En esta generación los shooters han acaparado gran parte del protagonismo y ventas, y entre ellos ha destacado los Call of Duty, pertenecientes al subgénero bélico. EA intenta subirse al carro del éxito de este tipo de títulos con ésta última entrega de la veterana saga Medal of Honor, que hasta el momento había transcurrido en la 2ª Guerra Mundial.

Gráficos
Siendo claros y directos: en este apartado la decepción es absoluta. MoH no logra un buen resultado global, y dónde falla especialmente es en las texturas, y en menor medida en las animaciones de los personajes (tanto amigos como enemigos).

Sonido
Aquí tampoco sale muy airoso. La buena noticia es que cuenta con voces en castellano (aunque la voz de Dusty no pega para nada con el personaje), y la mala noticia es que la banda sonora no logra destacar ni resultar épica cuando el desarrollo de la acción lo requiere.

Jugabilidad
Los chicos de Danger Close no se han cortado ni un pelo a la hora de seguir a rajatabla la receta jugable de los COD: escenarios pasilleros, enemigos cuyo comportamiento está totalmente predefinido, diferentes situaciones de combate siempre acompañados de al menos 1 aliado, etc.

El problema es que en todo momento da la sensación de ser un quiero y no puedo de Modern Warfare, y de "esto ya lo he jugado antes". Incluso se fusilan tal cual muchas situaciones de la subsaga de Infinity Ward: la fase de sigilo en la nieve, bombardeos aéreos, defensa de posiciones, momentos en los que has de marcar objetivos que serán arrasados por la aviación aliada, etc, etc, etc.

Otro aspecto negativo es la pobrísima IA, anto aliada como enemiga. Los aliados molestan más que ayuda, no será difícil ver como se ponen en tu línea de tiro, o como son incapaces de matar a un enemigo situado a 3-4 metros delante suyo. Los enemigos siguen los dictados de los scripts, siempre saldrán por el mismo sitio, y siempre te dispararán a tí, por mucho que te escondas o aunque tengan a 2 pasos a algún aliado tuyo.

Pero lo peor de todo es la presencia de unos bugs que llegan a la categoría de escandalosos. Se darán momentos en los que tus aliados te impedirán avanzar, o que en vez de realizar determinada acción sin la que el juego no avanza, se quedarán quietos o incluso corriendo justo delante de un pared sin poder continuar. El resultado es que en varias ocasiones te tocará reiniciar el último punto de control para poder avanzar. En una palabra: lamentable.

En cuanto al multi-jugador on-line, éste ha sido desarrollado por DICE, lo cual supone una garantía por su experiencia con la saga Battlefield. Resulta muy ameno y divertido, aunque se echen en falta más modos y mapas. Además ofrece un apartado visual mucho más atractivo que el modo campaña, aunque parezca paradójico. Sin duda es el mejor apartado de este MoH.

Valoración global
MoH es una decepción importante. Tanto ha querido EA sumarse al éxito de los shooters bélicos que han realizado un juego que plagia punto por punto la saga COD. Un título sin personalidad propia, y lo que es peor, con algunos defectos imperdonables. La duración tampoco invita al optimismo, puesto que en modo difícil cuesta 6 horas justas. Al menos se ve compensado por un multijugador online realizado con mucho oficio, que satisfará a los aficionados a los shooters online.

NOTA: 6,3

La 1ª entrega de PoP en esta generación no acabó de cuajar. Tenía buenos elementos, pero el hecho de que el personaje no podía morir, y la reiteración de fases y enemigos echó por tierra parte del resultado.

Ahora UbiSoft vuelve a la carga con una entrega con bastantes novedades, pero que tampoco llega a ser un bombazo.

Gráficos
Muestran en general un buen nivel, pero en ningún momento sorprenden o impresionan. Los enemigos de a pie tienen un diseño y un modelado bastante pobre.

Sonido
LAO está doblaje al castellano, aspecto que es siempre de agradecer. En cuanto a la música, está compuesta por unas pocas melodías que no consiguen llamar la atención.

