Bien, continuando con la tradición (y reciclando el mismo texto introductorio de todos los años), he ido apuntando los títulos que he ido jugando  a lo largo de estos doce meses con la intención de hacer un repaso de los mismos y comentarlos un poco por encima. También valoraré cada uno de ellos en base al siguiente sistema de puntuación:

- MALO (una experiencia del todo olvidable)
- REGULAR (entretenido sin más, tampoco te pierdes gran cosa)
- BUENO (curiosete y con alguna característica interesante)
- MUY BUENO (reservado para títulos de gran calidad e inventiva)
- EXCELENTE (palabras mayores, juegos que no te puedes perder por nada del mundo)

En fin, sin más dilación, he aquí lo que ha dado de sí para mí este 2013 en materia videojueguil. Los juegos están ordenados según el orden en que me los he ido pasando:

LIMBO (PC):

Un juego que llama muchísimo la atención por su original y siniestra estética que muestra todas sus cartas en la primera hora de juego para luego resultar una sucesión de situaciones ensayo-error (mucha muerte estúpida y sin previo aviso) que desemboca en el final más decepcionante que he visto en años. Olvidable a más no poder.

Broken Sword: La Leyenda de los Templarios (PC):

Una de las aventuras gráficas más clásicas de todos los tiempos a la que creo que se le ha dado más bombo del debido por haber sido de las primeras que se pudo disfrutar en consola y que sin duda sería la primera para muchos jugadores. Entretenida y disfrutable, pero nada del otro mundo a nivel jugable y argumental.

Ys Book I & II (TurboGrafx-16):

Mi primera incursión en la saga de moda en Vandal. Su jugabilidad directa y sus temazos musicales hicieron que no me fuera difícil engancharme, pero su sistema de colisiones es demasido impreciso (especialmente contra jefes) y en general lo veo demasiado genérico y falto de personalidad propia.

Haunted Castle (Arcade):

Quizás el peor Castlevania que me he echado a la cara, principalmente por sus horrendos controles y el absurdo tamaño del protagonista y los enemigos en relación al del escenario. Aún así, algunas fases tienen momentos chulos y la banda sonora es tan cañera como siempre... un remake le vendría bien.

Ghost Trick (DS):

Una aventura que sabe equilibrar a la perfección narrativa y jugabilidad, dando como resultado una de las experiencias más originales que se pueden disfrutar en consola alguna. Tanto su sistema de posesión de objetos como su plantel de inolvidables personajes hacen de Ghost Trick un juego para el recuerdo.

Castlevania: Mirror of Fate (3DS):

Excelente giro de tuerca de la mecánica presentada en Lords of Shadow, cambiando el desarrollo 3D por uno 2D en el que los combates son algo menos frecuentes y el plataformeo cobra algo más de importancia. Errores técnicos aparte (esa tasa de fps...), considero que supera ampliamente al primer juego como experiencia.

The Longest Journey (PC):

La decepción del año en lo que a aventuras gráficas se refiere. Llevaba años escuchando maravillas de este juego y me encontré con un juego de interactividad limitadísima en el que haces poco más que aguantar interminables conversaciones mientras tratas de seguir un argumento que va dando tumbos de un lado a otro y que se centra tanto en parecer especial que acaba olvidando que ante todo ha de ser interesante. Dormidina en estado puro.

Pokémon Snap (N64):

Llevaba años queriendo jugarlo y lo que me encontré no me decepcionó. Una original aventura sobre raíles llena de curiosidades y secretillos que la hacen muy disfrutable pese a su escasa duración. Un spin-off muy curioso del que no me importaría ver una secuela.

Journey to Silius (NES):

Clásico juego de acción al que decidí darle una oportunidad tras una intensiva campaña de promoción por parte del mano Ustars. Divertido, con buena banda sonora y bastante puñetero conforme se acerca el final. No está mal, aunque tampoco me enamoró que digamos.

Paper Mario: Sticker Star (3DS):

Un juego odiado por mucha gente debido a los cambios que propone a nivel jugable y que a mí, sin embargo, me ha encantado. Es verdad que el nuevo sistema de pegatinas no da tanto juego como el de anteriores entregas, pero qué demonios, al menos es original y tiene la mejor banda sonora de la saga.

