� incontrolable, ara�ar� la barrera que nos separa y le embestir� sin �xito intentando con todas sus fuerzas venir a ayudarnos. Todo esto se combina para crear no s�lo unas secuencias jugables muy potentes, sino aut�ntico oro narrativo. Al mismo tiempo es una muy buena idea como, despu�s de cada combate, Trico se muestra muy alterado, pues no deja de ser una bestia. Para continuar el jugador tendr� que trepar a su lomo y acariciarlo con delicadeza. La bestia responder� moviendo lentamente el cuello y mirando con sus grandes ojos a su compa�ero� A su amigo. Tras esto el jugador podr� empezar a retirar las lanzas clavadas en el cuerpo de la criatura o a buscar un barril con el n�ctar azul que tanto le gusta como recompensa y para ayudarle a recuperar fuerzas. A riesgo de repetirme, esta es la historia de una amistad improbable, de un v�nculo entre hombre y bestia, y todo en este juego est� construido alrededor de esta idea. Hacia el final del juego el jugador tendr� algunas opciones m�s a la hora de combatir, pero en realidad siempre ser�n muy pocas y siempre le ser� imposible ganar hasta contra un solo guardi�n �l s�lo. Siempre necesitar� a Trico. Aun as�, no es una idea alocada que el jugador salte a intentar ayudar, aunque sea un m�nimo, al monstruo. Porque ver a Trico herido duele. As� de buena es la narrativa en The Last Guardian.

Aunque no hay muchos combates si se se siente que alguno sobra o que est�n alargados de m�s, sobre todo en la recta final en la que el juego decide lanzarle al jugador oleada tras oleada de enemigos. En su mayor�a funcionan muy bien y suelen ofrecer algo �nico, pero s� hay un par que se sienten un poco como combates de rutina. De igual forma, no todas las secciones del juego mantienen un nivel tan alto de calidad como los momentos m�s brillantes. En concreto hay un par de secciones en las que Trico no se mover� bajo ninguna circunstancia y el ni�o debe ir a buscar barriles para que se los coma y recupere la energ�a que se sienten algo innecesarias. Destacan para mal m�s por el hecho de que no parecen transmitir ninguna idea que no pudiera haberse hecho de otra forma y porque suelen involucrar los puzzles m�s pesados del juego, incluyendo uno en el que deberemos cargar un barril por la oscuridad y luego andar lanz�ndolo para subirlo hasta donde se encuentra Trico, o cierto puzzle con cajas bastante molesto y que, sinceramente, se siente un poco fuera de lugar.

Hablando de los puzzles en s�, nunca son demasiado complejos aunque s� hay un par de situaciones algo cr�pticas. De todas maneras son las que menos y el juego tampoco necesitaba puzzles complejos, y los que tienen brillan por su aprovechamiento del escenario. Todo el escenario en el que se desarrolla la aventura est� construido manteniendo una perfecta coherencia en localizaci�n y dise�o entre las localizaciones; los desaf�os que aprovechan elementos del propio escenario, por su parte, se sienten integrados en el mundo del juego sin problema. Es verdad que si uno se pone muy anal�tico ciertas �reas y elementos tienen una utilidad pr�ctica cuestionable, pero por regla general el juego mantiene la suspensi�n de incredulidad siempre y nunca se siente como si estuvi�ramos atravesando una sucesi�n de desaf�os dise�ados espec�ficamente para nuestro entretenimiento como jugadores. Esa desconexi�n entre juego e historia no se acostumbra dar aqu�, las salas de la fortaleza son obst�culos naturales que se interponen entre nosotros, como jugador que encarna al personaje principal, y nuestro objetivo. Tambi�n hay que destacar que a nivel art�stico los escenarios son maravillosos y hay paisajes para el recuerdo.

El otro punto de la narrativa que quer�a tocar era el uso de un narrador. En principio esto me preocupaba, pues creo que a Ueda siempre se le dio mejor transmitir usando los silencios, no las palabras. Pero por suerte las intervenciones de la voz narrativa son muy espor�dicas y nunca se sienten fuera de lugar. De nuevo, est� justificado dentro de lo que es la historia del t�tulo y tiene muy clara cu�l es su funci�n en el conjunto narrativo. El narrador existe para dos cosas. Por un lado para aclarar puntos del argumento que ser�an imposibles de tratar de cualquier otra forma, y por otro para dar pistas al jugador sobre c�mo proceder. En cuanto a lo primero, tiene sentido cuando te percatas de que esta vez la historia es algo m�s compleja que en la anterior obra del autor. Antes ten�amos un objetivo claro y tambi�n hab�a una amenaza. La introducci�n ya presentaba el mundo y el conflicto. Pero en The Last Guardian la trama juega con la ignorancia de los personajes y, por ende, del jugador. No sabemos qu� funci�n sirve la estructura en la que estamos atrapados y la amenaza a la que nos enfrentamos es mucho m�s ambigua. Nuestra motivaci�n tambi�n es simple y llana: escapar, pero no tenemos muy claro c�mo vamos a hacerlo durante buena parte de la aventura y nos dedicamos a avanzar por donde podemos con la esperanza de que la salida aparezca ante nosotros. Tampoco hay ning�n otro personaje que hable a parte del ni�o, por lo que una vez toca dar (o al menos sugerir) explicaciones a algunos de los sucesos de la historia, era inevitable tener que recurrir a un narrador. En cuanto a lo segundo, es una forma inteligente de ayudar al jugador en los puzzles m�s cr�pticos sin romper la l�gica de la narrativa.

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La m�sica del t�tulo es muy cinematogr�fica y adecuada, y Ueda sabe hacer un uso de ella excelente. Aunque en el juego reinan los silencios durante muchos tramos esto en realidad lo que logra es que cuando por fin suena m�sica tenga m�s impacto si cabe. Los temas de los guardianes son muy reconocibles y quedan grabados a fuego en la memoria. Cada vez que empiezan a sonar de repente, cuando antes todo estaba en silencio, el jugador sabe que est� en peligro. Pero cuando Victorius suena es que Trico ha entrado en la lucha y el tema capta a la perfecci�n la �pica de la batalla y la tensi�n que siente el jugador al ver Trico luchar poniendo su vida en peligro por su bienestar. Es as� con toda la banda sonora, trabaja a las mil maravillas en t�ndem son el resto de elementos del t�tulo.

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The Last Guardian no es perfecto y en su conjunto puede parecer algo irregular. Pero mientras est�n pasando los t�tulos de cr�dito uno se da cuenta de que Ueda lo ha vuelto a hacer, aun con todo el infierno que debi� de ser su desarrollo. The Last Guardian se pone unas metas alt�simas y las alcanza sin problema. Cuenta una buena historia, y lo que es m�s importante, la cuenta bien y de una forma �nica en este medio. Y por eso, The Last Guardian, es un juego sobresaliente.

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Opini�n: Pok�mon Luna

Wed, 14 Dec 2016 22:49:00

Pok�mon Sol y Luna son las primeras entregas de la s�ptima generaci�n de la longeva franquicia de Game Freak. Con el que seguramente ser� su �ltimo juego en 3DS, la compa��a promet�a celebrar el 20 aniversario de la franquicia con su juego m�s rompedor hasta la fecha.

Esta generaci�n a�na lo mejor de las dos �ltimas generaciones y logra lo que �stas no hab�an conseguido, tener a pr�cticamente todo el mundo contento. Pero vayamos por partes. El apartado t�cnico desde luego no es como para tirar cohetes. El juego se ve bonito y los modelados de los Pok�mon, recuperados de la sexta generaci�n muchos de ellos aunque como de costumbre se a�aden varias nuevas criaturas, est�n muy trabajados. Tambi�n, en estos juegos por fin la desarrolladora ha decidido darles proporciones realistas a todos los personajes incluso fuera de combate y el resultado llama la atenci�n para bien, sobre todo si lo comparamos con la generaci�n inmediatamente anterior. Pero el juego sigue presentando problemas de rendimiento y lo peor es que esto afecta ligeramente a la jugabilidad, pues rascadas y cargas lentas pueden hacer que algunos combates se desarrollen con m�s lentitud de lo habitual. Y se nota que la consola sufre para mover el juego cada vez que hay m�s de dos Pok�mon en pantalla. Por no mencionar que el juego carece por completo de efecto 3D y en los modelos antiguos de 3DS tarda mucho m�s de lo normal en arrancar, adem�s de causar que la consola se reinicie al salir del juego.