Jugabilidad
Aquí nos encontramos con bastantes cambios con respecto al anterior PoP: se acabó la inmortalidad del protagonista, que por otro lado irá adquiriendo nuevas habilidades y poderes, y aumentando su barra de vida (y de capacidad para "rebobinar" el tiempo) a lo largo de la aventura.

Y precisamente son estas habilidades las que aportan novedades a la saga, como es la de congelar el agua (y poder rodar y colgarse de chorros y corrientes de la misma), o la de restaurar zonas antiguas del escenario.

El factor combate gana bastantes enteros, llegando a pelear contra grupos de más de 15 enemigos juntos. Aquí también hay novedades, y el príncipe irá acumulando magias y poderes que le serán de gran ayuda en las peleas.

También hacen acto de presencia puzzles que generalmente no son complicados de resolver, y que aportan variedad al conjunto.

Todo título tiene sus defectos, y obviamente LAO no es una excepción. El control y la cámara no siempre ofrecen las garantías suficientes para resolver las cada vez más exigentes zonas plataformeras. En cuanto a los enemigos, tienen un diseño y una IA realmente rácanos.

Valoración global

LAO resulta entretenido y engancha, pero se queda en un juego que no sobresale en ningún aspecto, que no sorprende ni impresiona. Por tanto, el típico título de pasárselo (dura unas 9 horas) y no volver a tocarlo más.

NOTA: 6,5

Me parece muy poco serio y un poco lamentable el trajín que se lleva la gente de MicroSoft con los diferentes diseños que han ido sacando en los últimos años para las reediciones Classics de juegos de Xbox 360.

Si la memoria no me falla, 1º fue esto (con un recuadro que recorta mucho la portada):



Luego los Classics Best Seller (ahora un recuadro con un verde intenso, nada estético):



Para acabar con esto (no recorta la portada y me parece mucho más sensato):



Y no sé si me he dejado algún otro diseño por el camino. Vamos, un cachondeo, aunque al menos han acertado bastante con el diseño actual.

Saludos.

NOTA: Recomiendo leerlo sólo si se ha pasado el juego.

MercutySteam, un estudio que hasta el momento no había descatacado, tomó (para sorpresa general) el encargo por parte de Konami de revitalizar y llevar con éxito a las 3D (después de varios intentos poco convincentes en N64 y PS2) una saga que andaba dubitativa, con la colaboración entre otros de Hideo Kojima. El resultado es muy satisfactorio, tanto para los fans de la saga como para los aficionados en general a las aventuras de acción.

Gráficos
LoS cuenta con un apartado visual muy notable, dónde destacan con luz propia los decorados, algunos de los cuales alcanzan un nivel de detalle y de vistosidad realmente notorio. También es digno de mencionar el gran tamaño de algunos enemigos, sobre todos los 3 colosos.

Por contra nos encontramos con un frame rate que oscila por debajo de lo deseable, y que junto a la oscilación permanente de la cámara (siempre automática, por desgracia) puede provocar mareos, sobre todo en un primer contacto con el juego. Otro defecto importante es la pobreza de las animaciones, sin duda el aspecto menos pulido de LoS.

Sonido
La banda sonora sólo puede catalogarse como épica y sobresaliente, de las mejores de la actual generación. No en vano la edición coleccionista incluye un Audio CD con las pistas que componen la BSO. Los efectos de sonido cumplen perfectamente.

En cuanto a las voces de los personajes, destaca la ausencia del doblaje castellano, algo incomprensible tratándose de un juego producido en España. Tirón de orejas a Konami en este aspecto.

Jugabilidad
El apartado que hace grande a LoS es una cuidadísima y estudiada jugabilidad, basada en 4 pilares: combates, plataformas, puzzles y ciertas dosis de exploración. Mercury ha mantenido un equilibrio perfecto entre estos elementos, y lo que es mejor: ha conseguido que LoS atrape y enganche al jugador como muy pocos títulos consiguen.