Simon the Sorcerer (PC):

Descarada imitación de Monkey Island (cambia temática piratesca por magos y fábulas) que al menos cuenta con buena música y un considerable sentido del humor. Falla sobre todo en cuanto a personajes, pues de la mayoría te olvidarás en cuanto veas desfilar los créditos.

The Beast Within: A Gabriel Knight Mystery (PC):

Una vez superado el trauma inicial de que todo el desarrollo esté compuesto a base de vídeos de imagen real y fotografías (que acaba teniendo más gracia de la que parece, pues es como ver una serie) y el menor grado de interacción con el escenario uno no puede sino maravillarse ante su trabajado guión, que toca temas sobrenaturales de forma muy acertada y además los sitúa dentro de un marco histórico perfectamente estudiado que hace que todo resulte mucho más creíble.

Duck Tales 2 (NES):

Una secuela que merece más fama de la que tiene, pues salvo por la banda sonora (de calidad pero mucho menos memorable que la de su antecesor) supera con creces en todos los aspectos al original. Lo he disfrutado como un enano y planeo rejugarlo antes o después.

HarmoKnight (3DS):

Mi primera experiencia descargable en 3DS. Un juego musical que añade elementos plataformeros y un universo rebosante de simpatía, espero que su más que cantada secuela traiga consigo una banda sonora más extensa y mayor variedad de niveles, porque la fórmula base es sensacional.

Bomberman 64 (N64):

Siempre había querido jugar un Bomberman en 3D y la verdad es que lo esperaba más divertido... su desarrollo es tremendamente lento y sólo tiene algo de chispa en las fases más complejas y los combates contra jefes. Algún día espero poder jugar su secuela, pero tampoco espero mucho de ella.

Mystical Ninja 2: Starring Goemon (N64):

¿Dónde había estado esta saga toda mi vida? Personajes terriblemente carismáticos, surrealismo y humor por doquier, música cañera y plataformeo la mar de dinámico... de lo mejor que he jugado en Nintendo 64.

Fire Emblem:Awakening (3DS):

Tuve mis serias dudas con este nuevo Fire Emblem, pero al final logró conquistarme con su nuevo cambio de estética, su abrumadora cantidad de contenido, las mejoras a nivel jugable y el cambio de tono en la narrativa... sólo le echaría en cara el bajón que da la trama en la segunda mitad del juego y la poca variedad de objetivos en las misiones.

Broken Sword 2: Las Fuerzas del Mal (PC):

Bastante mejor que la primera entrega (al menos aquí la trama arranca desde el primer minuto), pero sigue arrastrando parte de los errores más importantes de esta y no aporta nada especial al género.

Simon the Sorcerer 2: The Lion, the Wizard and the Wardrobe (PC):

Una más que digna secuela del original, aunque el cambio de tono de su sentido del humor (mucho más vulgar y soez) puede no agradar a todo el mundo y en general presenta bastantes más puzles de resolución absurda que el primero. Una buena aventura gráfica, en todo caso.

Theathrythm Final Fantasy (3DS):

Sensacional juego musical que recoge los momentos más importantes de la historia de Final Fantasy y los convierte en un cuchillo que apuñala tu corazón constantemente. Imprescindible para cualquier fan de la saga que se precie y es que revivir tiempos mejores mediante la música no tiene precio... además, su sistema de desbloqueables incita a seguir jugando sin parar durante horas.

Full Throttle (PC):

Una de las últimas grandes aventuras gráficas de LucasArts, con una puesta en escena de lujo y una temática original a rabiar. Su mayor pega es que se acaba justo cuando empieza a ponerse interesante, pero pese a todo es de esos juegos destinados a ser recordados con cariño.

Indiana Jones and the Fate of Atlantis (PC):

Muy posiblemente la aventura gráfica definitiva. No es nada fácil ofrecer un sentido del humor capaz de rivalizar con el de la saga Monkey Island y una total sensación de aventura y emoción en la que el peligro, los rompecabezas y la acción están a la orden del día... ¡y con tres rutas diferentes!

