Publicado: 12:23 29/11/2006 · Etiquetas: · Categorías: Videojuegos
Es graciosísimo lo que ocurre con algunos "jugadores". Hace tiempo me quejé de la gente que se paseaba por el Top Spin 2 haciendose los buenos por ir perdiendo un partido de paliza y ponerse a hacer el tonto, y ahora le toca el turno a Pro Evolution Soccer 6, en su versión de XBOX 360, concretamente. Llevo ya un número de partidos muy alto en este escaso mes que llevamos con él en las manos (mas de 160, me parece), con unas estadísticas, dicho sea de paso, muy buenas, pero el caso es que siempre te obligan a jugar ese partido diário en el que el otro contrincante demuestra tener un cerebro similar al de un niño de 7 años que se cabrea porque su mami no le compra las galletas que a él le gustan.
Personalizo en un caso que me ocurrió ayer, uno de tantos muchos, aunque este bastante más descarado. Un partido complicado, trabado, de esos extrañísimos en los que tienes todo el rato el balón pero creas menos peligro que Raúl frente a Terry y Ferdinand, hasta que Joe Cole aprovecha un rechace en el area para poner el 1-0 en el marcador, allá por el minuto 60. Desde ese momento empiezan los sucesos paranormales: el rival empieza a hacer el tonto, empieza a ir muy mal la partida (con lag) y misteriosamente encuentro huecos donde antes no los había, hasta que veo (qué raro) una pausa que ha pedido el rival, pausa que vino precedida a un penalty clamoroso sobre Peter Crouch que el árbitro no dudó en señalar, entonces, la temida cuenta atrás: 60, 59, 58... Lampard deseoso de tirar la pena máxima, pero ¡zas! llega a cero el contador, y ahí se queda. Qué casualidad, qué hecho tan inusual, se cuelga el juego cuando el otro pierde el partido. Yo, previsor como pocos, nada mas ver la pausa, me apresuré a ponerme en estado "aparecer no conectado", que (y comprobado está) ayuda mucho para hacer que el otro tramposo se vaya antes que tu. Lo dicho, juego colgado, Lampard a 11 metros de establecer el definitivo 2-0, y un buen rato así. Televisión encendida, monitor encendido para ver lo que ocurre en la partida, hasta que veo que he recibido un mensaje de darkova, el susodicho usuario de XBOX 360, con el cariñoso texto de "fuck you looser newbie". Realmente, no se en qué cojones piensa esta gente, alguien encaja un gol, y por arte de magia, la partida empieza a ir horrible hasta colgarse, y tiene los huevos de insultarme. Ya no solo porque yo no me crea que ha sido fruto de la casualidad, si no porque hace falta ser rematadamente tonto o perdedor como para creer que alguien que mete un gol y medio a falta de 10 minutos va a intentar colgar el juego. Y así, decenas de casos. Lamentablemente, las 6 desconexiones que tengo por no saber que se podía esperar (todas en los 2 primeros días) no me las va a quitar nadie, así como tampoco me devolverán los puntos que me han robado dicha gentuza, pero al menos, aunque se me queme la consola, aunque tenga que estar 80 horas con ella encendida, jamás me van a volver a ganar así, nunca, se pongan como se pongan. Y que sigan insultando, si, pero, ai... qué bien me lo paso con los mensajitos en forma de respuesta que les envio cuando se desconectan. Principal responsable de tantos, tantos y tantos piques de los rivales Publicado: 20:37 26/11/2006 · Etiquetas: · Categorías:
¿Puede ser mas explícito un simple título? Aún estamos a noviembre, asqueroso mes que, mágicamente y sin saber porqué, desde hace un tiempo marca el comienzo de esa asquerosa época de "felicidad", "bondad", "solidaridad" y "amistad" con todos nuestros semejantes. Las malditas lucecitas inundan las ciudades, demostrando esa misma solidaridad de la que luego alardean gastandose mas de 3 millones de euros en alumbrado navideño en vez de hacer algo que realmente sirva a alguien en el mundo. No voy fardando por ahí de ser el más solidario del mundo, pero al menos no soy tan hipócrita de creerme la Madre Teresa de Calcuta y luego me gasto una millonada en gilipolleces similares. Centros comerciales llenas de ofertas y florecitas, por no hablar de los puñeteros villancicos que retumban en nuestros oidos durante todo el día, que no se qué harán, si atraer clientes o espantarlos, desde luego no recuerdo haber hablado con muchas personas que se declaren "amantes" de la Navidad, y es que no me extraña, fechas (misteriosamente ampliadas por 5 en duración) tan vomitibas como estas solo hacen demostrar lo estúpido que puede llegar a ser el ser humano.
¿Qué clase de persona necesita que sea 25 de diciembre para llevarse bien con su familia? ¿Es que es mejor persona por visitar a alguien el 31 de diciembre que el 4 de abril? Yo hay cosas que no comprenderé, esa estúpida obligación ¿moral? de algunas personas de aparentar lo que no son, de hacer lo que no quieren, de comportarse como dicen que hay que comportarse, no como cada uno cree que es lo correcto para él. Eso por no hablar de las malditas cenas / comidas familiares tan habituales durante esos días, gente que no se ve en todo el año y luego se las dan de "amigos para siempre", qué cojones se supone que intentan demostrar con esas frases tan recurrentes como "qué tal te va todo", cuando me lo podías haber preguntado hace 3 meses, ¿es que eres mas cool por decirlo ahora? No quiero ni comentar el tema de los regalos, que cuando se salen el ámbito infantil resultan tan falsos como el resto de actividades que se hacen durante estas fechas (¿o debería decir meses?). Que si te doy un perfume, que si toma esta ropa, que si a ver si te gusta este reloj. Si realmente te importara algo, te hubieras molestado en conocerme y no regalarme lo que le puedes regalar a cualquiera que no has visto en tu jodida vida. Me podría tirar 80 horas comentando ejemplos y más ejemplos parecidos, pero es que todo se resume en una frase: si tu eres mi amigo, si tu eres familia mia y te importo algo, vamonos por ahí un domingo de abril, quedamos en tu casa en agosto para meternos una buena cena, y hablemos todos los días por teléfono, por el Messenger, o por donde te de la gana, pero basta ya de asquerosa hipocresía. Y esa es la palabra que define toda esta farsa: "hipocresía". Hazte el bueno, hazte el feliz aunque no lo estés, hazte el amigo de todos, comprate unos langostinos, sonrie a todo el mundo, empachate de espárragos y cordero hasta las 4 de la mañana, preguntale a ese que tienes al lado que casi ni sabes su nombre que tal le va todo. Pero cuando llegue el 7 de enero, echa la vista atrás, y piensa en las gilipolleces que has hecho. Tú, y todos, a ver si algún día acabamos con este invento. ¡Feliz Falsedad a todos! |
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