Art�sticamente s� que se pueden decir bastantes cosas buenas del juego. Para empezar la regi�n de Alola es una de las m�s atractivas a nivel visual de la saga, sino la que m�s. Una lastima que sus ciudades no destaquen tanto como los entornos naturales, eso s�. El dise�o de los personajes tambi�n es muy adecuado y agradable. En cuanto a los Pok�mon, en s�, bien es sabido que es imposible tener contento a todo el mundo respecto a esto, no obstante, es bastante seguro decir que los nuevos Pok�mon cuentan en su mayor parte con buenos dise�os que adem�s encajan muy bien con la ambientaci�n propuesta. Las nuevas formas regionales, lo que vienen a ser b�sicamente redise�os de Pok�mon de primera generaci�n, ya pueden resultar algo m�s pol�micas, pero me voy a mojar y a decir que salvando dos excepciones, les han quedado muy bien y adem�s se trata de una gran idea que ser�a una l�stima no volviera a hacer acto de presencia en pr�ximas generaciones. De todas formas, incluso entre nuevas criaturas y formas Alola, la verdad es que se echa en falta una mayor cantidad de nuevas incorporaciones a la Pok�dex.

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La banda sonora, como viene siendo tradici�n sobre todo en las �ltimas generaciones, es muy buena. Sobre todo llaman la atenci�n algunos temas ambientales para ciudades o campo abierto de una gran calidad, aunque los temas de combate tampoco se quedan atr�s. Lo que faltan son algunos temas m�s para acompa�ar las escenas de la historia. La mayor�a de las veces tiran del tema que suene en la zona donde se desarrolle la escena y en m�s de una ocasi�n el resultado es algo chapucero. Y los temas que s� hay dedicados a cinem�ticas son muy pocos y se repiten demasiado. A decir verdad, a veces da la impresi�n de que el juego no sabe hacer buen uso de su propia m�sica, porque incluso en algunos momentos de la historia el tema elegido no acaba de casar del todo con la escena o carece de la suficiente fuerza. Esto es muy notorio en el final del juego, el cual suma a otros problemas un acompa�amiento musical muy pobre.

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Y hablando de problemas en la historia, la verdad es que no hay tanto que decir al respecto. Lo primero que llamar� la atenci�n tras acabar el pase de cr�ditos es que el final se alarga demasiado. Tras vencer nuestro �ltimo combate de la trama principal nos aguarda la que muy probablemente sea la cinem�tica m�s larga en toda la historia de la franquicia. Aunque las ideas que tienen para cerrar la trama principal son buenas, toda la fuerza que podr�an tener se diluye al durar tanto. Luego, el juego, como toda la franquicia, peca de falta de cuidado en los detalles. Los NPCs del universo Pok�mon no actualizar�an sus di�logos ni aunque les cayera un meteorito en la cabeza. Para el jugador que se dedica a hablar con todos siempre que llega a un sitio por primera vez y de nuevo si vuelve a visitarlo m�s tarde cuando la historia ha avanzado esto puede crear cierta desconexi�n con el juego. No se siente real. No es lo bastante inmersivo. Si a esto le sumamos que los di�logos con los secundarios no est�n para nada trabajados y que muchos podr�an sustituirse por carteles sin que cambiar� demasiado la cosa, pues tenemos un problema. Uno que es m�s com�n de lo que deber�a, a decir verdad.

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Por fortuna no hay mucho m�s negativo que decir, y por lo dem�s el argumento del juego es muy competente. teniendo en cuenta el tipo de saga que es esta uno no puede esperar un gui�n complejo lleno de giros, profundas reflexiones filos�ficas y temas considerados maduras por la media de los aficionados a los videojuegos, pero eso no quita que lo que hay est� desarrollado con bastante acierto y buen gusto. Para empezar los personajes que acompa�an al jugador en su aventura tienen personalidades marcadas y resultan carism�ticos. Pero hay m�s: a lo largo de la trama sufren una evoluci�n l�gica y, aunque ligeramente en caso de algunos, puede notarse que son personas distintas al acabar el viaje. De hecho, el juego hace algo bastante atrevido y es que durante el cl�max de la historia podr�a discutirse que el avatar que encarna el jugador deja de ser el protagonista y el foco se sit�a sobre un personaje que ni siquiera es una entrenadora. Gran parte de las escenas cinematogr�ficas del juego se centran en desarrollar el arco personal de este personaje, con la cual es muy f�cil empatizar. S�male su muy inteligente dise�o, que se relaciona de forma muy sutil con su historia personal y que los escritores saben usar a su favor, y nos queda el que quiz�s sea el mejor personaje en un rol protagonista de todo el universo Pok�mon. En cuanto a los antagonistas, pues la franquicia no ha tenido demasiados problemas nunca para crear villanos memorables y en concreto en la quinta generaci�n dio lo mejor de s� en este aspecto. Tras el baj�n que supuso la sexta generaci�n en eso, la s�ptima recupera un buen nivel. Los villanos de la funci�n cumplen sin problemas, destacando el l�der del equipo Skull por su personalidad que sorprende al alejarse de las caracterizaciones que han tenido los l�deres de los equipos antagonistas en la saga. Por desgracia, los reclutas a los que el jugador tendr� que despachar a lo largo de su periplo no son muy memorables m�s all� del gimmick de los miembros del equipo Skull, que siempre intentan hablar rimando, en un intento del gui�n por crear comedia. Dentro de lo que es el tono del juego sus di�logos funcionan y tienen alguna rima bastante inspirada. Adem�s, cuando se dedicaban a romper de forma disimulada la cuarta pared consiguieron causarme alguna que otra carcajada. Pero las cosas como son, no van a gustar a todo el mundo y a veces quedan muy forzados.

El cambio m�s obvio en la forma de contar la historia que todo el mundo notar� son las escenas cinematogr�ficas, ahora mucho mejor resueltas. El nuevo motor gr�fico permite a los desarrolladores jugar con la c�mara como no pod�an antes y vaya si lo aprovechan. Tambi�n el juego se toma esta vez su tiempo para establecer la nueva regi�n y a sus personajes en un inicio algo m�s pausado de la que acostumbra tener Pok�mon. Pero el verdadero cambio est� en la estructura del juego. Sol y Luna se deshacen por primera vez de los gimnasios en favor de una historia donde el protagonista debe viajar a lo largo y ancho de Alola superando ciertas pruebas para convertirse en el campe�n regional. Y aunque en breves hablar� de lo que supone esto a nivel jugable, tambi�n es importante para la narraci�n. Anta�o el jugador iba de ciudad en ciudad, gimnasio en gimnasio y tiro porque me toca. Pero ahora, con esta nueva estructura, la historia lleva al jugador a explorar todos los recovecos de Alola. Las pruebas se ambientan en una zona concreta de la regi�n y pueden relacionarse con alguna caracter�stica particular de la misma. En otras palabras, est�n mucho mejor integradas en el mundo y la narrativa que los gimnasios, que muchas veces parec�a que exist�an aislados de todo lo dem�s porque, bueno, literalmente eran recintos aislados del resto de la regi�n. Aqu�, si bien uno no puede esperarse un lore s�per desarrollado porque el juego tampoco lo pretende, si da la impresi�n de que los personajes est�n aprendiendo algo sobre la regi�n y sus costumbres, adem�s de sobre s� mismos. Por si fuera poco el juego no duda ni un instante en adoptar una estructura m�s propia de un JRPG lineal centrado en la narrativa cuando es necesario.