9 Hours 9 Doors 9 Persons (DS):

Una apasionante Visual Novel que brilla con luz propia gracias a su excelente narrativa, su capacidad de inmersión y unos personajes con mucha chicha. Lástima que a nivel de puzles no esté tan inspirado y sea necesario superar la aventura varias veces para acceder al final verdadero, pues afecta bastante al disfrute de tan interesante argumento.

Prisoner of Ice (PC):

Lo ridículo de su argumento y su doblaje hacen imposible tomarse en serio una aventura gráfica que tampoco es que vaya a pasar a la historia por sus puzles o su mecánica.

Luigi's Mansion 2 (3DS):

Una de las grandes sorpresa de este año que nos deja. Lejos de ser un más de lo mismo con respecto a la entrega de GC, esta secuela lleva todo lo visto en el juego original a un nuevo nivel y presenta un sinfín de situaciones la mar de ingeniosas que dan lugar a una aventura que no cesa de sorprender en todo momento y a la que hay que añadirle un interesantísimo modo multijugador.

LOOM (PC):

Uno de esos juegos que HAY QUE JUGAR. Un increíble despliegue de imaginación y buen gusto en la que posiblemente sea la aventura gráfica más original jamás creada. Su mágico universo y la banda sonora de Tchaikovski ponen el resto.

Half- Life (PC):

Tras muchos años diciendo "Ya lo jugaré, ya lo jugaré..." finalmente lo hice y debo decir que me arrepiento de no haberlo hecho antes. De esos juegos que demuestra que un juego en primera persona no tiene que limitarse a la acción descerebrada... su único fallo es que en el último tramo de la aventura eso mismo es lo que predomina. Juegazo atemporal, en cualquier caso.

Half-Life 2 (PC):

Grandísimo juego que potencia enormemente la importancia del argumento, haciendo que el desarrollo sea más interesante y regale algunos momentos inolvidables. La pega es que todo esto viene a costa de una jugabilidad más simplificada, con menos puzles y plataformeo y más tiroteos... pero bueno, es innegable que marcó un antes y un después en la forma de plantear los videojuegos y sus físicas siguen siendo increíbles a día de hoy.

La Fuga de Monkey Island (PC):

Sin ser mal juego, es de lejos la entrega menos memorable de la saga Monkey Island, tanto a nivel de guión (humor mejorable y secundarios olvidables) como de puzles, mucho más absurdos por lo general. Prescindible.

Mario & Luigi: Dream Team Bros. (3DS):

Pese a pulir del todo el sistema de combate y habilidades y contar con un apartado audiovisual excelente, es imposible negar que la fórmula jugable ya está demasiado quemada y no consigue sorprender, lo que unido a unos niveles exageradamente largos y repetitivos y una trama poco sólida se traduce en bostezos frecuentes, algo inadmisible en esta saga.

Another World (PC):

Increíble aventura que no sé cómo he tardado tanto en jugar y el equivalente retro a cosas como ICO. Pese a su brevedad y los problemas que da su peculiar sistema de escudos resulta increíblemente absorbente y su desarrollo es un no parar de situaciones originales e inesperadas. Clásico atemporal.

Deus Ex: Invisible War (PC):

No es mal juego, pero frivoliza y simplifica de tal manera todo lo visto en el original que es difícil no odiarlo. Su único aporte positivo es la posibilidad de aliarte con diversas facciones, lo que influye considerablemente en la forma de afrontar el desarrollo.

FEZ (PC):

Encontrarse un juego como FEZ en los tiempos que corren es la mayor alegría que se le puede dar a un jugón de la vieja escuela. Desde su encantador apartado gráfico hasta lo original de su mecánica y pasando por su ingente cantidad de secretos y la forma en la que te anima a encontrarlos, este juego se destapa como uno de los juegos indie más a tener en cuenta.

Indiana Jones y la Última Cruzada (PC):

Puede que no sea tan redondo como Fate of Atlantis, pero no hay que olvidar que fue el que sentó las bases jugables de éste y además cuenta con un desarrollo muy variado y muy fiel a la película en la que se basa.

Machinarium (PC):

Preciosa aventura gráfica con un apartado audiovisual de lujo pero que ofrece unos puzles que no terminan de llenar del todo y cuya trama tampoco resulta demasiado interesante.

