Loeb, el mejor de la Historia

Lamentablemente, últimamente los rallys son noticia más por desgracias (la muerte de McRae está todavía en la mente de todos) que por la propia competición. Soy consciente de que el seguimiento de este espectacular deporte es muy minoritario desde que el gran Carlos Sainz se retirara hace ya unos años, pero no por ello lo conseguido esta temporada por Sébastien Loeb merece caer en el olvido.

El francés ha finalizado tercero el tradicional (y de tan amargo recuerdo para los aficionados españoles) RAC británico que pone punto final al Mundial, alcanzando su cuarto Campeonato del  Mundo cosecutivo. Loeb iguala así a los fineses Juha Kankkunen y Tomi Mäkinen en número de Mundiales conseguidos (y a este último en campeonatos consecutivos).

Loeb tiene, asimismo, un récord que puede equipararse en importancia al anterior: ha ganado la friolera de 33 rallys a lo largo de su carrera.

Podrá decirse en su contra que no tuvo rivales de tanta entidad como otros campeones anteriores, pero lo cierto es que tanto Sainz (en 2004) como Solberg o Grönholm no le han puesto las cosas fáciles durante los últimos cuatro años. Esta temporada parecía que iba a ser la del tercer título de Marcus Grönholm, lo que habría roto la racha de Loeb; pero un accidente en el penúltimo rally, el de Irlanda, impidió que el finés se convirtiera en tricampeón.

Creo que no es ninguna tontería decir que, a la vista de su bestial palmarés y la dictadura que ha ejercido durante los últimos años en el WRC, Sébastien Loeb se ha convertido en el mejor piloto de la Historia del Mundial de Rallys. Un no-nórdico en la cima, igual que nuestro Carlos. Qué pena que la suerte, siempre la suerte, le impidiera haber sido aún más grande.