Si estás rodeado de agua... nada mejor que mirar a las estrellas. Creo que mi primer contacto con la saga Odisea Espacial fue hace un porrón y medio de años, en una de esas noches tontas de lunes en las que José Luis Garci estaba en la tele con ¡Qué grande es el cine! con sus amigos en una mesa de debate, en la que discutirían sobre 2001, una película de Kubrick que era una obra maestra del cine. La verdad es que ese primer contacto no es que me llamase demasiado la atención, recuerdo que me la tragué enterita y que hubo partes que eran tremendamente pesadas. Hoy en día, con la perspectiva de los años, reconozco que es una película que gana con los revisionados. Está lejos de ser perfecta (tiene secuencias que únicamente tienen sentido porque Kubrick es así, aterrizajes de dos minutos y medio con la cámara fija que aportan poco o nada a la película), pero en muchos aspectos es una lección de cine, de fotografía y de cómo afrontar una fantasía dentro de un entorno coherentemente realista. Aunque, sin quitarle el mérito a Kubrick, creo que una forma de valorar mejor su trasfondo es la lectura de los libros de la saga Odisea Espacial, creados por Arthur C. Clarke a lo largo de su vida, que dan un enfoque integral a todo lo que no se cuenta en la película. Mucho ojo, que se desvela la trama de los libros. 2001, una odisea espacial, el libro, fue publicado en 1968. Versa sobre los mismos temas de la película, aunque en ciertos puntos hay diferencias notables. El libro comienza narrando el nacimiento del hombre como ser inteligente debido a la acción del monolito negro. Lo que en un primer momento es una manada de primates, pronto se convierte en campo de pruebas para el monolito en su afán por la creación de vida inteligente. En este sentido, toma un rol bastante más activo y experimentador que en la película, tomando el control de los primates para comprobar que son aptos para pasar al siguiente nivel evolutivo. Saltando unos cuantos años hasta el futuro, la época del descubrimiento de la TMA 1, una misteriosa anomalía magnética en la luna, en el crater de Tycho. El doctor Heywood Floid, un notable de la ciencia espacial, viaja desde la Tierra hasta la base Clavius, en la luna, para investigar el fenómeno. Ahí descubren un monolito (gemelo del visto anteriormente en la Tiera, aunque es desconocido para el hombre) tras excavar en los alrededores de dicha anomalía. Cuando el equipo de científicos se dispone a inspeccionarlo, los primeros rayos del sol inciden sobre él. El monolito interpreta que la civilización ha llegado a un nivel de desarrollo tal que lo ha descubierto, así que envía un potente mensaje hacia la órbita de Saturno. El hombre, sin embargo, no se queda parado. Se envía a la nave Discovery hacia Saturno con una tripulación que todavía no sabe cuál es su misión. Dos de sus miembros, David Bowman y Frank Poole, permanecen despiertos mientras que el resto de la tripulación científica se encuentra en estado de hibernación. Les acompaña también la IA de la nave, HAL 9000, que coordina todas las tareas de la nave. Sin embargo, en el tránsito de Júpiter llegan los problemas. HAL interpreta que ciertas piezas de la nave han de ser sustituidas porque su fallo es inminente. La tripulación las cambia, pero se percata de que la pieza estaba en perfecto estado. Consultándolo con el mando de la Tierra, concluyen que es un fallo de HAL... aunque será el primero de otros. El ordenador entra en conflicto consigo mismo e inicia el asesinato de todos los miembros de la tripulación. Poole fallece en primer lugar, expulsado hacia el vacío espacial en un viaje fuera de la nave. Los miembros hibernados también fallecen, y únicamente queda vivo Bowman, que logra, no sin mucho esfuerzo, desconectar a HAL. Tras normalizar la situación, se pone en contacto con el mando de la Tierra y se decide continuar la misión sin la IA activada. Prosigue su marcha y pronto llega a las lunas de Saturno, en donde comprobará que en una de ellas, Jápeto, se encuentra un monolito como el de la Luna, aunque bastante más grande, como si fuese un edificio solitario en un polo de la luna de Saturno. Bowman se adentra en él, justo por su parte superior. Lo último que se oye desde la Tierra es su voz gritando el famoso ¡Oh, Dios mío... está lleno de estrellas! La parte final del libro narra el viaje de Bowman en el interior del monolito, realmente un agujero de gusano hasta otro lugar del universo en el que el humano trascenderá su propia naturaleza física y se convertirá en un ser de energía, el próximo paso evolutivo, que hará de enlace entre la humanidad y su destino en libros posteriores. 