Mis Endings Favoritos (Volumen 10)

Final Fantasy IX:

Final con todas las escenas:











La FMV final y los créditos solamente:



Sobre el ending:

Ayer me acabé el juego por ¿sexta? vez tras un par de meses dándole caña a diario en mi PSP, y ahora que me acaba de venir a la cabeza que hace mucho que no actualizo esta sección del blog, creo que es el mejor momento para hacer una reseña al inolvidable desenlace de esta joyaza.

Francamente, no sabría por dónde empezar a elogiarlo, pero comenzaré diciendo que me parece el mejor final de la saga con diferencia, y eso que los tiene muy buenos. Ningún RPG me ha hecho conectar tanto con sus personajes como lo hice con este en su momento, y el final está tan centrado en todos ellos que para el jugador se convierte en una despedida muy personal. Es como una última reunión antes del adiós definitivo.

Tras la épica batalla final se suceden unas escenas llenas de acción (que siguen siendo impresionantes a día de hoy) y una pequeña conversación que deja entrever el lado más humano de los dos interlocutores y termina de una forma bastante mosqueante.

Luego da comienzo el emotivo monólogo de Vivi (momento en el cual mis lacrimales empiezan a funcionar a toda pastilla) y sus reflexiones sobre lo que significa estar vivo, aderezado con diversas escenas para el recuerdo en las que vemos lo que ocurre con todos y cada uno de los personajes tras finalizar su odisea, algo que me encanta en juegos de este tipo.

Finalmente el juego se decide a cerrar el telón de la misma manera que lo alzó, con la obra "Quiero ser tu Canario", la cual termina con una gran sorpresa y una feliz escena que no podía faltar en un cuento como es FFIX.

Después el juego te invita a recordar algunos de los mejores momentos de la aventura mientras te deleitas con Melodies of Life, el (de nuevo, para mí) mejor tema vocal de la saga. Es entonces cuando sientes una extraña mezcla de alegría y tristeza al saber que la historia ha llegado a su fin, y solamente te queda contemplar con nostalgia las palabras "The End" con el mítico Prelude sonando de fondo... o echarte una partidita de Black Jack, claro.

Lo dicho, una de las cosas más mágicas que se pueden experimentar en consola alguna. Quien no haya jugado a este juego no sabe todo lo que se está perdiendo, y creedme, sería toda una pena.

Adiós, FFIX, volveremos a vernos en un par de años para rememorar estos grandes momentos.