Mirror's Edge (PC):

Una experiencia destinada a aturdir los sentidos mediante la estética, la música y los subidones de adrenalina... y sobra decir que lo consigue. Lo disfruté mucho pero no me invita lo más mínimo a rejugarlo.

Mystical Ninja: Starring Goemon (N64):

Aventurilla 3D primeriza con todo el encanto de los juegos de la época y un sentido del humor descacharrante. Quizás no tan bueno como su secuela pero un título muy interesante igualmente.

Space Quest V: The Next Mutation (PC):

Mi segunda incursión en esta delirante saga de aventuras gráficas de Sierra, que pule muchos de los problemas de la cuarta entrega y sigue conservando gran parte de su peculiar sentido del humor y al mismo tiempo añade cierto toque aventurero. Roger Wilco es todo un personaje.

The Dig (PC):

Una aventura gráfica con tintes de superproducción hollywoodiense la mar de intrigante e inmersiva, aunque con menos interacción de la que habría deseado y un final demasiado... feliz.

Dear Esther (PC):

No es que sea un juego realmente (yo lo llamo simulador de senderismo traumático), pero es una experiencia lo suficientemente curiosa como para  merecer una mención. Una historia muy curiosa y unos hermosos paisajes que te atrapan por completo.

The Black Mirror (PC):

Una (otra) aventura gráfica con una atmósfera tremenda que por desgracia termina resultando demasiado predecible a nivel argumental y que jugablemente tampoco es nada del otro mundo. Pequeña decepción personal, aunque no es mal juego.

The Colonel's Bequest (PC):

El ejemplo perfecto de que los medios no son nada frente a la imaginación y el buen hacer. La cantidad de posibilidades que ofrece esta vieja aventura gráfica hace que me reafirme en que la industria está perdiendo el rumbo. Ha envejecido mal en algunos aspectos, pero me parece toda una lección de diseño de videojuegos.

The Last of Us (PS3):

Lo que en principio parecía ser un "Uncharted con zombis" terminó por ser una propuesta bastante interesante y más sesuda que las del amigo Drake, pero por desgracia también mucho más aburrida y es que pese a la espectacularidad de sus escenas todo el juego es una repetición constante de patrones sin apenas evolución. En mi opinión, el juego más hypeado en exceso de todo este año.

The Last Express (PC):

Otra de mis decepciones de este año. Llevaba mucho tiempo escuchando maravillas de esta aventura gráfica y lo cierto es que salvo por el interés del contexto histórico y lo original de su mecánica me encontré con un título confuso, mal estructurado y con un argumento totalmente echado a perder en los últimos compases de la aventura.

Castlevania: Legacy of Darkness (N64):

Desde ya mi Castlevania 3D favorito. Cierto que tiene detalles muy pobres, pero en general creo que capta a la perfección la esencia de los clásicos y sabe trasladarlos muy bien a la tercera dimensión. Castlevania 64 (que no deja de ser una versión sin terminar de lo que es este juego) ya me había dejado buen sabor de boca, pero éste me gustó aún más, pese a no tener tantas novedades como esperaba.

The Granstream Saga (PSX):

¡Llevaba AÑOS queriendo jugarlo! No es que sea uno de los grandes títulos de la consola ni mucho menos, pero tiene todo el encanto de las aventurillas de Quintet y su sistema de juego es bastante divertido. Con un poco más de ambición podría haber salido algo mucho más grande, pero pese a todo disfruté mucho de la experiencia.

Castlevania: Order of Ecclesia (DS):

El único "Castletroid" que me quedaba por jugar y quizás el que más me ha gustado desde Aria of Sorrow. No me parece tan innovador como se suele decir por los foros, pero su calidad está fuera de dudas y ofrece horas y horas de diversión. Personalmente, creo que la mecánica está quemadísima y deberían apostar por otra fórmula de ahora en adelante.

Donkey Kong Country Returns (Wii):

Regalazo que se marcó el mano Kamek Koopa para asegurarse de que lo jugaba de una vez. Ciertamente, tras habérmelo pasado y flipado con su calidad me pregunto por qué tardé tanto en hacerlo y su secuela se encuentra entre mis títulos más esperados. Lejos de ser un intento de copiar a las entregas de SNES (sigo diciendo que no debería llamarse Donkey Kong Country) le da su propio toque personal y crea una mecánica tan dinámica y genial que bien merece ser considerado "el Mario Galaxy de los plataformas 2D".