Al igual que fue el caso con la quinta generaci�n, esta vez Game Freak quer�a contar una historia aunque simple, con m�s relevancia que el cuento del ni�o que sue�a con convertirse en el mejor. Y d�nde Blanco y Negro hac�an todo lo que pod�an para lidiar con los gimnasios, Sol y Luna descubren que pueden conseguir resultados con mucha m�s facilidad en esta nueva estructura. Al final dir�a que estos juegos carecen de la fuerza tem�tica que s� ten�an Blanco y Negro, que adem�s contaban con la ventaja de tener un final redondo. Pero saben contar una historia efectiva de forma bastante competente y es una gran recuperaci�n tras el traspi�s que supusieron X e Y. Sinceramente, Pok�mon no necesita mucho m�s.

A nivel jugable nos encontramos con un juego que, sin lugar a dudas, es Pok�mon. Pero al mismo tiempo se refina la f�rmula y se renueva en algunos aspectos, creando una experiencia satisfactoria para fans de toda la vida a la par que fresca. En lo que respecta a los combates y a las capturas todo sigue m�s o menos igual que siempre, aunque estas entregas cuentan con la mejor interfaz que ha visto la franquicia, que proporciona informaci�n sobre los cambios de estado as� como de lo efectividad de nuestros ataques en Pok�mon que ya hayamos derrotado y cuenta con un c�modo bot�n para Pok�balls separado de la mochila que agiliza las capturas. Adem�s, esta vez el Pok�-Recreo se integra de forma mucho m�s natural que en X e Y en el juego, pues ahora el jugador puede limpiar a los Pok�mon al final de algunos combates, darles de comer, acariciarlos o incluso curarles estados alterados. Esta entrega adem�s introduce los movimientos-Z. Un Pok�mon puede equipar un cristal Z de un tipo espec�fico siempre que conozca al menos un movimiento del mismo tipo. Si este movimiento es ofensivo el jugador podr� activar el cristal Z en cualquier momento en combate para sustituirlo por un devastador s�per-ataque, aunque s�lo funcionar� una vez por batalla. A veces algunos movimientos no-ofensivos tambi�n son sustituibles por una versi�n Z de los mismos. El juego est� balanceado teniendo en cuenta esta novedad, los entrenadores importantes todos la usan y contra los jefes es tan necesario como puede llegar a serlo cualquier s�per-movimiento en un JRPG. El juego no incluye mega-evoluciones nuevas y la mega-evoluci�n no est� disponible hasta despu�s de ver los cr�ditos. Se trata de una buena decisi�n de cara a la experiencia para un jugador. El juego est� bien alanceado para los movimientos Z pero a�adir las mega-evoluciones a la ecuaci�n podr�a haber acabado por romperlo.

A mayores, ahora durante los encuentros contra Pok�mon salvajes �stos podr�n pedir auxilio. A veces acudir� al rescate un Pok�mon de su misma especie. Otras veces quien aparecer� ser� una forma evolucionado del mismo u otro Pok�mon mayor buscando proteger a un infante y tanto en este caso como en el primero el combate pasar� a ser de dos contra uno. Pero lo mejor es que, en alguna que otra ocasi�n, puede aparecer un depredador natural del Pok�mon que pide ayuda. Atra�do por sus gritos el nuevo contendiente atacar� al Pok�mon original antes de centrar su atenci�n en el jugador. Se trata de una mec�nica genial que adem�s tiene perfecto sentido y da algo de profundidad a la relaci�n entre algunos Pok�mon, haciendo que parezcan m�s animales de verdad.

Un nuevo tipo de encuentro, que la saga llevaba pidiendo a grito desde hace tiempo, son los Pok�mon dominantes. O lo que es lo mismo: jefes. Nos encontramos con uno al final de cada prueba del recorrido insular. Se trata de Pok�mon m�s grandes de lo normal, con una bonificaci�n de estad�sticas de serie y que no se pueden capturar. Adem�s, llamar�n a alg�n Pok�mon especial para que le apoye en combate y no s�lo atacando sin sentido. No, estas criaturas usan verdadera estrategia. As� un Pok�mon dominante puede llamar a un aliado con Pulso Cura y, ala, por primera vez en la franquicia no s�lo tenemos jefes normales sino que, dentro de los normas de Pok�mon, han conseguido que algunos tengan la molesta costumbre de curarse, casi como si esto fuera un Dragon Quest o un Final Fantasy. Y es genial. A veces pueden pecar de ser m�s simples si atacamos desde el principio con el tipo correcto y un Pok�mon con m�s nivel, pero en general las luchas contra estos jefes son buenas y, en cuanto a combates, resultan sin lugar a dudas la mejor novedad de la s�ptima generaci�n y una que, s� saben lo que se hacen, Game Freak no puede obviar en futuras entregas.

En cuanto al desaf�o, pues la curva de dificultad de Sol y Luna es muy buena y se trata de las entregas m�s retantes desde la quinta generaci�n. Es verdad que el juego ofrece ayudas para quien quiera usarlas, pero incluso as� la inteligencia artificial de los enemigos est� muy mejorada. Ahora los entrenadores usan objetos m�s menudo y, tras 10 a�os, por fin han aprendido a cambiar de Pok�mon. Tambi�n la mayor�a de rivales importantes usar�n estrategias m�s o menos complejas, buscando aprovecharse de cambios de estado o aumento/disminuci�n de estad�sticas para ganar.

Fuera de los combates nos encontramos con una regi�n con una geograf�a trabajada y unos dise�os de escenarios con algo m�s de verticalidad. Recorrer las rutas es m�s divertido que nunca y hay varias zonas de Alola bastante memorables gracias a la combinaci�n entre ambientaci�n, m�sica, carga argumental y dise�o jugable. El gran acierto, que lleva la exploraci�n en esta entrega a un nivel nunca alcanzado en la franquicia, son las Pok�-monturas que sustituyen a las M�quinas Ocultas. Ya no es necesario ense�ar Fuerza o Surf a un Pok�mon de nuestro equipo, ahora conseguimos los datos para llamar a Pok�mon especiales en cualquier momento que sustituyen al medio de transporte habitual de la saga, la bicicleta, y adem�s con pulsar un bot�n nos permiten ejecutar acciones como empujar rojas de gran tama�o, romper escombros o buscar objetos invisibles por el suelo. Por supuesto tambi�n sustituyen a Surf y a Vuelo. Son inmediatas, c�modas de usar y no penalizan al jugador por el mero hecho de tenerlas. Desde Blanco y Negro parece que Game Freak llevaba d�ndole vueltas a la cabeza sobre como arreglar el tema de las MO, que alcanz� su extremo m�s rid�culo en la cuarta generaci�n. Cada vez los juegos reduc�an m�s y m�s el n�mero de M�quinas Ocultas obligatorias para avanzar en la trama, el problema es que segu�an siendo necesarias si quer�amos explorar todos los recovecos del escenario y, quieras que no, la exploraci�n sufr�a por esto. �Era casi como si penalizaran el explorar en un JRPG donde se supon�a el jugador estaba viviendo una aventura! Las Pok�-monturas son la soluci�n perfecta y suficiente ha tardado ya en llegar.

Por �ltimo, sobre las pruebas que sustituyen a los gimnasios, son variadas en principio en cuanto a ambientaci�n y objetivos aunque pueden pecar de simplonas y cortas. Su principal ventaja frente al viejo modelo es que tienen lugar al aire libre, en escenarios naturales donde los dise�adores tienen una mayor libertad para plantear desaf�os original m�s reminiscentes a los objetivos de un JRPG cl�sico. Hay cosas que pulir. En todas las pruebas los objetivos no son m�s que una excusa para llevarnos a enfrentamientos contra versiones preevolucionadas del que ser� el jefe. Se trata no obstante de un gran primer paso. En realidad el juego est� lleno de esto. Pok�mon Sol y Luna dan muchos pasos hacia delante en la direcci�n correcta para seguir ofreciendo JRPGs de calidad. Ahora s�lo queda rezar porque a Game Freak no se le vaya la pinza y no decidan retroceder lo andado aqu� cuando llegue la octava generaci�n.

