Mi Review: Rhythm Paradise

Momento para un nuevo análisis para DS, juego que por el momento tiene el honor de ser de mis favoritos para DS....y así aprovecho el tirón de la salida de una nueva entrega en Wii...sólo para Japón... :trollface:



Pasa por más de 50 retos musicales donde el ritmo cobra un papel fundamental. Los creadores de Wario Ware te proponen minijuegos musicales algo más elaborados pero con la misma simpleza y absurdez visual que les caracteriza.

Gráficos

Siguen la estela de la saga Wario Ware, aunque no tiene ni la mitad de encanto que estos ya que los personajes pueden llegar a ser muy genéricos y simplistas en ocasiones, al igual que su diseño.



Gráficamente no es ningún portento, aunque tiene esa absurdez que tan popular hizo a la saga Wario Ware, chicos futbolistas espaciales, ranas bailarinas o monos animadores. Los entornos y demás suelen ser igual de simples, aunque muy vistosos y coloridos.



Los menús bastante apañados y muy "táctiles" y visuales.

Sonido

Siendo la parte fundamental del juego es vital que tenga un buen nivel, y así es. Sonoramente contamos con montones de melodías, unas más tarareables que otras, pero todas con su encanto y hasta con temas cantados y doblados al Castellano, una grata sorpresa que se agradece, aunque a algunos puede no hacerle mucha gracia el doblaje y sus voces.
Aunque se repiten algunas melodías, superaremos la treintena y normalmente tienen variaciones que hacen parecer nuevas. Además podremos desbloquear un jukebox para oir todas las melodías, un detalle que se agradece pero que deberás de esforzarte al máximo para conseguirlas todas. Las melodías de inicio y los créditos son geniales.

Los efectos, también muy importantes, sobresalientes. El juego se le saca mayor partido con los auriculares puestos.

Duración

El juego tiene una rejugabilidad tremenda y dependiendo de tu agudeza rítmica te durará más o menos, aunque podemos asegurar que te durará más de 10 horas fijo ya que algunas pruebas son realmente diabólicas y difíciles y tienes por delante como 50 retos y si no superas uno, no se desbloquea el siguiente.

Aunque si te quedas mucho tiempo atascado en una misma prueba te dan la opción de saltártela, donde realmente reside el gusto del juego es en obtener rango oro y más aún la ardua empresa de obtener rango perfecto, algo que requiere mucha dedicación y tiempo. Además desbloqueamos varias curiosidades por ello, además de una pruebas muy divertidas de guitarreo.

Jugabilidad y Diversión

Antes que nada, comentar que el juego como ya pasaba en aventuras como Hotel Dusk, se juega con las consola en posición vertical. Esta decisión para un juego musical que puede ser rara, acaba siendo todo un acierto pues en la pantalla táctil no habrá nada y sólo hará la función de recibir nuestras pulsaciones rítmicas con el stylus, mientras que la otra pantalla se nos muestra la acción de las alocadas pruebas.

La jugabilidad por otro lado no entraña mucho misterio, de hecho sólo contaremos con dos acciones en todo el juego para jugar y son: pulsar con el lápiz la pantalla táctil o mantenerlo pulsado y soltarlo formando una especie de V.

¿ya está?

Pues sí sólo eso, pero lejos de parecer un juego simplista, juega su principal baza con ello ya que con estos movimientos haremos pruebas de todo tipo y nuestra pericia se basará básicamente en seguir bien el ritmo y estar atentos a sonidos clave de fondo.

No es cuestión de destripar el juego, pues con sus más de 50 pruebas tendremos juego para rato, pero en general veremos cosas como participar en un coro de monos y animar a la cantante dependiendo de la letra de la canción, si repite 3 veces una palabra, deberemos de pulsar 4 veces siguiendo un timming la pantalla y si dice "ya lo sé" será 3 toques más el movimiento con forma de V que comentamos antes para que el mono salte.
En otra prueba deberemos de pulsar sin cesar la pantalla con un ritmo determinado y a la señal pasar al contraritmo o contratiempo de los bajos, algo que puedes no llegar a entender al principio pero poco a poco le vas pillando el truco, y es que el juego es bastante retante y difícil.

La cosa no queda ahí, hay pruebas de memorización donde X hace algo (ya sea cantar como los Moáis o aparecer figuras con un timming determinado como en guerra espacial) y nosotros debemos de copiarlo detrás y otras más moviditas como el monje tragón o las chispitas.

El juego encierra un gran encanto y humor, pero el sello touch generations puede hacerte pensar algo que no es, ya que el sello queda relegado para juegos sociales para todos los públicos. Pues bien, Rhythm Paradise no lo es, de hecho es de los juegos más difíciles y exigentes que hay para la DS o en general, conseguir oro o perfectos requiere mucha maña y dedicación.

Otro detalle es la estructura del juego, muy visual y con mucho encanto, se divide en bloques de puebas que vas desbloqueando poco a poco, si no superas una no desbloqueas la siguiente, aunque si eres muy torpe, en la cafetería tras varios intentos fallidos te dan la opción de saltartelo y pasar al siguiente. Se dividen en 5 cuadrados y cada columna de 5 tiene un remix, esto es un popurrí de las 4 pruebas anteriores en una nueva canción donde no sabrás lo que viene y sin poder practicar antes (otro gran detalle es que cada prueba tiene su tutorial inicial, algo que a veces es hasta obligatorio para entender la prueba).

Aun así no todo es oro lo que reluce y es que el juego tiene 2 partes, la primera es sublime, pero tras "pasártelo" se desbloquea la otra mitad y aunque se tratan de pruebas mucho más complicadas, no son más que segundas partes de anteriores fases con más dificultad, duración y/o nuevos movimientos. Esto le quita algo de frescura, aunque a veces los temas son totalmente nuevos, pero no deja de ser el mismo concepto y mecánica.

Los desbloqueables son muchos y la BSO merece muy mucho la pena, además tenemos juego hasta en los créditos (preciosos) y pruebas con la guitarra o juegos que fueron desechados y que te viciarán bastante.

En resumen, Rhythm Paradise es un diamante en bruto de los juegos musicales y un regalo, ya que el original de GBA no salió de Japón (como otro de los muchos errores de Nintendo en su afán de hermetizar juegos raros o muy japoneses, haciendole un feo a los usuarios de otros territorios) dándonos por fin la posibilidad de probar su adictiva y divertida mecánica con un juego sobresaliente y con una jugabilidad a prueba de bombas.
Si el juego te llama lo más mínimo no lo dudes, de lo mejor que hay para la Nintendo DS.

NOTA: 9.5