Zak McKraken and the Alien Mindbenders (PC):

Probablemente la peor aventura gráfica de LucasArts, que empieza francamente bien (presenta ideas chulas como el viaje entre diferentes países) y termina volviéndose algo sumamente absurdo y sin demasiada gracia. Intentar repetir la mecánica de alternar entre tres personajes al más puro estilo Maniac Mansion es el mayor de sus errores.

Castlevania Chronicles (PSX):

Siguiendo con mi objetivo de jugar a todos los juegos de la saga Castlevania (apenas me quedan un par) y aprovechando que pude hacerme con él en formato físico, le tocó el turno a una de las entregas que más curiosidad me producía. No deja de ser la enésima reinterpretación del Castlevania original, pero el resultado es glorioso y cada vez me cuesta más poner a un Castlevania 2D por encima del resto.

Sam & Max Hit the Road (PC):

De los últimos tropiezos de LucasArts. Un juego que impresiona por su cuidada puesta en escena pero patina seriamente a nivel jugable y argumental, ofreciendo mucho puzle absurdo y personajes secundarios bastante olvidables en medio de una trama sin sentido ni gracia. Me esperaba mucho más de este dúo, dada su popularidad.

Hybrid Heaven (N64):

Otra leyenda urbana en forma de juego... durante mucho tiempo pensaba que se trataba de todo un juego de culto, de esos que poca gente ha jugado pero que encierran una calidad enorme en su interior... pues bien, ya os digo que no es así ni mucho menos. La propuesta jugable es ciertamente original y la premisa del argumento no es mala, pero al final lo único rescatable del juego es su divertido sistema de combate (no me hagáis hablar de los tramos de acción) y un par de temas musicales aislados (la banda sonora es bastante monótona en general), lo demás resulta absolutamente olvidable.

Ace Attorney 5: Dual Destinies (3DS):

Sensacional puesta al día de Phoenix Wright y los suyos (increíble el trabajo realizado a nivel audiovisual), con todo el encanto de siempre y una nueva trama rebosante de emoción y un elenco de personajes inolvidables. Las condiciones de distribución en nuestro país han sido vergonzosas, pero que eso no impida a ningún fan echarle un ojo, porque se ha colado sin problemas entre las mejores entregas de la saga.

The Legend of Zelda: A Link Between Worlds (3DS):

Espectacular retorno de Link a la vertiente bidimensional de la saga que podría haberse convertido en un nuevo clásico de haber apostado por un universo totalmente nuevo en lugar de aferrarse tanto a la entrega de SNES en una propuesta que pretende ser secuela y roza el concepto de remake. Esperemos que sea el primero de muchos pasos de vuelta al camino del que la saga nunca debió desviarse.





En fin, esto es lo que ha dado de sí este año que nos deja en materia de primeras partidas, que sumadas a las diversas rejugadas sumarían en torno a los 80 títulos jugados a lo largo de 2013. Considero que ha sido un año muy provechoso, especialmente gracias a 3DS, consola que está haciendo auténticos méritos para convertirse en una de mis favoritas y que a buen seguro tiene mucho que ofrecerme todavía.

También noto que cada vez tiro más hacia lo retro y son menos las novedades que de verdad me llaman la atención, detalle que me preocupa pero que por otro lado tampoco está mal, pues siempre he odiado la sensación de no poder seguirle el ritmo a la industria. De hecho, todavía no sé a ciencia cierta si en 2014 entrará alguna consola nueva en casa... la que más papeletas tiene es WiiU y aún estoy esperando una rebaja o título revelación que me haga ir corriendo a la tienda a por ella.

En cuanto al futuro... ayer me rejugué Tail Concerto y empecé partida nueva a Solatorobo, que espero terminar antes de que llegue 2014, año que estrenaré revisitando el grandioso Kid Icarus: Uprising. Y bueno, también tendré que ir pensando en ponerme al día con las Jimmyfichas, que empiezan a amontonarse peligrosamente.