2010, Odisea dos es una secuela que narra el rescate de la Discovery en 2010 por parte de un equipo mixto de americanos y rusos, que tratan de conseguir sus secretos antes de que una astronave china se les adelante. Además, intentarán tomar contacto con el monolito, del que no se sabe nada excepto las últimas palabras de Bowman. Es una secuela atípica, en el sentido de que no sigue de forma precisa los acontecimientos del libro, sino que se basa en la versión cinematográfica en los puntos discordantes. Por ejemplo, aquí el monolito no está en una luna de Saturno, sino orbitando alrededor de Júpiter. Finalmente, rusos y americanos logran abordar la Discovery antes que los chinos, logrando su reactivación y resucitando a HAL. Finalmente descubren que el motivo de su mal funcionamiento fue la existencia de un conflicto en las órdenes que se le habían dado, que le hicieron pensar que, con el objetivo de llevar a buen puerto su misión, debía acabar con la tripulación. Misteriosamente, Heywood Floyd, que participa en este libro en la misión como parte de la tripulación, recibe un aviso de un misterioso ente, invitándoles a salir de la órbita de Júpiter de inmediato, ya que algo maravilloso va a suceder y deben estar lejos de ahí. Tras varias dudas, diseñan un plan de escape de la órbita joviana en el que sacrificarán todo el combustible de la Discovery como lanzadera. Ese evento maravilloso es la destrucción de Júpiter por parte del monolito, haciéndolo implosionar y creando una pequeña estrella con la que calentar la incipiente vida del satélite Europa. Con la creación de Lucifer, la estrella que nace del antiguo Júpiter, Bowman, ayudado por HAL, lanza un mensaje a la Tierra: disfrutad de todos los mundos, excepto de Europa. El tercer libro, 2061, Odisea Tres narra el accidente de la nave Galaxy en el planeta Europa, y su posterior rescate. En mi opinión es el peor libro de la saga, más pesado que los anteriores y describiendo eventos con poca trascendencia en el arco principal de la saga. Por último, 3001, Odisea Final narra la experiencia de Frank Poole, rescatado en la órbita de Plutón y revivido, en el capítulo final de la saga. La primera parte del libro versa sobre cómo una persona del siglo XX asume todos los avances de un milenio, un hecho a priori traumático, pero que finalmente se desarrolla de modo satisfactorio. La segunda parte del libro habla sobre la vida en Ganímedes, otro satélite de Lucifer, la luna más cercana a Europa, asentamiento humano desde el que se contempla lo que pasa en el satélite prohibido. Tras estos mil años, Poole contacta con la conciencia reunificada de Bowman y HAL, que se hicieron uno tras el nacimiento de Lucifer. Halman, así llamado, alerta de que el monolito está especialmente activo en estos momentos, lo que alerta a la civilización humana. Tras reunirse un comité de científicos, deciden atacar al monolito ante la amenaza de la destrucción de la civilización. Así, diseñan un virus informático que Halman introducirá en el monolito para destruirlo. Justo tras iniciarse el ataque del monolito a la Tierra y Ganímedes, creando un disco que impide que la luz solar llegue al planeta, el virus informático comienza a actuar, destruyendo a los monolitos y dejando que la civilización humana viva hasta que se acaben sus días. Los cuatro libros son una buena muestra del estilo de Clarke, ciencia ficción dura (es decir, fantasía pero dentro de los límites físicos razonablemente creíbles), muy amenos de leer (excepto el tercero, más pesado y con menos chicha) y que recomiendo especialmente si os gusta este tipo de literatura. Para acabar, una fotito. 1 comentarios :: Enlace permanente
Comentarios: (del primero al último) 11:16 06/01/2012
Dada la relación amor-odio que mantengo con la película de Kubrick, dudo que me dignase a leer estos libros, la verdad :$ Participa con tu Comentario:
No puedes poner comentarios. Necesitas estar registrado en Vandal Online. Regístrate aquí o Haz Login. |
Blogs en Vandal · Contacto · Denunciar Contenido