Precursora de la posterior y más limitada Sega Master System, se trató de una consola de auténtico lujo, que más tarde, y en dos ocasiones, Sega optó por ir capando para reducir costes, y dar lugar a las más conocidas y baratas Master System I y II.



Como podéis ver en la foto superior, la consola ya seguía la línea de Add-Ons que más tarde hizo famosa, tal vez tristemente, a la Megadrive.

En este caso, lo que "calza" la consola encima, es el FM-Pack o FM-Unit, una maravilla encargada de potenciar el sonido hasta niveles de lujo, del cual hablaremos más adelante en un artículo dedicado.

El otro Add-On que presenta la consola (frente a la derecha), es el adaptador para las Sega 3D Glasses, las gafas en 3D de Sega que se hicieron famosas en la época de la primera Master System.
La sorpresa aquí, es que las gafas ya existían, y tenían juegos antes de que la primera Master System viera la luz.
La clave está, una vez más, en que de hecho la Mark III y las dos Master Systems comparten su hardware básico al 100%.



La Mark III es básicamente una Master System con un puerto para FM-Pack, al igual que la Master System es una Master System II con más botones, clavija para Gafas 3D, y puerto de expansión inferior, cosas que se eliminaron en el tercer y último modelo.

Sin embargo, este hardware no desapareció con el fin de la Master System II. Como veremos en otro artículo, donde hablaremos del sistema Master System, el hardware básico de esta consola ha llegado casi hasta nuestros días, de la mano de TecToy, haciendo de él uno de los hardwares más longevos conocidos (sin contar NES clónicas varias).

Hoy en día, la Sega Mark III es una pieza muy cotizada, debido a que tampoco tuvo una gran tirada, ni salió a la venta en nuestro país.


(Espero que esta imagen sea un montaje, por que si no... )

"Y al séptimo día Sega vio que la gente quería VideoJugar, y Sega pensó que era bueno..."



La SG-1000 llegó pronto, muy pronto para variar, y de hecho no tuvo que competir directamente con la NES (de ello se encargaría, en lucha desigual, la posterior Master System).



Se pudo leer, en una revistita de la época en España, el siguiente comentario: "No se a donde pretenden ir a parar con ese ridículo mando. Donde esté un buen joystick de Spectrum o Amstrad, que se quite esa 'tableta' de tres al cuarto. Por no hablar de todas las posibilidades que ofrece un buen ordenador..."

Este comentario recuerdo que lo leí concretamente en relación a una NES, cuando empezaba a ser introducida en nuestro país.

No tengo ni idea de si esa forma de pensar anti-consolera estaba generalizada en todo el mundo, pero pudo ser parte de la causa de que la gente aún no estuviese dispuesta a aceptar un aparato que "solo" servía para jugar.

En cualquier caso, lo que sí sabemos es que Sega reaccionó, lanzando inmediatamente y como siguiente máquina directa, un ordenador basado en la SG-1000, del cual hablaremos en otro artículo.

Otra posible prueba de este movimiento, fue el lanzamiento más tarde de un teclado exclusivo para la Mark III, que trataba de orientarla a lo que, al parecer, aún demandaba el público de la época.

(Teclado SK-1100 para la Mark III)

La vida de la SG-1000, por tanto, fue corta. Se crearon no obstante un buen número de cartuchos, y a ellos sí se les dio distribución en Europa (Francia), gracias de nuevo a que el ordenador SC-3000, compatible con la SG-1000, si fué distribuido en el viejo continente.

Curiosidades

- La consola tiene una versión en la que figura la palabra "Grandstand", para fuera del mercado asiático:



- Oculto en la BIOS de la máquina, había un sencillo juego sorpresa llamado "MazeGame":



Y es todo por el momento. Queda mucho material de esta consola que mostrar y del que hablar, pero será en próximos artículos.

Stay Tuned!

"Si, si, son para el nene... No, esta ya la tiene... ¿no le quedan de esa del erizo azul ese...? Y... me podría dar el contenido del Happy Meal fuera del continente? Es para que no coja olor esta cajita tan mona, que luego el nene la usa para guardar sus cosas...

y tanto que la usa para guardar sus cosas, pero no el nene, si no el ficticio padre Seguero que está comprando el Happy Meal para quedarse la maquinita ^^



Las cosas que tiene que hacer uno u_u¡




Se conocen al menos dos colecciones distintas de estas hand-helds. La foto superior corresponde a la edición más antigua (5 maquinas), y la foto de debajo, con 6 máquinas, a la última edición que tuvimos aquí hará ya unos 3 años.


