Hace un tiempo dije que iba a esperar a que Sin and punishment 2 estuviese a 40 euros o menos para poder hacerme con él, ya que antes quería comprar No More Heroes 2 (justamente sale a 40) y ya en pleno verano pillar Galaxy 2 y MH3.
¿El problema? Lo primero de todo, puede que ni pueda comprar NMH2 debido a mis estudios…
El juego sale el 28 de mayo, una fecha donde justamente acabo la segunda tanda de exámenes de la evaluación y tengo un pequeño periodo de tiempo para pasar a los últimos exámenes. Obviamente, el estudio predomina ante el ocio en mi cerebro, jugando solo cuando se pueda y ya teniendo toda la tarea del día hecha, aún así, puede que a mis padres no les haga mucha gracia el que me compre un juego en plena evaluación. El juego, al distribuirlo Nintendo España (que incluso le ha dedicado un evento de presentación para la prensa), va a tener una buena cantidad de unidades en las tiendas y tal, nada de escasez, vamos, que aún así podría esperarme a que acabase el curso...Pero la verdad es que llevo bastante tiempo esperando el jueguecito de marras y le tengo bastantes ganas.
Pero S&P2 no corre la misma suerte. La distribución ha sido una puta mierda, y tengo miedo que cuando vaya a comprarlo, ya no lo vea por ninguna tienda. Entonces, puedo hacer 3 cosas:
1) Comprar NMH2 en su salida y esperar a verano para S&P2.
2) Coprar NMH2 cuando acabe el curso y esperar a verano para S&P2.
3) Comprar S&P2 antes que NMH2. ¿Cuándo? Ese es el problema.Si el juego no hubiese tenido esa distribución, sin duda elegiría la uno o la dos, seguramente la segunda, pero esto hace plantearme bastante la tercera...
Ah, estoy hecho un lio :_______(
Después del mejorable, pero nada despreciable “Assault”, se conoce que está en desarrollo para Nintendo DS una nueva entrega de Fox y cía., esta vez enfocado al uso de naves.
A finales de 2006 y en enero de 2007 aquí, Command aparece como la quinta entrega de la saga protagonizada por Fox McCloud.
• Primeras impresionesEl juego es una mezcla de estrategia con batallas a bordo de nuestras naves. Cada piloto tiene sus características que tendremos que tener en cuenta a la hora de planificar nuestra ruta y nuestros enfrentamientos.
Los rediseños de los personajes son más que obvios, con un estilo desenfadado y caricaturesco alejado de anteriores entregas de la saga.
• GráficosEl juego opta por el uso del 2D a la hora de las charlas antes de cada misión y en el mapeado estratégico. En cambio, a la hora de pilotar nuestra nave, pasaremos a un entorno 3D abierto con unas 3D con unas texturas y fondos algo mejorables. El juego tiene ciertos detalles gráficos, como el hecho de que depende de en qué punto del mapa entremos en combate, el escenario de esta será diferente, desde el mar, hasta valles o ciudades, aunque pueden resultar algo vacios. Además, por cada personaje, el aspecto de la nave que pilota es diferente, siendo la mayoría de naves de los antiguos integrantes de starfox variaciones del archiconocido Arwing.
El rediseño de algunos personajes es algo casposo (Krystal y Katt son de los personajes que peor salen parados), aunque otros no desagradan demasiado (Por ejemplo, el de Fox o Bill grey) o bien no tienen demasiados cambios (Falco, Slippy y Star Wolf entre otros). Pese a ello, las nuevas inclusiones (Amanda, Lucy y Dash) no parecen nada inspiradas y los villanos de esta entrega brillan por la ausencia de carisma. Así lo son también los artwork de los endings, algunos bastante horrendos. Al menos, la intro del juego ofrece algunos guiñitos y está mejor trabajada que los finales.
Donde sale bien parado es en las reuniones previas a las misiones, donde podemos ver el planeta objetivo desde el great fox mientras los integrantes del equipo charlan con forma de sprites renderizados con una animación bastante fluida.
• Jugabilidad y control
El juego se divide en misiones. Por cada planeta tenemos unas 3 misiones o más. En un principio tendremos una ruta predefinida, pero cuando consigamos el primer final podremos tomar decisiones que cambiaran nuestra ruta, llegando a fases distintas.
Tenemos dos modos principales de juego: Estrategia y combate.
En el primero, debemos trazar desde nuestra nave una ruta para acabar con todos los enemigos y bases enemigas del mapa, mientras que en el segundo, debemos acabar con nuestros objetivos a bordo de nuestra nave antes de que se acaba nuestro combustible. Pilotamos nuestras naves desde la pantalla táctil, donde se nos muestra un radar (bastante útil, ya que nuestro alcance visual no es muy grande) donde aparecen enemigos y objetos, además de iconos, que al pulsarlos realizaremos un cambio de sentido o una pirueta. Podremos arrastrar bombas a la parte que queramos del mapa, destruyendo los enemigos que entren en su radio. Para disparar, bastará con pulsar CUALQUIER botón, excepto select o start, dejando el juego para zurdos y diestros sin tener que elegir modo ni nada. Si cargamos el laser, localizaremos objetivos. Como novedad, si seguimos apuntando el enemigo, el rayo se cargará aún más, llegando hasta un máximo de cargas que efectuará un disparo bastante potente, muchas veces destruyendo el enemigo de un disparo.
