Voy a evitar las introducciones extensas repasando la historia de la saga ya que no viene a cuento y creo que todos más o menos la conocemos. Hace nada he ido a ver “El Despertar de la Fuerza” y por respeto a los lectores no voy a spoilear ni media película pese a que las ganas no me faltan.

Es pertinente mencionar que existe el rumor de que la idea que tenía George Lucas sobre un Episodio VII era muy distinta a lo que terminó haciendo J.J Abrams, el tipazo que dio lugar a peliculones como Misión Imposible 3 y filmes infumables como Sección 8. El creador de la franquicia tenía pensando era continuar apoyando el argumento en Han Solo, Luke Skywalker, Leia haciendo notar su edad aunque también dándole cabida a los jóvenes. Pese a que tito Lucas figura como consejero en los créditos de este “Episodio”, Abrams paso olímpicamente de sus opiniones a la hora de crear el guión: “Soy un fanático de verdad, viejo idiota. No voy a permitir que me hagas caer en la fosa de la trilogía de las precuelas”.

Lo siento por los presentes pero se nota un huevo la falta de George Lucas, la mente detrás de este universo, su ausencia es casi tan grande como la que vamos a sentir en el próximo Metal Gear sin Kojima o en el caso de que hiciesen secuelas de Avatar sin James Cameron. Solo el hombre de barba canosa conoce su mundo, sabe qué hacer con él ya sea para arruinarlo en la dirección (trilogía de Anakin) o bordarlo con la historia de Luke. Siempre me ha parecido que a nivel argumental, la trama de Darth Vader estaba bien encarada pero que quizás se había fallado en darle todo el control de la producción a Lucas. No habría estado mal poner a otro director, un guionista que corrigiese aquello que se veía feo en la historia, etc.

En fin, el tema es que J.J Abrams ha dejado notar el peso de la responsabilidad ya que por un lado tenía a Disney: “No la cagues, tío. Que comprar LucasFilms nos ha costado de lo lindo” y por el otro a los fanáticos que, por el paso del tiempo, han puesto la saga en un pedestal muy alto. Con todo esta presión, el señor de Star Trek, optó por hacer un remake de “Una Nueva Esperanza”, intentando marcarse un fanservice y dejando a todo el mundo contento. Esto se vuelve contraproducente para el filme que deja a varios personajes como idiotas, tanto protagonistas como antagonistas, que no voy a decir nada para no destripar y además se carga el universo de Star Wars. Dios mío, me esta costando no destripar y puede que al no hacerlo estas líneas carezcan de sentido.



Es evidente que detrás de la factoría de El Despertar de la Fuerza se encuentra una compañía que solamente piensa en recaudar pasando de la calidad (si les interesase un poquillo habrían “arreglado” o cancelado algunas películas de Marvel o de Piratas del Caribe) o de expandir el universo de Star Wars como bien lo podría haber hecho George Lucas.

El plantel de personajes esta forzadísimo, los de la trilogía original aparecen por mero fanservice para que el fanático emita un grito en medio del cine y poco más, los nuevos parecen sacados de un episodio del Capitán Planeta: “Oye, que tenemos un afrodescendiente que cuenta unos chistes, aparece un caza recompensas chino en medio de la nada y tenemos una chica que es tres veces más capaz que Luke y Anakin, juntos”. Sin dudas, se trata de la película que, a la fecha, deja muy patente que Disney está detrás debido a que hay cosas en el guión, sin sentidos, que ya son marca de la casa.
También es descarado, y molesto a partes iguales, que cada personaje de la trilogía original tenga su “versión joven” y la transición está metida con calzador. Todo parece un comercial de coches dónde te muestran el viejo modelo del coche e intentan venderte que compres el nuevo. ¿No habría sido mejor plantear una historia más personal? ¿Quizás protagonizada por un caza recompensas que debe encontrar un artefacto importante?



Los combates son divertidos, los efectos especiales una gozada y la dirección, pese a carecer de la señas de identidad de Abrams, es, cuanto menos, correcta. La banda sonora, a cargo de John Williams, también es una auténtica delicia que pondrá los pelos de punta a más de uno.

Para cerrar esta entrada me queda por decir que quizás hubiese preferido un “Star Wars: El Despertar de la Fuerza” y no un Episodio VII, ya que si lo tomamos como parte de una historia central, prácticamente, se carga el viejo universo y el suyo. Lo mejor habría sido plantear una trama que no tuviese en cuenta a los personajes de la trilogía original pero si sus hechos, tomándolo como algo meramente secundario para otorgarle trasfondo al filme.

Y ahora creo que iré a ver un episodio del Capitán Planeta, me he quedado con las ganas.

Edito: Por cierto, para los que preguntan, no hay sexo durante la película, ni desnudos. Debería iniciar una campaña por Change.org para que Lars Von Trier se encargas del Episodio X.


Edito 2: Nominación al Oscar para Mark Hamill a mejor actor ya!