Resumen del argumento
Han pasado ya trescientos años desde los acontecimientos narrados en la trilogía Nacidos de la Bruma (Mistborn) y Scadrial se encuentra ahora cerca de la modernidad: ferrocarriles, canales, iluminación eléctrica y los primeros rascacielos invaden el planeta. Aunque la ciencia y la tecnología están alcanzando nuevos retos, la antigua magia de la alomancia continúa desempeñando un papel fundamental. En una zona conocida como los Áridos existen herramientas cruciales para aquellos hombres y mujeres que intentan establecer el orden y la justicia. Uno de estos hombres es Lord Waxillium Ladrian, experto en metales y en el uso de la alomancia y la feruquimia. Después de vivir veinte años en Los Áridos, Wax se ha visto obligado, por una tragedia familiar, a volver a la metrópolis de Elendel. Sin embargo, y a su pesar, deberá guardar las armas y asumir las obligaciones que exige el hecho de estar rodeado de la clase noble. O al menos eso cree, ya que aún no sabe que las mansiones y las elegantes calles arboladas de la ciudad pueden ser incluso más peligrosas que las llanuras de los Áridos. Un skyline metálico de bruma, de ceniza y vapor conquista el cielo amenazando a todos aquellos que viven y luchan debajo de él. Aleación de ley constituye la secuela de la trilogía Nacidos de la Bruma (Mistborn), formada por El imperio final (2006), El pozo de la ascensión (2007) y El héroe de las eras (2008). Algunos datos del libro • Cubierta: • Autor: Brandon Sanderson • Editorial: Ediciones B • Nº páginas: 368 páginas • Lengua: Castellano • Encuadernación: Tapa blanda • ISBN: 9788466651752 • Año de edición: 2012 Comentarios Tengo que reconocer que la compra de este libro fue completamente compulsiva, puesto que me lo encontré en la librería cuando iba buscando otro libro, y no pude dejarlo pasar. Secuela de la trilogía con la que conocí a Brandon Sanderson y que hizo que se convirtiese en uno de mis escritores favoritos, desde que supe de su existencia estuve esperando a que se publicase en España pero que me cogió por sorpresa al verlo en la librería porque ni me había enterado de que por fin lo habían traducido. Entrando a hablar propiamente del libro, lo primero que quiero comentar es la relación con la primera trilogía, ya que si bien es una secuela, sucede cientos de años después de lo que ocurre al final de la misma, por lo que las referencias a lo que en ella sucede se podrían considerar prácticamente como mitos en la historia de este libro por lo que en un principio las relaciones son indirectas. Ahora bien, que esto no os confunda, es necesario haber leído la primera trilogía para entender algunos temas de los que se tratan y porque conforme avanza la historia los nexos de ambas historias se hacen más y más presentes (con algunas referencias muy sorprendentes si pienso en lo independientes que parecen al principio del libro). Por lo tanto, remarco a pesar de poder parecer repetitivo, es OBLIGATORIO haber leído la primera trilogía para leer este “Aleación de Ley”. Por otro lado, al contrario de las conclusiones que había sacado previamente del libro buscando información en su momento sobre el mismo, hay que tener claro que está pensado como la primera parte de un arco mayor, y que si bien tiene una historia propia, no estamos en un caso como “El imperio final”, donde si no hubiese habido continuación, nos habría quedado una historia completamente cerrada, en este caso DEBE haber una continuación, puesto que se dejan varios hilos argumentales sin cerrar, con un gancho planteado demasiado grande como para dejarlo así. Ojo, que con esto no estoy diciendo que el libro no sea disfrutable como pieza separada, pero os va a dejar con ganas de más, de mucho más. En cuanto a la ambientación del libro, tengo que reconocer que me pasa algo muy curioso, si bien se hablan de rascacielos y otros elementos que situarían en un eje de tiempo a la obra en la revolución industrial, a mi mientras me leía el libro por diversos motivos como son el carácter de los protagonistas, sus relaciones entre ellos y las armas, así como algunos eventos que veremos suceder a lo largo de la historia, siempre me lo imagine en una época más próxima al equivalente al lejano oeste con una gran ciudad donde se concentraría prácticamente la totalidad de la población. Y es que el libro te engancha de forma increíble desde el prologo con la “cacería” en Los Áridos (al terminar el prologo es imposible no haber “viajado” a las mejores películas del oeste) formándose un nexo entre el personaje principal y el lector que hace que en todo momento quieras saber que le va a pasar. Siguiendo con la historia, esta vez Sanderson nos da un libro corto pero muy, muy intenso, y es que en todo momento están sucediendo (muchas) cosas, además consiguiendo unir todo el sistema de “magias” que veíamos en la trilogía original con duelos con armas de fuego de una forma totalmente natural, que hace que cuando terminas el libro te parezca increíble que hasta la fecha no hubieses leído nada igual. Y mira que tengo que reconocer que esto de la fantasía lo veía muy atado a la espada, pero ojo, porque en este sentido este libro me ha dejado completamente perplejo y es que a partir de ahora, cualquier asalto a un tren sin ir acompañado de la alomancia me va a saber a muy poco. Los personajes, si bien podríamos decir que hay un personaje principal (todos sabemos que con Sanderson eso puede llevar a engaño), realmente la historia se centra en un trío, el protagonista es un noble que por motu propio se alista como justiciero en Los Aridos que la historia hace que tenga que volver a la ciudad (nos sirve de punto de vista al lector del mundo en el transcurre la historia), un amigo suyo de Los Áridos que será el desenfadado del grupo y que hará gala de unos modales escasos y una joven dama de la ciudad con muchos recursos. Hay que reconocer que en este sentido el grupo no es muy original, sin embargo funciona muy bien a lo largo de toda la historia y rápidamente enganchan al lector. Los hilos argumentales son dos, si bien están muy unidos, por un lado está la investigación y resolución por parte de los protagonistas de unos casos de robos con violencia que abarcan robos a bancos o asaltos a trenes y por el otro, algo que se está moviendo por detrás en la sociedad de la ciudad. El primero se llevará desde el primer momento los focos del libro, ofreciéndonos los enfrentamientos y en el fondo lo que nos hará disfrutar del mundo donde se desarrolla la historia de este libro. Sinceramente, la historia no es muy compleja, pero te puedo asegurar que si te gustan las míticas historias del oeste, con esta vas a disfrutar, porque es lo que propone con enfrentamientos potenciados por la magia del mundo de Sanderson. El segundo al principio es prácticamente inexistente, pero poco a poco va cogiendo más importancia y haciéndose más presente, haciendo de nexo con la primera trilogía de modo que para entender determinadas cosas es imprescindible haberla leído, llegando al climax con un final que va a dejar (y perdonad la expresión) “con el culo roto” a los que hayas disfrutado con la primera trilogía. En conclusión, un libro que desde mi punto de vista merece muchísimo la pena y que refuerza mucho más mi determinación en que Brandon Sanderson es un escritor al que hay que seguir. Señalar (nuevamente) que este libro, a diferencia de lo que podáis leer por ahí o parecer al principio es una SECUELA DIRECTA de “Nacidos de la Bruma”, así que no os pongáis con el sin haberla leído. Para que podáis haceros una idea de lo que me parece el libro, lo pondría ahí, ahí con “El imperio final” y por encima de los demás de la saga. Y no lo pongo como el mejor, porque “El imperio final” funciona mejor como libro independiente que este, aunque “Aleación de Ley” termina de explotar las posibilidades del sistema mágico creado en la saga y con una ambientación que me ha dejado gratamente sorprendido. 0 comentarios :: Enlace permanente
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