Pok�mon Luna es muy bueno. Por extensi�n puedo decir que Sol tambi�n, pues son, salvo contados detalles, el mismo juego. Ofrecen una de las mejores historias principales de la saga en todos los sentidos, y aunque no hay tanto que hacer despu�s de los cr�ditos como a algunos fans les gustar�a, el juego no anda tampoco corto de contenido, sobre todo si contamos todas sus funcionalidades online con la Festi-Plaza o los divertidos Battle Royale. Tenemos Pok�mon para rato. Y si este es el camino que va a seguir a partir de ahora, a Pok�mon le espera un futuro m�s brillante que el presente si cabe.

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Opini�n: The legend of Heroes: Trails of Cold Steel II

Fri, 02 Dec 2016 17:30:00

Lanzado originalmente en Jap�n en 2014, Trails of Cold Steel II llega a Europa por primera vez en 2016 para PS3 y PS Vita, con voces y textos en ingl�s. Se trata de la s�ptima entrega de la subserie Trails, nacida a partir del sexto The legend of Heroes, Trails in the Sky. Introducirse en esta serie puede resultar engorroso a primera vista. Si bien los fans m�s ac�rrimos de cualquier franquicia siempre recomiendan un orden ideal a la hora de jugar a la misma, la mayor�a de las veces el jugador puede elegir el orden que m�s le convenga sin perderse en el argumento. No es as� en Trails. Lo que tenemos aqu� es un ambicioso proyecto que arranc� en 2004 con dos hermanastros saliendo de aventuras, dando comienzo el primer cap�tulo de un cuento que se extiende hasta hoy y cuyo final parece estar a�n lejano. En efecto, la forma m�s eficaz de entender c�mo funciona Trails es compar�ndolo con los largos mangas y animes de aventuras provenientes de su mismo pa�s.

La serie se divide en varios arcos argumentales, cada uno compuesto a su vez de varios juegos que cuentan con un grupo �nico de protagonistas y se ambientan en una regi�n particular del continente de Zemuria. Todas la historias de estos h�roes y lugares de los m�s variopintos acaban entrelaz�ndose con una trama que envuelve a todo su continente y, quiz�s, al mundo entero y que los escritores est�n construyendo poco a poco, juego a juego. Idealmente lo mejor ser�a jugar la serie siguiendo el orden de lanzamiento, pero por desgracia eso es imposible ahora mismo en Occidente. Los juegos nos han ido llegando, s�, pero desordenados. As� pues Trails in the Sky The 3rd, que sirve de puente entre el primer y el segundo arco, no estar� disponible hasta primavera del pr�ximo a�o 2017. Por su parte los dos juegos que componen el arco de Crossbell no est�n ni siquiera confirmados ahora mismo para su lanzamiento en Am�rica y Europa, aunque no existe motivo para creer que no vayan a llegar a la larga. En la actualidad el jugador tendr� que conformarse con el primer arco, compuesto por Trails in the Sky FC y Trails in the Sky SC y el tercero, que contar� con tres t�tulos de los cuales dos ya han llegado a nuestras tierras (Trails of Cold Steel y el t�tulo que nos ocupa) y el tercero no ha salido todav�a ni siquiera en Jap�n y por ahora apenas se conocen detalles sobre el mismo.

Idealmente, antes de plantearse jugar a este t�tulo, uno se habr�a pasado ambos Trails in the Sky y Trails of Cold Steel. Si bien hay que destacar que Trails of Cold Steel y su secuela se concibieron para ayudar a introducir a nuevos fans a la franquicia y pueden disfrutarse antes de pasar a las entregas anteriores. Bajo ning�n concepto ha de jugarse a Trails of Cold Steel II sin haber superado el primero antes, eso s�, pues la trama de la secuela arranca apenas un mes despu�s del final del original y se construye enteramente sobre los personajes y acontecimientos desarrollados en el mismo. Eso s�, seg�n los desarrolladores no ser� tan f�cil jugar a Trails of Cold Steel III como haberse pasado los otros dos juegos de su arco, pues recuperar� personajes de todos los dem�s arcos y por lo que parece supondr� un punto de inflexi�n en la historia, haciendo casi imprescindible un conocimiento de todo lo acontecido hasta el momento en todos los juegos previos.

Resumiendo, Trails es m�s complicada que la mayor�a de franquicias del g�nero. Pero s� uno decide atreverse a dar el primer paso en esta historia descubrir� una de las mejores franquicias de JRPGs por turnos de la actualidad, que por desgracia con Trails of Cold Steel II nos ha dado su entrega m�s floja hasta la fecha, si bien una que sigue constituyendo un juego de notable alto a lo menos.

A nivel gr�fico el juego sigue haciendo uso del mismo motor que en la anterior entrega y todo se ve m�s o menos igual. Las animaciones han mejorado algo, y ahora hay escenas bastante m�s din�micas e impresionantes. En general el juego tambi�n parece ir m�s fluido en PS Vita, aunque sigue teniendo sus rascadas sobre todo en las escenas de v�deo protagonizadas por cierto villano... El dise�o de los personajes sigue siguiendo los c�nones del mime actual. Est�n trabajados y no resultan desagradables a la vista, aunque podr�a discutirse que el juego no transmite demasiada personalidad con su est�tica. El bestiario es variado, recuperando monstruos del primer Cold Steel y sumando un generoso n�mero de nuevas criaturas, algunas rescatadas de ambos Trails in the Sky y a las que el paso al 3D les ha sentado de lujo, y otras nuevas. Y como de costumbre el dise�o de los ciudades es espectacular, aunque s�lo una es en verdad nueva y el resto ya pudimos explorarlas en la entrega anterior. El mundo est� muy bien construido, resultando la geograf�a del mismo l�gica y cre�ble, que es lo que buscan en Falcom con estos juegos. Por esto mismo tampoco hay ambientaciones demasiado ex�ticas. Tambi�n algunas mazmorras reciclan ambientaci�n m�s de la cuenta.

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La banda sonora es tan buena como cab�a esperar. Todos los temas resultan adecuados y un buen pu�ado muy memorables. Aquellos concentrados en la recta final, tanto en las mazmorras como en sus jefes, son especialmente �picos. Recupera, como era l�gico, muchos temas del primer juego, pero tambi�n a�ade un buen pu�ado de ellos nuevos y la variedad est� servida.

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Como no pod�a ser de otra forma los temas de combate destacan por encima de todos los dem�s, aunque eso no implica que lo que suena en las escenas, en las ciudades y en mazmorras sea malo, pues siempre acostumbran ambientar a la perfecci�n. Pero la energ�a de las melod�as de batalla de Falcom es algo dif�cil de igualar en el medio, s�lo a la altura de lo mejor de los mejor en materia de compositores. Ya sea tirando de guitarra el�ctrica o de orquesta y coros para las batallas m�s espectaculares y �picas de la historia, siempre merece la pena luchar con los cascos puestos.

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Como es evidente, uno de los puntos donde m�s ha destacado siempre la franquicia ha sido en la historia. La trama de Cold Steel II tiene grandes momentos, ideas muy interesantes y tampoco es que est� particularmente mal escrita per se. Pero incurre en errores que no estaban presentes, o si lo estaban no de manera tan marcada, en anteriores entregas y, lo que constituye quiz�s su m�s grave pecado, la sensaci�n final que deja es de que tampoco han pasado tantas cosas de verdad relevantes para la trama al final del d�a. Esto es debido en parte a que se trata en realidad de una entrega puente entre el primer Cold Steel, que supuso la introducci�n del arco, su regi�n y sus personajes, y Cold Steel III, donde hallar�n su cierre. El gui�n tiene excesivo cuidado en no mover demasiado la trama, no vaya a ser que le coma terreno a la siguiente entrega, pero al mismo tiempo tampoco quiere durar menos que el resto de juegos en la franquicia, lo cual se traduce en un argumento que, aunque bueno la mayor parte del tiempo e incluso fant�stico en sus mejores momentos, no se libra de cierto olorcillo a relleno. Su ritmo tambi�n es un tanto irregular. El juego sigue una estructura muy r�gida durante el primer tercio de su desarrollo, tras el cual todo cambia y el gui�n adopta otra estructura. Que es distinta pero igual de r�gida. El caso es que ambas tienen algo en com�n y que supone la ra�z causante de estos problemas de ritmo: la mala integraci�n de las tareas secundarias en el argumento general. El juego hace aut�nticos malabares para justificar porque sus protagonistas han de detenerse en cierta localizaci�n a interactuar con los lugare�os y a ayudarlos con sus problemas pero al final del d�a se trata simplemente de una excusa para pasar el tiempo hasta que llega la chicha de ese tramo en cuesti�n, donde la trama mete quinta y lo cierra con una estruendosa secuencia de acci�n, de las cuales s�lo algunas consiguen de veras impresionar y el resto se limitan a ser correctas, con mazmorra llena de enemigos y uno o varios jefes �picos para redondear. Y vuelta a empezar. Esto puede llegar a resultar molesto sobre todo en el primer tercio, cuando el juego es lineal y las tareas secundarias tienen poco de secundarias, pues entre ellas algunas son obligatorias para hacer avanzar la trama. Despu�s, una vez entramos en el susodicho segundo acto del juego, el desarrollo se vuelve m�s abierto y, sobre todo en el tramo final del mismo, ya no hay apenas misiones obligatorias, pudiendo el jugador elegir pasar a la acci�n m�s pronto si as� lo desea. Aunque aquel que decida afrontar las misiones se encontrar� con la misma situaci�n que en el primer acto, solo que con una excusa un poco m�s cre�ble para la necesidad de dichas tareas y una mayor libertad de movimiento, lo cual no viene nada mal, todo sea dicho.

