Se acerca la Navidad (o eso dice la proliferación de anuncios de juguetes y similares), así que voy a darle un consejo a los padres.

Queridos padres:
Si vais a comprar un juego a vuestros tiernos niños sin mirar la clasificación de edades, mejor compradles una buena película porno que al menos aprenderán algo que sí les será útil en la vida. Total, vuestro nivel de imbecilidad no se verá afectado ni con un regalo ni con otro y nos ahorraremos las habituales peroratas.

Felices Fiestas y hasta la próxima.

Capítulo primero: Trabajas más de lo necesario, inepto.

¿Alguien sabe de dónde sale la costumbre absolutamente irracional de poner un punto después de los signos de exclamación e interrogación? No sólo es que no tenga que ir, es que además es una hipercorrección aberrante como pocas, y una tontería de caballo. Fíjate bien, y verás que... ¡ya tienen un punto!

Si con esa explicación no te entra, tírate por un puente.

Al final habré encontrado un filón con esta gente.

Es una errata tonta, pero me ha hecho gracia.

Se ve claramente que la peli es la risión pura.

A pachas con Damián.