Mi Review: Super Mario 3D World.

Nueva Review para WiiU!!!



La princesa Peach ha sido raptada y...bueno, no, esta vez Nintendo prescinde da la típica premisa de un Mario para ponernos a jugar. Esta vez Bowser raptará a unas simpáticas hadas y Mario acompañado de Luigi, Peach y Toad viajarán a un nuevo mundo en el que hacer lo típico de un Mario, saltar, conseguir estrellas, llegar a la meta y vernos las caras con un jefe para ir liberando a cada princesa en cada uno de los 7 mundos que tiene el juego. Mitad Galaxy y mitad 3D Land, 3D World sigue siendo muy divertido, teniendo como principal novedad el multijugador a cuatro jugadores.

Gráficos

Bonitos, colorido, muy redondito todo, como un Mario acostumbra a ser ahora con las bondades del HD.
Algunos efectos lucen bastante bien, sobre todo algún que otro juego de luces, explosiones y reflejos. El diseño artístico también destaca bastante aunque no llega a sorprender pues se ayuda bastante de elementos ya visto en entregas como los Galaxy o 3D Land.



Tiene algún que otro defectillo en la iluminación donde a veces el sombreado aparece de repente o no es del todo realista. Además el juego deja al descubierto su punto flaco al momento de mostrar en pantalla una longitud de escenario mayor a lo acostumbrado (el juego se sustenta básicamente por escenarios cuadriculados y delimitados con un fondo) o demasiado recargado, donde el popping hace gala de aparición.



La cámara en el modo multijugador es algo molesta y llega a dar algún que otro disgusto, mostrando que aún tienen que depurarlo más. Además en general tenemos la sensación de no percibir la profundidad de los escenarios, donde en algunos momentos caeremos al vacío o cometeremos errores tontos por ello, como si necesitase efecto 3D.

Sonido

Una banda sonora exquisita llena de personalidad donde el Jazz predomina, pero hay temas de todo tipo, tranquilos hasta a otros más melancólicos. No es tan épica como los Galaxys, pero llega a enamorar.

Duración

En general es algo corto y fácil de completar. En unas 10 o 15 horas podremos llegar a ver el final si no nos paramos mucho a recolectar cosas. Por suerte tenemos que recoger estrellas verdes por cada escenario, además de un sello oculto. Al finalizarlo desbloqueamos un jugoso contenido extra mucho más desafiante y gratificante sin contar la posibilidad de pasártelo con hasta 5 personajes diferentes.

Jugabilidad y Diversión

La nueva aventura de Mario opta por seguir la fórmula de 3D Land para Nintendo 3DS, pero maximizándolo, añadiendo el multijugador y ciertas novedades con mayor o menor acierto.

El resultado es un Mario mucho más directo y tan divertido como siempre...pero también es menos épico, aventurero y en general menos sorprendente dando la sensación de jugar a un buen Mario, pero que no llega a llenar del todo, sobre todo por culpa de un comienzo algo frío, con fases excesivamente cortas para un título de sobremesa y que no llega a despegar su diseño de niveles hasta bien avanzada la aventura pese a tener el principios fases realmente inspiradas y hasta nostálgicas.



Lo primero que llama la atención en la primera toma de contacto es el control, Mario y compañía se mueven por 8 direcciones, acostumbrados al control analógico de anteriores título queda un poco raro, pero cuando avancemos nos daremos cuenta del por qué: las fases están dispuestas a modo de caja de juguetes, con un diseño cúbico y por alguna razón la percepción de los saltos, profundidad y la cámara a veces dan alguna que otra mala pasada por lo que al tener este tipo de control es más fácil moverse por escenarios de este tipo, pese a que ocurran este tipo de cosas en contadas ocasiones. No hay que confundir con que el control es malo, al contrario, responde a las mil maravillas, pero no nos libraremos de calcular mal un salto, caer al vacío o fallar al pisar a un enemigo por culpa de estos factores.



El desarrollo en bien típico, muy añejo. Podremos movernos por un mapa y pese que que tiene algún que otro secreto y detalle no es más que un selector de niveles encubierto más que otra cosa. Los niveles son muy cortos algo bueno y malo y nuestro objetivo es llegar al banderín de meta (sí, pese a ser un Mario de sobremesa no tendremos que buscar estrellas o soles para finalizar una fase) para finalizarlo.

Por el camino tendremos tres estrellas verdes que encontrar, al principio bien visibles, pero otras más avanzadas tocará tener el ojo avizor bien alerta para dar con ellas. Lo que si tiene más chicha son los sellos para usarlos posteriormente en mensajes por Miiverse, normalmente uno escondido por cada nivel, y suelen estar en sitios insospechados. El problema es que al ser un juego regido por en cronómetro no invita mucho a pararse por los escenario a buscar las estrellas y los sellos. A veces se nos acabará el tiempo y otras tendremos que repetir las fases varias veces para tener todos los coleccionables.