Otro problema que presenta el gui�n es que se apoya m�s de la cuenta en conveniencias, de las cuales la mayor�a no parece vayamos a recibir una justificaci�n satisfactoria en el futuro. Aunque es verdad que puede que los escritores les den alg�n uso interesante en futuras entregas, pues muchas se prestan a ello, es inevitable no pensar que ciertas mec�nicas del mundo surgen en esta entrega porque la trama necesitaba de ellas para avanzar. Tambi�n decepciona como han decidido tratar el tema de las relaciones entre los distintos miembros del grupo principal, en espec�fico las del personaje que encarna el jugador durante la mayor parte de la aventura y las mujeres del grupo. Existe un favoritismo evidente para cualquiera hacia una de las chicas, y sin embargo durante la historia principal el juego no se atreve en ning�n momento a hacer oficial su relaci�n con el personaje principal, seguramente para mantener la posibilidad abierta a que cada jugador pueda elegir a su novia preferida. Es curioso, porque s�lo un n�mero m�s o menos limitado de personajes femeninos muestran signos de atracci�n por el h�roe durante el desarrollo tanto del argumento principal como de los eventos opcionales con dichos personajes, pero incluso as� el juego parece dispuesto a dejar una puerta abierta para que al final cualquiera pueda potencialmente enamorarse del protagonista. Y esto resulta frustrante, para qu� mentir, porque el juego no se aclara durante la mayor parte de su desarrollo entre si quiere dejar el tema rom�ntico a decisi�n del jugador o si quiere convertir a una chica en concreto en su compa�era can�nica. E incluso cuando s� toma una decisi�n al respecto no parece que el propio gui�n est� muy convencido de querer ir por ah� y en ning�n momento se siente como algo definitivo, siendo bien posible que cambien de opini�n en la siguiente entrega. Es verdad que es algo que resulta muy f�cil de ignorar y parece injusto dedicarle tantas l�neas a criticarlo. Tampoco va a estropearle la experiencia a nadie. Pero es un detalle que queda mal en el conjunto; es algo mal integrado en la narrativa y esto ya es un problema recurrente en Trails of Cold Steel II.

Por supuesto, la narrativa sigue teniendo numerosas bondades. El juego sabe recompensar al jugador con una recta final muy intensa y un ep�logo muy apropiado para el cierre de esta historia, dejando un buen sabor de boca y muchas ganas de ver c�mo concluye en la siguiente entrega la aventura de este grupo de h�roes. Los personajes tienen buena qu�mica entre ellos, su desarrollo coge lo que ya ten�a de la primera entrega y sigue tirando hacia delante en una direcci�n l�gica y que, para la mayor�a de ellos, al final del juego desemboca en un punto de inflexi�n en su arco argumental muy satisfactorio. Como grupo no tienen tal vez tanto chispa como los h�roes de Trails in the Sky, pero no est�n mal escritos y en realidad Cold Steel II se centra m�s en ellos que en avanzar la trama de Erebonia, por lo que es de agradecer que al menos resulte sencillo empatizar con sus problemas y preocupaciones, que son bastante normales e incluso cotidianas dentro de lo que suele ser el g�nero. Es algo que se agradece mucho en esta franquicia, porque quitando un par de personajes que s� tienen un pasado excepcional y unos traumas m�s, digamos, t�picos del JRPG, la mayor�a presentan conflictos bastante normales y f�ciles de entender. En ese sentido es m�s f�cil verlos como un grupo de adolescentes que a otros protagonistas de su misma edad en juegos similares.

Por supuesto el tono general de la historia sigue siendo reminiscente del anime juvenil, y esto se nota tanto en como est�n escritos los di�logos como en ciertas decisiones a la hora de desarrollar el gui�n. No es para nada algo negativo per se, pero este juego no va a convencer a nadie que se sienta repelido por este tipo de narrativas donde los lazos de amistad entre los protagonistas se convierten en un punto importante, de forma literal en el caso de estos juegos, a la hora de superar los obst�culos a los que se enfrenta y el argumento pone especial �nfasis en sus tramas personales y en crear un desarrollo que culmina con ellos creciendo como personas.

Pero lo que m�s destaca para bien de Trails como franquicia en general, y esta entrega no es una excepci�n, es su mundo. Los guiones de Falcom siempre son muy detallistas. Todos los NPCs tienen nombre propio y un buen pu�ado de ellos tienen sus peque�os arcos argumentales que se van desarrollando a lo largo de todo el juego. Todos los di�logos cambian cada vez que avanza la trama y el lore de Zemuria es muy probablemente el m�s complejo y mejor desarrollado que podemos encontrar en toda la industria. Siempre resulta interesante aprender m�s cosas del mundo de estos juegos, y su disposici�n a dirigir el foco de atenci�n a los problemas cotidianos de lo que en muchos otros juegos ser�an NPCs sin personalidad, y aqu� son buenos personajes secundarios con todas las de la ley, los diferencia de otras sagas; les da una personalidad �nica. Una de las formas en las que el juego mete relleno es dedicando mucho tiempo, todo su primer tercio para ser exactos, a contextualizar la situaci�n actual de Erebonia, regi�n de Zemuria en la que se desarrolla la acci�n, a partir de sus habitantes. Es algo que siempre habr�a estado ah� en la saga, s�lo que en este juego se convierte en parte de la aventura principal en vez de constituir una recompensa para el jugador que explora todo y habla con todos. Esto significa que realmente el relleno no est� mal escrito de por s� tampoco, la raz�n por la que molesta es porque no est� bien integrado con el resto de elementos narrativos y se nota demasiado que es, en efecto, relleno. Incluso ignorando el tema de que no quer�an quitarle tramas a la siguiente entrega, el caso es que el contexto argumental en el que se encontraba esta entrega no parec�a cuajar bien con el ritmo y la estructura t�picas de Trails, y la raz�n por la que la forzaron a encajar creando todas las irregularidades en la narraci�n ya discutidas parece que fue m�s por hacer que el juego siguiera durando como un Trails que por otra cosa.