Cada uno de los pilares visto en detalle:

1º) Combates
El sistema de lucha está a la par con los mejores representantes del género (Ninja Gaiden, GoW...), y viene acompañado de un control bien definido. Pulsando L2 más la dirección deseada, Gabriel realizará una voltereta de esquive, pero si la pulsación se realiza en el momento exacto en que se produce el ataque enemigo, se ralentizará un par de segundos la acción, previo a un contraataque inapelable.

A partir de ahí, la típica mecánica de 2 botones para ataques, que al combinarse de diferentes formas producen combos. Y heredando precisamente de GoW y otros títulos, hay otro botón para realizar agarres, que resultan muy efectivos contra enemigos pequeños y no muy poderosos.

También al igual que en los GoW, los combates se pueden (o deben) finalizar con un agarre que precederá a un QTE, de resolución mucho más sencilla que en la saga de Santa Mónica.

Por otro lado, se podrán ir adquiriendo nuevos movimientos, ataques y combos, a cambio de puntos de experiencia.

Además de todo esto, en el sistema de combate de LoS hay 2 aspectos diferenciadores: el uso de 2 magías: luminosa y oscura (la 1ª recupera ligeramente vida, la 2ª es más dañina) según convenga en cada momento; y la presencia de una barra que se rellena según se vaya impactando a los enemigos sin que ellos hagan lo propio con Gabriel, y una vez llena, con cada nuevo impacto los enemigos "soltarán" orbes con los que poder subir la/s barra/s de magía.

Ya para concluir, también recordar que LoS toma prestado de Shadow of the Colossus la mecánica de pelear contra 3 colosos, que al ser derrotados nos obsequiarán con cada una de las 3 partes de la máscara.

2º) Puzzles
En este apartado, sólo cabe aplaudir a los desarrolladores, por la variedad y el diseño de los puzzles que van surgiendo. Existen desde los típicos de mover columnas cuyo haz luminoso deba enfocar determinada puerta, hasta otros de ir activando mecanismos en el órden correcto, pasando por otros de realizar determinadas acciones en el momento y sitio justos, sincronizando varias acciones, etc. La solución siempre es lógica y más fácil de lo que pueda aparentar en un principio.

3º) Plataformas
Aquí también se ven influencias de otra saga de Sony: Uncharted. La gran mayoría de las zonas plataformeras se resuelven de una manera semi-automática, salvo en determinados precipicios que saltar. Llegado cierto momento Gabriel dispondrá de doble salto, lo que unido a que con la cadena se puede enganchar a los anclajes, irá aumentando la complejidad y variedad de las situaciones.

4º) Exploración
LoS no es evidentemente un Castletroid, en el que hay que avanzar y retroceder por fuerza en función de las habilidades y poderes de las que de disponga en cada momento. Pero tampoco es un juego pasillero y lineal como la gran mayoría de títulos actuales. Muchas veces habrá que buscar uno o varios objetos con los que poder activar determinada puerta o mecanismo. Y tambien habrán sitios a los que no se podrá acceder en un principio, al carecer de cierta habilidad o poder, cosa que invita a rejugar.

Ya para concluir con el apartado jugable, destacar la longevida de LoS. En dificultad caballero, la duración puede variar entre 16 y 24 horas, dependiendo de lo concienzudo de la exploración que quiera llevarse a cabo. Otro aspecto positivo es que sólo hay tiempos de carga al iniciar cada fase (cada uno de los 12 capítulos tiene un nº variable de fases), sin instalación en el disco duro de la consola.

Valoración global
No es fácil explicar con palabras las sensaciones que va marcando LoS en el jugador. A veces resulta frustante, otras emotivo e intenso, y siempre desafiante y adictivo. Sin duda es un juego como los de antes, dónde no es difícil quedarse varias veces atascado, cosa nada habitual en una generación en la que el 95% de los juegos se lo dan todo mascadito al jugador.

