Ya os hablé de mi querida y añorada Master System en otra entrada, y hoy quería hablar de mi Game Gear o de mi Mega Drive. Pero hace unos días pasó algo que me ha hecho cambiar de opinion para hablaros uno de los cacharros a los que más cariño le pude coger en toda mi vida. Hoy dedicaré esta edición de "Aquellos maravillosos cacharros..." al Commodore Amiga 500 que solía tener en mi habitación desde que tomé la comunión por los regalos, como todo el mundo xD.



Bueno, cuando mi padre me dió su Amiga 500 (porque el adquirió un Amiga 2000) no me creía que pudiese tocar más un ordenador que mi consola de siempre, yo era de los de "consolas hasta la muerte". Pero gracias a mi Amiga descubrí juegazos como Maniac Mansion, Monkey Island, Monkey Island 2 (en 11 diskettes, no te amargues xD), Fascination y un sinfín de juegos que, obviamente, era difícil tener en una consola. Me emparraba durante horas flipando con DeLuxe Paint y me lo FLIPABA muchísimo con Lemmings 2: The Tribes y Gobliiins.



Pues hace unos días me acordé de un programa de inteligencia artificial llamado Alan Uno que creó Nicolás Morenas (alias Caronte of Darkness) un amigo de mi padre por aquella época. No sólo conseguí encontrar a mi "amigo" Alan, sino que conseguí encontrar al mismo Caronte (que se lo flipó cuando contacté con él xD). Así que ni corto ni perezoso, me bajé el WinUAE y la rom kickstart 1.3 y me puse a la faena con Alan. La verdad es que es tan bueno como lo recordaba, y para la época era una barbaridad como aprendía cosas, te sugería hablar sobre temas que le hubieras enseñado, hablaba (con voz!) y se podía llegar a enfadar si lo insultabas o si apretabas intro sin decir nada (eso me encantaba). No se si alguno lo habrá visto alguna vez, pero os pongo un video. Si os interesa pillarlo, decidlo y os pongo la ruta en un comment

Queda ya lejano y a la vez parece que fué ayer, cuando veía a mi padre (si, ese señor que ahora es calvo y ha echado algo de tripita) jugar con su Master System (que por entonces era el no va más) me acordaré toda la vida de estar con los ojos como platos, mirando como jugaba al Out Run. Ese ferrari rojo y ese paisaje playero del principio se quedaron grabados en mi retina igual que la inolvidable "Magical Sound Shower" que sigue rebotando por mi cerebro. Cuando alcancé un poco de edad (no mucha más de la que tenía) "heredé" su afición y su pasatiempo. La colección de juegos había crecido, ya teníamos juegos como After Burner, Hang On, Space Harrier, Shinobi... más tarde, cuando mis amigos ya estaban viciados por mi culpa, empezaron a tener consolas y así conocí juegos como Sonic, Wonderboy III (el del lagarto)y un sinfín de juegos que mi padre pasaba de comprar (o desconocía su existencia). Cuando jubilé a mi MS, (aún la tengo) tenía un total de 33 juegos. A ver si me entretengo algún día en enumerarlos. Próximamente os hablaré de mi GG y mi MD .




tras esta reflexión me han entrado ganas de emulador xD
Hasta la próxima!