A nivel jugable nos seguimos encontrando ante un JRPG por turnos muy competente y bien dise�ado. El sistema de combate es en su base el mismo que anteriores entregas y cuenta con todas las caracter�sticas ya presentes en el primer Trails of Cold Steel a�adiendo un pu�ado de nuevas mec�nicas en un intento por mantenerlo fresco. Al igual que en el primer juego los combatientes tienen un radio de movimiento y distintos ataques con alcance variable. Cada personaje puede ejecutar cualquier acci�n que pueda ser efectiva desde dentro de su radio de movimiento. No faltan, por supuesto los ataques de �rea, tanto artes, que consumen EP, como crafts, que gastan CP. El CP se recupera haciendo o recibiendo da�o y a partir de 100 puntos podemos romper el orden natural de los turnos para lanzar un super-ataque. No obstante, es necesario remarcar que dicha t�cnica ser� aun m�s devastadora si esperamos hasta tener 200 puntos, el m�ximo permitido. Aunque la saga sigue siendo por turnos este acercamiento al rol t�ctico hace que el jugador tenga que tener en mente el �rea de efecto tanto de sus ataques como los de los enemigos as� como las posiciones de los participantes en el combate. Pero al mismo tiempo el sistema no resulta ni de cerca demasiado complejo. Es muy f�cil de entender, s�lo toma lo justo de los juegos t�cticos como para aportar frescura e inter�s a las estrategias pero teniendo cuidado de que el juego se mantenga m�s o menos accesible y sin llegar a cruzar la l�nea que lo separar�a del resto de JRPGs cl�sicos convirti�ndolo en un juego de estrategia. Otro elemento que a�ade estrategia a la f�rmula, es que en todo momento el jugador puede ver el orden de los turnos y c�mo ejecutar una acci�n u otra puede influir en el mismo. Lo interesante en que en ciertos turnos pueden darse condiciones especiales que proporcionen bonificaciones o, como caso excepcional, una penalizaci�n, y �stas tambi�n aparecen detalladas en pantalla, por lo que al jugador le convendr� planificar sus acciones para intentar que sus turnos caigan en la medida de lo posible en las bonificaciones y, si hay una penalizaci�n, mejor que se la coma el enemigo en su turno.

El primer Cold Steel introduc�a los enlaces de combate, gracias a los cuales cuando un personaje romp�a la guardia de un enemigo golpeando una debilidad f�sica, el compa�ero con el que tuviera establecido su enlace pod�a unirse en el mismo turno con un ataque adicional. Por supuesto, esta mec�nica permanece intacta en Cold Steel II y se le a�ade una nueva idea: Overdrive. Realizando acciones en combate, o ganando batallas con buenos resultados, los jugadores pueden llenar un nuevo medidor que, una vez est� a tope, permitir� que si dos personajes se encuentran enlazados y cumplen la condici�n para poder entrar en Overdrive, aprovechen este modo para ganar tres turnos seguidos en los que todos los ataques f�sicos tienen garantizado romper la guardia del enemigo. Tambi�n, s�lo el mero hecho de entrar en Overdrive, supone una recuperaci�n de HP, EP y CP para los dos personajes. Por defecto el personaje principal del grupo siempre podr� entrar en Overdrive con cualquier compa�ero, y la posibilidad de hacer lo mismo entre otros personajes puede desbloquearse superando distintas pruebas en forma de jefes opcionales. El problema de esta mec�nica es que, si bien acaba siendo �til en los combates m�s dif�ciles, tampoco parece ser muy necesaria y su implementaci�n es cuanto menos rara. La justificaci�n argumental para la misma es muy vaga y forzada; en general da la impresi�n de que los desarrolladores estaban m�s motivados por un sentimiento de obligaci�n a a�adir algo nuevo a los combates que por crear algo que de verdad se integrar� naturalmente con el resto de elementos del sistema, ayud�ndolo a evolucionar. Con todo, no es para nada mala mec�nica al final.

Los combates est�n muy bien balanceados. Si la primera entrega del arco de Erebonia quiz�s pec� de ser demasiado sencilla en un intento por atraer nuevos jugadores, en esta no les ha temblado el pulso a la hora de crear combates m�s tensos. Tampoco se trata de una franquicia que deba ser muy dif�cil en su dificultad normal, y el juego proporciona todas las ayudas necesarias para que cualquiera sea capaz de superar su historia. Pero sobre todo en los �picos y largos jefes finales se agradece una mayor sensaci�n de peligro.

Respecto a su precuela directa esta entrega introduce un nuevo sistema de combate a bordo de un mecha. En estos el jugador debe intentar romper la guardia del enemigo golpeando en la parte de su cuerpo correcta dependiendo de su postura. La postura del enemigo tambi�n anuncia cu�l ser� su pr�ximo ataque, teniendo que decidir el jugador si podr� soportarlo o si merece la pena defender para reducir da�o o usar alg�n craft, que se rigen por las mismas reglas que en los combates normales, para evadir o garantizar que el pr�ximo golpe romper� la guardia enemiga independientemente de donde golpee. A partir de cierto punto en la trama el jugador podr� establecer un enlace con cualquier miembro del grupo que, aunque no participar� directamente en estas batallas, proporcionar� turnos especiales en los que podr� hacer uso de artes m�gicas para atacar, aumentar sus estad�sticas, o incluso curarse. Estos combates s�lo suceden en puntos concretos del desarrollo argumental y son un agradecido cambio de aires. Resultan divertidos aunque sean menos profundos que los normales.

Fuera de los combates podemos explorar entornos tridimensionales bastante simples en dise�o, pero funcionales. Son f�ciles de recorrer, sobre todo ahora que el jugador cuenta con una motocicleta y caballos como medios de transporte alternativos. Saben dar suficiente espacio al jugador para moverse y as� lograr una cierta sensaci�n de falsa libertad, aun cuando el desarrollo del juego es en su mayor parte lineal, incluso pasado su primer tercio, tras el cual el juego permite volver a lugares ya visitados para realizar nuevas misiones secundarias. Las mazmorras salen peor paradas, siendo meros escenarios en los que ambientar los combates m�s dif�ciles y con alg�n que otro gimmick y bifurcaciones para llegar a cofres opcionales para disimular que el avance est� por completo guiado. Y para ser justos el juego tampoco necesita m�s. Hay pocas mazmorras y no resultan aburridas porque el combate, que es el n�cleo de la jugabilidad, es siempre muy satisfactorio. Al igual que en el primer Cold Steel, en ciertos momentos de la trama tendremos un n�mero limitado de puntos de afinidad que podemos gastar en ver eventos opcionales con el resto de h�roes del grupo principal y otros personajes importantes en la historia. Esto proporcionar� experiencia para aumentar nuestro nivel de enlace con ellos, mejorando la utilidad de los enlaces de combate con nuevos a�adidos como un tercer ataque realizado por el primer personaje si el enemigo tiene poca vida.

En el segundo acto del juego el jugador usar� una nave voladora como base y, cumpliendo misiones secundarios, podr� reclutar nuevos miembros para su tripulaci�n que abrir�n nuevas instalaciones. Tanto tiendas, como zonas de entrenamiento, entre otros. Por �ltimo, hay un buen pu�ado de minijuegos, algunos recuperados tal cual de la anterior entrega como la pesca, otros provenientes del primer Cold Steel pero que en este han sido mejorados y uno de snowboard nuevo y muy divertido.

Trails of Cold Steel II es un gran juego de rol japon�s, aunque eso no significa que no podr�a haber sido mejor. Es muy bueno, pero incluso eso puede ser decepcionante para los que sabemos que Falcom puede dar mucho m�s de s� cuando ponen toda la carne en el asador. A�n as�, es una de las mejores opciones, fuera de las sagas m�s consagradas entre el p�blico y la prensa, disponible en estos �ltimos meses para consolas en su g�nero.

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Opini�n: Xanadu Next

Sun, 13 Nov 2016 22:44:00

Xanadu Next es un juego desarrollado por Nihon Falcom y lanzado en Jap�n para PC en el a�o 2005. No ser�a hasta 2016 que XSEED lanzar�a de manera oficial una versi�n localizada al ingl�s en Steam. Existe una versi�n para la fallida N-Gage que, curiosamente, si sali� en todo el globo en su d�a, sin embargo se trataba de una adaptaci�n realizada por otra compa��a y que, si bien aprovechaba el mismo nombre, se trataba de un juego bastante diferente y de discutible calidad.

Xanadu Next celebraba el 20 aniversario de Dragon Slayer II: Xanadu, aunque no guarda relaci�n directa con esa serie ni con ning�n otro juego en especifico de la compa��a. Si tiene ciertas referencias a varios cl�sicos de Falcom y, en general, transmite la sensaci�n de ser una celebraci�n de todo lo que hizo grande a esta compa��a.

