Y para finalizar uno de los años más movidos en el tema Apple (Leopard, iPhone, nuevos iMac...) tocaba abordar el elemento iPod, y con una renovación en -casi- toda la gama de reproductores. Como no podía ser de otra manera, los pequeños de la manzana han tenido un evento íntegro para ellos.



¿Porqué en casi todos? Pues porque por mucho que nos diga Steve (supongo que me permitirá tutearle), el cambiar la gama cromática del shuffle no es una renovación del dispositivo. Ya se podrían haber estirado y haberle reducido el precio al benjamín de la familia. Pero no, se mantiene el mismo tamaño, mismas funcionalidades y los 79$-€ de siempre. De todos modos, estéticamente poco o nada podrían mejorar, aunque pensándolo bien, se le podría haber añadido una micro pantalla para quitarle el San Benito de poco funcional.

Seguidamente se presentaron los iPod nano de tercera generación y de nuevo los fakes no son tan fakes. Más ancho, menos alto e igual de profundo, este nuevo nano vuelve a mostrarnos el tacto a acero anodizado (o eso dicen, aunque realmente si dijeran que es de acero microaspirado me hubiera quedado igual) por el anverso, y un reverso en acero inoxidable al estilo del nano 1G. Para no ser menos, éstos también se muestran en los tonos pastel de los que hicieron gala los shuffle. Puede haber opiniones para todos los gustos, pero creo que la mayoría coincidirá en que hubieran lucido mejor con colores más intensos, sobre todo el rojo, que en esta ocasión queda de un tono rosaceo-granate poco atractivo a la vista. De hecho si el mencionado rojo hubiera tenido la tonalidad roja de verdad ése hubiera sido mi modelo elegido y no el verdoso. En lo que más ha evolucionado este modelo ha sido en la inclusión de una pantalla a 320x240 píxels de resolución y 2” de tamaño capaz de reproducir vídeo, mostrar Cover Flow a pantalla completa y posibilidad de poder ejecutar algunos juegos más. Realmente no creo que en esa mini-pantalla se puedan ver películas completas sin quedarte más ciego que Magoo, pero eso sí, para guardar los videoclips de turno y algún que otro capítulo de tu serie favorita para verlo mientras vas en el autobús o esperas a alguien tiene que ser un lujo. Como era previsible las capacidades se han doblado, eliminando en esta ocasión un tercer modelo de alta capacidad (y es que los 16GB son prohibitivos). 4 y 8GB a unos precios de 139 y 189€ respectivamente es la apuesta final de Apple para estos reproductores.

Los que realmente han dejado a cuadros al personal han sido los iPod classic, y es que todo el mundo se esperaba que pasaran de ser los de toda la vida a un iPhone solo musical con gran capacidad de almacenamiento. Craso error, aunque en lo que sí que han mejorado ha sido en eso último. 80 y 160GB de capacidad para los reproductores más famosos del mundo, manteniendo el mismo diseño que sus predecesores, es decir, pantalla a color superior, click wheel central, y básicamente las mismas funcionalidades del iPod 5.5G solo con el añadido del Cover Flow y un interfaz idéntico al nuevo nano. Incluso se parece a este último hasta en el diseño, con el famoso acero anodizado en el frontal, así que definitivamente decimos adiós al plástico, tanto en ordenadores como en dispositivos portátiles. 239 y 339€ son los precios establecidos para estos classic, aunque esto da que pensar... ¿alguien tiene más de 160GB de música en su ordenador? Para vídeos está bien, pero para música creo que ya hemos tocado techo (veremos en qué se quedan mis palabras el año que viene cuando presenten los classic de 320GB).

El bombazo del evento vino al presentar los nuevos iPod touch. Lo que todo el mundo quería, un iPhone sin teléfono. Pantalla táctil multipunto, toda la superficie táctil, mismo tamaño que el iPhone, Wi-Fi, Safari, YouTube, vídeos, fotos, música e iTunes Store sin hilos. Algo caro, eso sí, para unos cacharros con ‘solo’ 8 y 16GB de almacenamiento (añadirle un disco duro hubiera sido matar al artefacto antes de nacer). Los 289-389€ del gadget son demasiado, demasiado elevados para una persona que tan solo quiera un reproductor de música hi-tech. Veremos como van las ventas, sobre todo comparándolas con las del iPhone.

Y esa es otra, el iPhone baja de precio eliminando el modelo de 4GB y manteniéndose el de 8GB por ‘tan solo’ 399$. Doscientos napos más barato de la noche a la mañana (o mejor dicho, de un minuto a otro). Seguiré esperando una evolución significativa en ese terminal antes de finalmente adquirirlo, sobre todo hasta que añadan completamente compatibilidad UMTS y posibilidad de videoconferencia. Aparte de que ir por la calle con 400€ más contrato como que no me atrae demasiado.

Como dije líneas arriba, ya tengo pedido mi nano verdecito. Va a ser la primera vez que tenga un iPod, y ese será mi segundo aparato con manzana dibujada. Cuando llegue haré un completo -dentro de lo que cabe- análisis de él, tanto de capacidades como de diseño y autonomía. Espero no pelearme con iTunes más de lo que lo hice el año pasado...