Secreto: (Pincha para leerlo)







En realidad, eran unas maquinitas, como no, muy sencillas, pero su mayor atractivo radicaba, al menos para mi, en ser material hardware de Sega en una época en Sega ya no hacía hardware.
O licenciado por Sega, pero vaya, para el caso es lo mismo


Juro que moví todos los hilos posibles para que me dieran un expositor más guapo que éste, pero no funcionó T_T

Con "AI" por "Artificial Intelligence", Sega quería dejar bien claro por donde iban a ir los tiros: Innovación. Prestaciones.
En definitiva, un sueño...


Secreto: (Pincha para leerlo)


Pero adelantarse a su tiempo y limitar su mercado a la gente de pasta, es algo que empezó a darle problemas a Sega desde bien jovencita.
Aquí no perdieron dinero, pero consiguieron que no se vendiera ni una: las únicas unidades existentes conocidas son 5 prototipos funcionales que se enviaron a directivos de Sega of America para su aprovación, la cual, evidentemente, nunca llegó.

Si alguien tiene una y me la quiere "regalá"...



Como producto de lujo, orientado a la incipiente "multimedia" que tantas bocas empezaba a llenar por aquel entonces, la máquina venía bien cargadita de extras, como una trackball, y toda una pizarra táctil que hacía las veces de tableta digitalizadora de gran tamaño, permitiendo realizar tareas de edición fotográfica u otras, con una comodidad poco usual por aquel entonces.


Otro accesorio que no escatimaron en implementar, es la unidad de cassette, que por aquellos tiempos solía venderse por separado (para ahorrar costes) en la mayoría de ordenadores, orientada siempre a aquellos usuarios que, tras la compra y por alguna extraña razón se dieran cuenta de que la casetera era algo indispensable en aparatos sin disco duro ¬¬




Pero el MSX y sus cartuchos ya eran, más que una realidad, un acierto y una tendencia a seguir, así que Sega no se conformó con implementar de serie la unidad de cinta.
Además, añadió un puerto de cartuchos ROM para carga instantánea de aplicaciones y juegos.
Estos cartuchos, como se puede ver, no llegaron a finalizarse para la presentación de los prototipos.




Pero su auténtico punto fuerte era la versatilidad: no sólo permitía montar el teclado sobre la tableta digitalizadora cuando ésta no se estaba usando, si no que la propia tableta permitía que se colocasen sobre ella una serie de plantillas que convertían al AI en aparatos que iban desde un simple juego de niños del tipo "pulsa aquí y suena la vaquita, muuuuh", hasta auténticas máquinas TPV registradoras similares a las que se usan hoy en Mc Donalds o Pans & Company.



En resumen, gracias a su versatilidad y potencia (por que además era una máquina potente para su época), se presentaba como "El ordenador perfecto para el hogar".



Lamentablemente, supongo que algunos estudiosos del mercado pensaron que era demasiado pronto para dejarnos a todos con estas caras:


Secreto: (Pincha para leerlo)

Al igual que Nintendo comenzó su andadura empresarial fabricando cartas, Sega también empezó haciendo algo bastante distinto de las consolas (aunque no tanto): máquinas tragadineros.


Sabes que la deseas...





Los dineros.


Bajo el nombre original de Service-Games, y fundada con capital americano, nuestra Sega de hoy no era la única compañía que fabricaba este tipo de máquinas.
Pero tuvieron el acierto de apostar fuerte por un mercado que iba a enriquecer a muchas pequeñas empresas de por aquel entonces:
La guerra. Concretamente, la Segunda Guerra Mundial.
Decenas de miles de soldados con ganas de alcohol y ludopatía fueron la ansiada fuente de ingresos que permitió a Sega recuperar rápidamente su inversión, y crecer, posicionarse, y empezar a pensar en qué podrían hacer con su dinero cuando el negocio de la guerra tocase a su fin.