Gr�ficamente el juego no era ning�n portento ni siquiera en 2005 y por supuesto no ha mejorado con los a�os, pero es lo que cab�a esperar. A nivel art�stico, por suerte, s� que destaca. El juego presenta un tono m�s cercano a la fantas�a oscura que otras producciones de la compa��a y apuesta por una mezcla entre un estilo m�s similar al que asociar�amos con una producci�n de Occidente, con escenarios m�s apagados y enemigos con dise�os inspirados por la alta fantas�a occidental, con personajes con rasgos m�s propios del anime japon�s. Los personajes tienen dise�os muy atractivos potenciados por las estupendas ilustraciones de las que hace gala el juego. Los escenarios que visitamos en nuestro periplo tambi�n est�n muy cuidados y aunque las ambientaciones no son a priori las m�s originales del mundo, Falcom es capaz de darles una peque�a chispa de personalidad propia que hace que esto no sea un problema. Al contrario, al ambientarse la acci�n en un mundo cohesionado la desarrolladora ha prestado especial atenci�n a que la geograf�a tenga cierta l�gica, siendo sencillo imaginar un mapa de la regi�n y que no desentone en el contexto de un mundo m�s o menos realista, y gracias al lore detr�s de cada localizaci�n se consigue crear un escenario cre�ble en el que el jugador puede divertirse explorando sin romper en ning�n momento la inmersi�n.

El bestiario se funde a la perfecci�n con la ambientaci�n general del juego, ambientaci�n que por su parte resulta siempre magn�fica. En Xanadu Next el jugador explora las ruinas de lo que muchos siglos atr�s fue una pr�spera civilizaci�n mientras intenta desentra�ar sus secretos. Ruinas, pasajes subterr�neos, bosques encantados, todos creados con cuidado y la suficiente atenci�n al detalle como para conseguir que el jugador quiera sumergirse en su mundo de fantas�a oscura que, aunque salvando las obvias distancias, recuerda a las obras de Yasumi Matsuno y, en especial, a Vagrant Story.

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A lograr este ambiente m�gico ayuda mucho la banda sonora que es muy posible constituya el mejor trabajo del equipo de sonido de Falcom. Desde el misterioso y brillante tema principal, pasando por los m�s relajantes y ambientales temas que acompa�an las distintas localizaciones, hasta el vibrante tema que suena en las batallas contra los imponentes jefes finales. Algo que merece la pena destacar es que Xanadu Next versiona varias veces los mismos temas para adaptarlos a distintas situaciones. Esto, lejos de ser una soluci�n vaga, a�ade una mayor sensaci�n de cohesi�n al juego en su conjunto, pues estas variaciones est�n muy inteligentemente usadas y por supuesto todas destacan por sus propios m�ritos como temas individuales tambi�n.

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Por desgracia la banda sonora no destaca por ser incre�blemente variada, pero dada la gran calidad de todos los temas y que su duraci�n es la suficiente como para no llegar a resultar repetitivos, esto es algo que mientras uno est� jugando apenas resulta notorio.

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Xanadu Next es primordialmente un juego de rol de acci�n con un mapeado al m�s puro estilo Metroid. El jugador parte de un poblado inicial que sirve de HUB donde puede actualizar su equipo, mejorar sus atributos, comprar pociones y llaves, y m�s. Una vez atraviesa las puertas hacia el mundo exterior le esperan pantallas llenas de monstruos, trampas y puzzles varios que deber� resolver para avanzar. El dise�o del mapa es espectacular, siendo quiz�s uno de los mejores exponentes que existen de este tipo de juegos en cuanto a esto. La forma en la que est� estructurado el juego ense�a al jugador a organizar sus aventuras en expediciones m�s o menos cortas antes de volver al pueblo a reponer fuerzas y reabastecerse de los objetos necesarios. Esto preferiblemente habiendo abierto un atajo (o en su defecto activado un teletransportador) que le permita en la siguiente expedici�n ahorrar camino y llegar a�n m�s lejos. Morir en el campo nos da la opci�n a volver al pueblo perdiendo el 50% de nuestro dinero y la mitad de unidades de cada uno de los objetos que llevamos encima (o el objeto en s�, en caso de llevar s�lo una unidad) o de cargar el �ltimo archivo guardado. El caso es que el juego no tiene puntos de guardado fuera del pueblo excepto en las �reas donde est�n los jefes finales de cada zona, por lo que se agradece la existencia de un un banco y de un almac�n en el pueblo para guardar objetos que no queramos perder (a cambio no tenemos acceso a ellos hasta que los saquemos, claro). Xanadu Next es un juego donde se notan en su dise�o las manos de los m�s veteranos en la industria, estamos hablando de la misma gente que pr�cticamente invent� los juegos de rol japoneses y el nivel de perfeccionamiento que han alcanzado con los a�os brilla en su m�ximo esplendor en este juego. Est� construido de una manera que ense�a al jugador sin decir ni una palabra a encontrar su propio ritmo y a aprovecharse de todas las habilidades a su disposici�n para avanzar. Tampoco es un juego especialmente dif�cil. De hecho es bastante sencillo comparado con los Ys que le fueron contempor�neos. Pero requiere siempre cierto grado de atenci�n y sabe recompensar al buen jugador, generando una sensaci�n de gratificaci�n que impulsa a querer seguir jugando un poquito m�s. Xanadu Next es de esos juegos donde piensas "s�lo una expedici�n m�s, a ver que hab�a por ese t�nel. Tardo cinco minutos" y acabas enfrentando al jefe de la zona dos horas y media m�s tarde. Por supuesto el mundo de Xanadu Next est� lleno a rebosar de tesoros, muchos escondidos tras un puzle de cajas. El juego parece adorar esa clase de puzzles. La mec�nica es muy sencilla, el jugador mueve cajas estrat�gicamente para alcanzar un cofre. Durante la aventura principal no son muy comunes y su curva de dificultad es muy amable, pero para cofres opcionales los desarrolladores decidieron que iban a coger la mec�nica de empujar y romper cajas y llevarla a sus extremos m�s retorcidos. Al final con un poco de ma�a y visi�n espacial todos son perfectamente superables, pero gracias a que supone un refrescante reto bien recompensado, resultan muy gratificantes. Adem�s, pueden suponer un agradecido respiro respecto a las salas cargadas a rebosar de enemigos.

El juego usa un sistema de combate sencillo, basado en aquel que usaban las primeras iteraciones de la franquicia Ys. Si bien en Xanadu Next s� tenemos bot�n de ataque, el posicionarnos correctamente respecto al enemigo puede suponer la diferencia entre la victoria y la derrota, sobre todo si no llevamos el equipo adecuado. Golpear a un enemigo por el lateral hace m�s da�o y hacerlo por la espalda m�s incluso. Lo mismo es aplicable al personaje que controlamos, por supuesto. Tanto el protagonista como los enemigos se quedan quietos moment�neamente durante la animaci�n de ataque y ese es el momento ideal para rodear al monstruo en cuesti�n y atacar. Por supuesto esto se complica con enemigos cada vez m�s r�pidos, que atacan a distancia o que pueden volar para evitar nuestras acometidas, pero sobre todo cuando se juntan muchos enemigos a la vez en un espacio relativamente peque�o. Es entonces cuando el combate exige del jugador el saber reconocer los patrones de ataque de los enemigos y prestar atenci�n a c�mo est�n colocados todos ellos en el escenario porque atacar a un enemigo por su espalda puede suponer exponerle la nuestra a otros dos. Con este sistema los combates son muy �giles y tanto jugador como enemigos se mueven mucho por la pantalla, buscando el mejor momento y �ngulo para atacar. Es sencillo y cualquiera puede aprenderlo, pero dominarlo exige bastante como para mantener entretenido a los jugadores m�s veteranos, intentando disminuir lo m�ximo posible los da�os recibidos, o no recibir da�o directamente. De hecho, el juego est� dise�ado teniendo esa posibilidad en cuenta y anima al jugador a intentarlo con un sistema de puntuaciones que analiza al final de la trama que tal se ha desenvuelto el h�roe en su aventura, teniendo en cuenta nivel, pociones usadas, muertes y da�o recibido, entre otros.

