Que no os engañe el titular ni la imagen, no voy a hablaros de cine... esta entrada solamente es un recordatorio de que a partir de hoy soy un año más viejo. Me gustaría escribir algo profundo y que invite a la reflexión, pero la inspiración no viene cuando uno quiere, así que sólo puedo decir que hoy, 28 años después de haber nacido, sigo siendo el mismo de siempre, y con la intención de continuar así.

En fin, gracias por aguantarme un año más ^^

Todos los años elaboro una lista de propósitos de Año Nuevo (que rara vez suelo cumplir, pero me esfuerzo en intentarlo) con el fin de corregirme todo lo posible como persona, y de cara al 2013 he pensado hacer un apartado especial correspondiente a todas aquellas cosas relacionadas con los videojuegos que quiero cambiar con el fin de disfrutar aún más de mi afición favorita. Aquí están:

1) No comprar nada que no vaya a jugar de inmediato:

Que sí, que hay veces que ves gangas a las que no te puedes resistir, pero desde hace un tiempo mi objetivo principal es terminar de jugar todo lo que tengo y no quiero llenar la estantería de juegos pendientes con los grandes progresos que he hecho en este aspecto.

2) Jugar en cada momento a lo que me pida el cuerpo:

Incluso aunque implique dejar aparcado un juego que tenga a medias una temporadilla. Llevo meses posponiendo rejugadas que me apetecen muchísimo por aquello de "Primero tengo que acabar lo que tengo empezado" y no puede ser... de hecho tengo planeado empezar el año rejugándome Kid Icarus: Uprising y Kirby's Adventure Wii, entre otros.

3) Llevar menos juegos al mismo tiempo:

Básicamente pienso mantener abiertos tres frentes: sobremesa, portátiles y juegos con amigos. La idea es no jugar a más de una cosa (las partidas rápidas u ocasionales a otros títulos no cuentan) y centrarme en disfrutar al máximo lo que tenga entre manos en esos momentos.

4) Mirar más hacia el pasado que hacia el futuro:

Sigo notando una alarmante ausencia de juegos que me interesen de verdad en el horizonte mientras que no paro de descubrir clásicos de calidad apabullante que me hacen pensar por qué demonios no los había jugado todavía, así que seguiré jugando todos esos títulos que ya tenía que haber jugado y solamente prestaré atención a los últimos lanzamientos cuando se trate de algo que de verdad llame mi atención.

5) Acabarme Vagrant Story:

De este año no pasa que dé carpetazo al que posiblemente sea el RPG más coñazo y pesado que he jugado en mi vida. Aunque tenga que tirar de guías o me lleve cien horas pienso acabármelo y mandarlo a freir espárragos de una patada mientras le dedico un corte de manga. Todo sea por poder hablarle a las generaciones futuras de cómo sobreviví a una experiencia tan soporífera y anodina.

Lo primero es lo primero:



¡FELIZ FIN DE AÑO A TODOS LOS MANITOS VANDÁLICOS! ;D

2011 pronto será un recuerdo y 2012 pasará a ser una realidad. Esperemos que éste sea un año lo mejor posible y todo salga a pedir de boca: estudios, trabajo, amistades... el día a día en general, vamos. Sea como sea, aseguráos de afrontar el futuro con una sonrisa y una actitud lo más positiva posible ^^

PD: En cuanto al regalo:

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Estaba yo hoy desayunando tranquilamente cuando oí el timbre. "A estas horas, sólo puede ser el cartero", pensé. Efectivamente, se trataba de la mujer cartero ("cartera" sigue sonándome raro...), pero esta vez no buscaba que le abriese la puerta sin más (debo ser el único que les abre, porque siempre me pican a mí), sino que traía un envío para mí. Ahí ya me picó la curiosidad.

Tras firmarle un autógrafo a la mujer cartero, observé el paquete con cuidado y lo manoseé un poco. "Por el peso, la forma y la dureza, sólo puede ser un cómic o un manga", pensé. Pero esta vez me equivocaba... en cualquier caso, antes de abrirlo miré a ver quién era el remitente:

"Ignacio San Vicente"



Esa fue mi cara durante cinco segundos que me parecieron eternos. De repente se hizo la luz y recordé que Ignacio es el equivalente de Iñaki, lo que unido al hecho de que conozco a pocos Iñakis que residan en Madrid me hizo atar cabos hasta dar con la persona en cuestión... se trataba, ni más ni menos, de... *redoble de tambor*

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Ahora que sabía quién me había mandado este envío, mi intriga crecía por momentos y TENÍA que abrir el sobre cuanto antes, pero para no estropear la sorpresa fui haciéndolo a trozos, para que la emoción me durase más ^^

Primero vislumbré un envoltorio navideño, luego un misterioso símbolo:



"El caso es que ya he visto este símbolo en algún lado, pero... ¿dónde?", pensé. Aún más confuso y nervioso, proseguí con la apertura del envoltorio, y lo que vieron mis ojos al terminar esta labor quedará grabado en mi mente para siempre:

Secreto: (Pincha para leerlo)

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