Una de las cosas más decepcionantes del juego es que abusa de fases algo inocuas, tales como vencer a un minijefe o grupo de enemigos como Magi Koopas, Hermanos martillo, etc. Repitiendo varias veces en un mismo mundo e incluso llegándonos a enfrentar a los mismos jefes en hasta cuatro o cinco ocasiones. No suponen mucho reto y además cuentan como fase (pese a dar una estrella verde y no tener sello).
Por otro lado tenemos dos tipos de retos: Las pruebas de Toad explorador y las casas de retos.
La primera es muy interesante, manejamos a un Toad explorador incapaz de saltar o hacer algo más que avanzar por un escenario cúbico donde deberemos de reunir 5 estrellas verdes para completarlo, lo divertido es como juega con las perspectivas y su amago de puzzle encubierto al tener que seguir a veces una ruta u orden concreto para llegar hasta cada una de ellas sin ser dañado por los enemigos o trampas. Lo malo es que estas fases son escasísimas y volvemos a echar en falta la percepción de profundidad del 3D, recordándonos constantemente que algo raro pasa con el juego.
La segunda es simplemente un recopilatorio de pruebas cortas  donde hacer algo en concreto para conseguir una estrella verde, una vez conseguida pasamos a la siguiente y así hasta finalizarla. La gracia es que el cronómetro está ajustadísimo y no sabemos que esperar ya que no nos dicen nada previamente así que tendremos que estar bien atentos si no queremos repetir desde el principio estos retos (algunos superan la veintena de estrellas).



Otra de sus novedades son los objetos donde brillan especialmente dos: el cascabel y la cereza.
La primera nos transforma en una versión felina del personaje, mucho más ágil y con ciertas habilidades gatunas como trepar por las paredes. Lamentablemente este ítem rompe el juego de una forma muy bestia, haciendo un paseo la aventura si no nos controlamos con su uso. Y es una pena pues tiene algún uso interesante integrada en ciertos tramos, mecánicas y obtención de sellos o estrellas, pero está algo descompensado.
La cereza también es interesante a la par que simple, al tocarla tendremos una copia de nuestro personaje y así sucesivamente si encontramos más cerezas, pudiendo controlar (aunque en realidad sólo controlas a tu personaje y los demás lo imitan) hasta 4 copias. Es divertido pese a que no se usa mucho en el juego, aunque también tiene el inconveniente de que a veces no sabremos donde está el verdadero.

El juego usa de forma discreta ciertas posibilidades del mando como soplar o tocar la pantalla. Nos parece que sobran tanto que se lo podía haber ahorrado. podemos contar con los dedos de una mano las fases que hacen uso de estas características lo que no deja de ser un alivio y una decepción a partes iguales.

Algo que hay que comentar pese a lo obvio es la posibilidad de controlar hasta 5 personajes diferentes en el juego, como Mario, Luigi, Peach o Toad. Cada uno con sus peculiaridades como salto más alto, mayor rapidez o poder flotar por el aire unos segundos tras saltar. Esto le da un abanico de posibilidades al juego a la hora de superar una misma fase, donde experimentar con cada uno sus posibilidades. Hasta en algunos momentos nos obligarán a usar a uno en concreto para obtener por ejemplo un sello.



El multijugador funciona bien, es divertido, pero hay mucho que pulir. Por alguna razón no llega a cuajar del todo ya sea por una cámara algo problemática en ciertas situaciones o que tendremos vidas conjuntas lo que ya no hace tan divertido los piques con los colegas.

Como curiosidad al repetir una fase aparecerán Miis fantasmas ya sean amigos o desconocidos mostrando sus acciones y tiempo para intentar picarnos, algo que está bien, pero que nos recuerda una vez más el por qué no se incluye un modo online para estas cosas, ni si quiera un triste ránking.

Super Mario 3D World es un plataformas robusto para WiiU, con su diversión que lo caracteriza siempre y con sus novedades para justificar una nueva entrega. Sin embargo esta vez el resultado no es tan brillante, por un cúmulo de cosas ya comentadas a lo largo de este análisis (multijugador, sencillez, problemas de cámara y profundidad, diseño cúbico de las fases, etc.) y por no impactar como si nos tiene acostumbrados otros títulos del fontanero para otras sobremesas dando la sensación de estar ante un Mario menor, divertido y directo, pero mucho más discreto.
Aún así es una apuesta segura en el escaso catálogo de WiiU y un plataformas de notable alto donde disfrutar y recorrer sus niveles una y otra vez con sus distintos personajes.

NOTA: 8.5