Para mantener la jugabilidad fresca Xanadu Next incluye varias formas en las cuales el jugador puede volverse m�s fuerte. Por un lado venciendo a enemigos gana puntos de experiencia y sube de nivel. Al subir de nivel mejora su vitalidad y a mayores gana desde seis puntos de bonificaci�n que puede repartir entre sus distintos atributos a placer en el templo del pueblo. Mientras el jugador no suba otra nivel puede volver al templo siempre que quiera y reorganizar los puntos y adem�s en el mismo templo se le ofrece la opci�n de bajar de nivel, reduciendo en un 50% la experiencia necesaria para volver a alcanzar el nivel que previamente ten�a. Esto est� pensando en el caso de que un jugador descubra demasiado tarde que no le gusta c�mo ha construido a su personaje y quiere volver a empezar desde un punto anterior a desarrollarlo de otra forma, por ejemplo potenciando la magia en vez el ataque f�sico. Xanadu Next tiene un l�mite de nivel mucho m�s bajo que en otros juegos del g�nero, estamos hablando de un nivel 20 que se subi� a 30 mediante un parche (en la versi�n occidental ya viene el parche de serie) porque se consider� necesario para la mazmorra opcional que tambi�n introdujo el parche en cuesti�n. Subir de nivel es un proceso m�s lento de lo normal y grindear no acostumbra ser una buena opci�n para solucionar la mayor�a de los problemas. En su lugar el juego nos anima a jugar con los puntos de bonificaci�n o a explotar sus otras mec�nicas que permiten optimizar el rendimiento en combate del h�roe. La m�s obvia es actualizando el equipo, aunque hay que tener en cuenta que para equiparse cada arma, escudo o armadura es necesario alcanzar el valor exigido por el objeto en cuesti�n en todos los atributos. Las armadura proporcionan defensa, los escudos defensa y evasi�n, adem�s de tener capacidad de bloqueo. Pero lo m�s interesante son las armas y los casos. Los casos proporcionan resistencias elementales y son muy limitados. Hay uno para resistir cada elemento y poco m�s. Las armas por su lado tienen asociada una habilidad especial de la que el jugador puede hacer uso. Hay habilidades activas, que gastan sus propios SP y causan da�o a los enemigos, y habilidades pasivas que proporcionan subidas de atributos y otros beneficios en el campo al jugador. El jugador s�lo puede equipar cuatro habilidades y magias (que se aprenden leyendo libros de hechizos e igual que las habilidades cada hechizo tiene sus usos limitados por sus SP) a la vez y, aunque puede cambiar las habilidades equipadas en cualquier momento, dado que abrir el men� no pausa el juego no es muy recomendable hacerlo durante combates. Lo mismo se aplica a usar objetos de recuperaci�n que no est�n asignados a una de las limitadas ranuras de acceso r�pido. Est� dise�ado as� a prop�sito para que abrir el men� sea un riesgo que el propio jugador decide asumir.

Volviendo a las habilidades, cada una es exclusiva de un arma y s�lo de esa. Pero, si el jugador alcanza el 100% de proficiencia en un arma puede aprender esa habilidad para siempre y usarla incluso con otras armas. Pero hay m�s, si sigue luchando con ese arma y alcanza el 200% desbloqueara todo su potencial y se volver� m�s fuerte. No es raro que al cambiar a una espada en principio m�s poderosa al 0% de proficiencia el jugador haga menos da�o que con la espada anterior al 200%. Puede surgir el instinto de querer aferrarse a un arma pero esto no funciona bien. Xanadu Next est� dise�ado para recompensar la experimentaci�n, pues al final marcan m�s la diferencia las habilidades que el arma, aunque sigue siendo recomendable usar armas dominadas al 200% contra enemigos con defensas excepcionalmente altas. De esta manera el juego incita a estar cambiando constantemente de arma.

Por �ltimo el jugador puede fusionar su alma con un esp�ritu guardi�n. Los guardianes se encuentran a lo largo de la aventura sellados en cartas ocultas en cofres y para cambiar de guardi�n equipado es preciso acudir al templo. Los guardianes proporcionan beneficios varios que pueden alterar el estilo de juego del jugador. Por ejemplo, elegir un guardi�n que aumenta los puntos de vida en vez uno que permite usar la magia es lo ideal si se pretende jugar como tanque y luchando a base de ataques f�sicos, pero para el jugador que prefiera usar magia y luchar a distancia el segundo es la opci�n ideal. Los guardianes suben de nivel por n�mero de combates ganados o rezando ante las estatuas sagradas esparcidas por las ruinas de Xanadu.

Todas estos sistemas son por separados muy sencillos e intuitivos. Juntos crean una experiencia redonda. La curva de dificultad de Xanadu Next esta medida al mil�metro y el propio juego se encarga de explicar en detalle sus mec�nicas de forma gradual en un bien planteado tutorial, adem�s de ense�ar de forma silenciosa al jugador a desenvolverse con los distintos objetos que re�ne en las ruinas y que se utilizan para salvar obst�culos que abren el acceso a nuevas localizaciones. El broche de oro a un juego que en lo jugable es pr�cticamente intachable lo ponen unos incre�bles enfrentamientos contra jefes finales, de los cuales s�lo uno puede llegar a resultar decepcionante y s�lo si si se compara con el resto.

Xanadu Next no es un juego que busque tener una historia profunda que marque de por vida al jugador y nunca lo oculta. Y, sin embargo, su narrativa si est� muy cuidado y puedo decir sin miramientos que he disfrutado much�simo con su gui�n. Aunque hay contados eventos y escenas de v�deo, gran parte de la historia est� narrada mediante tablillas y documentos que encontramos mientras exploramos las ruinas y que debemos llevar de vuelta al pueblo para que nos lo traduzcan, pero el juego tambi�n decide aprovechar los NPCs que se pasean el HUB para narrar su trama. Como es costumbre en Falcom cada NPC tiene su nombre, una personalidad lo suficientemente definida y di�logos que cambian cada vez que pasa algo relevante en la historia principal. Es recomendable hablar con ellos siempre que surge la oportunidad pues a parte de aprender sobre sus vidas y la historia de su regi�n, lo cual a�ade capas de profundidad al mundo construido por Falcom y potencia la inmersi�n del jugador, nos contar�n rumores sobre una guerra civil que se cuece en la corte y, en general, nos proporcionaron retazos de toda una trama de fondo con un ligero gusto pol�tico que sirve de contexto perfecto para la historia principal de Xanadu Next. El tono general es muy solemne y aunque es un mundo de fantas�a los elementos m�gicos est�n bastante limitados. El juego busca establecer su narrativa como una suerte de tragedia Shakesperiana que, si bien no sigue a pies juntillas esa senda durante todo su transcurso, s� funciona de maravilla a la hora de presentar la historia y adem�s queda de lujo junto con la ambientaci�n que buscaban crear, reforz�ndola a�n m�s si cabe.

La tem�tica de un caballero con unos valores y moralidad de una �poca que el resto de la sociedad est� dejando atr�s y que se siente perdido en un mundo que cambia cada vez m�s r�pido resuena a la perfecci�n con la idea de un juego que trata de explorar ruinas de una civilizaci�n desaparecida. El guionista de Xanadu Next fue siempre consciente del tipo de juego con el que estaba trabajando y supo integrar a la perfecci�n una, aunque al final del d�a simple, muy buena historia, contada con elegancia, con el resto de elementos de arte, m�sica y jugabilidad.

Como dije al principio de este art�culo Xanadu Next es una celebraci�n de todo lo que fue, y sigue siendo, Falcom como desarrolladora. Sistemas jugables cuidados al mil�metro, espectacular m�sica y narrativas cuidadas y bien integradas en el conjunto del juego. Eso es lo que representa esta compa��a y en muchos sentidos Xanadu Next supone el m�ximo perfeccionamiento de todos estos aspectos. Xanadu Next es uno de los mejores juegos de Falcom, sino el mejor, y toda una joya que nadie deber�a perderse.

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