LoS no es un juego perfecto, tiene carencias notorias como la ligera brusquedad del motor gráfico, las pobres animaciones, o la ausencia de doblaje en castellano, pero al mismo tiempo es la típica aventura que te va atrapando y que te gusta más y más cuanto más lo juegas.

También son evidentes las fuertes influencias de títulos como God of War, Shadow of the Colossus y Uncharted (curiosamente todos de Sony). No obstante Lords of Shadow tiene una fuerte personalidad propia, no se queda en un simple pupurrí ni en un plagio sin chispa.

Ya finalizando, destacar el maravilloso final, muy emotivo e intenso, y que guarda una sorpresa mayúscula tras los créditos (en la más pura tradición Kojima), algo que deja de verdad impactado.

NOTA: 8,3

Se trata de un juego al que le tenía muchísimas ganas, y que pude adquirir 2 días antes de su lanzamiento oficial. Después de haberle dedicado unas 2 semanas, he aquí mi análisis.

Gráficos
Aquí nos encontramos con luces y sombras. Por un lado tanto los circuitos (y sus entornos) como los vehículos están muy bien recreados, y la sensación de velocidad es muy buena. Pero por otro lado tenemos un frame rate muy bajo, notándose sobre todo en las curvas más cerradas, y en la pista de Mónaco. En general las texturas tampoco son para tirar cohetes.

Sonido
Los efectos de sonido resultan convincentes. El doblaje en castellano está bien conseguido, especialmente en cuanto a las indicaciones que te da tu ingeniero de pista. Resulta chocante que la música sólo haga acto de presencia en menús y tiempos de carga, y que el juego no tampoco permita la reproducción de las canciones guardadas en el disco duro de la consola.

Jugabilidad
Por suerte F1 2010 es un racer adaptable y accesible a la habilidad y experiencia de cualquier jugador, puediendo elegir las ayudas a la conducción (conrol de tracción, frenos ABS, trazada ideal...). Para hacerlo más accesible cuenta con "flashbacks" (hasta un máximo de 4), con los que ya contaban anteriores títulos de Codemasters como DIRT 2 o GRID.

Algo que resulta incomprensible y molesto es que el juego te mete directamente en el modo Trayectoria, con la obligación de ver una serie de videos y charlas que no se pueden saltar.

Una vez metidos de lleno en Trayectoria, se puede elegir la duración (3, 5 ó 7 años) y la escudería (entre unas cuantas predeterminadas según el nº de años). Asegura muchas horas de juego, pero también exige mucha dedicación, quizás demasiada. Como mínimo hay que disputar la clasificación y un 20% del tiempo real de la carrera, así que disputar un Gran Premio requiere cuanto menos media hora, y facilmente unos 50-60 minutos. Con el paso de las carreras vas mejorando tu reputación y puedes fichar por una escudería superior.

El resto de modos para 1 jugador no son ninguna maravilla. El modo Gran Premio te permite disputar todo el campeonato o el nº de pruebas que quieras. En el primer caso es muy decepcionante comprobar que tras ganar el título no sólo no sale un video, ni siquiera un mísero mensaje de felicitación en pantalla. Además existe un modo Contrareloj para practicar sin agobios.

En cuanto al modo competitivo online, permite disputar carreras de diferente duración (con o sin clasificación), e incluso varios GP seguidos. El problema radica en que el comportamiento "agresivo" de muchos jugadores no es penalizado como se debiera. Por ejemplo, es muy frustante que tras esforzarse en la clasificación para conseguir un buen puesto en la parrilla, todo se vaya al traste porque en la 1ª vuelta te saquen 3 veces de pista.

Valoración global
Codemasters ha realizado un notable simulador de conducción, accesible, divertido y durable. Sin embargo la escasa suavidad del motor gráfico y algunas limitaciones e inconvenientes de los modos de juego le hacen restar enteros. Seguro que en próximas ediciones el resultado será más redondo.

NOTA: 7,2