Para acelerar, debemos pulsar dos veces la mitad superior mientras mantenemos el lápiz en la táctil, mientras que la mitad inferior sirve para frenar. Para realizar toneles (Barrel roll), debemos deslizar rápidamente de izquierda a derecha sin despegar de la táctil el lápiz. Es un movimiento muy útil, ya que permite dañar enemigos y somos invulnerables a los láseres cuando estamos rodando. Aún así, el modo de frenar, acelerar y realizar toneles es algo tosco en ocasiones y puede liar, por otra parte, la nave responde bastante bien al uso de la táctil.
Entremos en detalle. En el modo estratégico, debemos defender el Great Fox cada turno impidiendo que los enemigos choquen contra él, a la par que destruimos todos los objetivos para finalizar la misión, teniendo a disposición hasta cuatro naves con diferentes pilotos. Dibujamos la ruta tocando el icono de la nave y dibujando una línea hasta nuestro objetivo. Cada turno tiene dos mitades: realizar la ruta y eliminar a los enemigos con los que nos encontremos. Nuestra ruta está condicionada por una barra de energía, que se irá vaciando a medida que extendamos nuestra línea. Para poder hacer rutas más largas, debemos dirigir la línea hacia bases cornerianas, en las que se rellenará la energía de nuevo y podremos seguir dibujando la ruta. Cuantas más bases conectes, más larga será la ruta. Aún así, no siempre las bases de nuestro bando. Las fuerzas enemigas han conquistado la mayoría de bases cornerianas, desde las cuales mandan naves enemigas y misiles con el fin de destruir nuestro Great Fox. Para liberarlas, deberemos dirigirnos a ellas y entrar en combate. Los escenarios de este modo son mapas cartográficos, que nos indican el tipo de terreno por el que nos movemos, aunque en ocasiones tendremos barreras rojas que no podemos traspasar para complicar nuestra ruta hacia el objetivo. En el escenario está presente una niebla de la cual podemos disipar un numero limitado rascando con el lápiz tactil. Aún así, al finalizar el turno, la niebla aumentará, cubriendo gran parte del mapa y a los enemigos.
En cambio, en el modo de combate pasaremos a la acción. Nos movemos por un entorno tridimensional con nuestra nave en busca de nuestros objetivos. Para entrar en este modo, debemos chocar con nuestros enemigos, o bien que estos nos encuentren a nosotros. Al finalizar todas las rutas, pasaremos a una pantalla donde se nos indican que objetivos tenemos. Si un personaje adquiere más de un objetivo, estos se solaparán encima de otros por prioridad, de menor a mayor. Además, varios personajes pueden alcanzar un mismo objetivo, pudiendo seleccionar con quien pilotar, o bien si derriban a uno, acabar la faena con el siguiente.
Tenemos cuatro tipos diferentes de combate: El primero y más común es el de naves enemigas. Nuestro objetivo en todas las batallas son derribar una cantidad de enemigos determinados para conseguir sus núcleos (que tienen forma de estrella) para finalizar el combate antes de que se acaba el combustible (tiempo). El problema es que estos enemigos están camuflados entre otros en el radar, y solo los podremos encontrar visualmente, aunque cuando solo quede uno, saldrá marcado en el radar. Cada cuatro enemigos destruidos, se nos otorga un objeto, bien tiempo extra, bombas o energía. Aunque disponemos de un tiempo base, podremos rellenar el tiempo destruyendo enemigos o pasando por aros que nos otorgan los objetos que más necesidad tengamos o bien se rellenará al destruirse una de nuestras naves.
El segundo tipo de combates son los misiles. En vez de movernos libremente, pasaremos a una fase on-rails en la que tenemos que pasar por todos los cuadrados y destruir el misil para que no avance más. Por cada cuadrado que pasamos, la velocidad aumenta, y con solo saltarnos uno, el misil proseguirá su ruta.
El tercer tipo de combates son en las bases contra las naves nodrizas. Después de destruir los objetivos, tenemos que hacer algo similar a la fase de los misiles, realizando un tonel para perforar y destruir la nave nodriza. Así liberaremos la base corneriana, la cual tendremos a nuestra disposición, además de otorgarnos dos turnos extra. La cuarta y última son los jefes finales, aparecen al acabar ciertas misiones y su número total es algo reducido. Hay desde simples naves enemigas hasta monstruos de un tamaño considerable. Pese a que el movimiento es libre, muchas veces el jefe se nos pondrá delante, como si de una lucha on-rails se tratase, recordando a anteriores entregas. Muchas veces no supone una gran complicación, siendo bastante fáciles de derrotar.
Pese a basarse en una buena idea ya puesta en práctica en el cancelado Starfox 2, command la utiliza de mala manera, dándonos muchas veces la sensación de que estamos jugando la misma misión una y otra vez. En ocasiones, las fases de combate son un chiste, ya que simplemente con usar una bomba, o bien abusando del rayo cargado y del tonel podremos destruir los objetivos muy fácilmente sin ninguna complicación. El juego llega a aburrir muy fácilmente debido a su constante repetición y similitud de fases, llegando a decepcionarnos cuando intentemos conseguir todos los finales.
• Historia
Aparte de Assault, este es uno de los starfox más enfocados a la historia.
El juego comienza con una introducción donde nos ponen al día de lo sucedido. Varios años después de derrotar al científico loco Andross y más tarde los aparoides, el equipo Starfox se disuelve. Slippy se aleja de la vida de piloto y consigue tener novia (Amanda). Falco sigue pilotando por dinero, pero echa de menos a Fox y cía. Krystal se aleja todo lo posible de Starfox debido al propio Fox. Este la convence para que deje la arriesgada vida de piloto y ella deja el equipo con el corazón destrozado. Fox vaga por la galaxia, más solitario que nunca. Mientras, Star Wolf sigue haciendo de las suyas, habiendo puesto un precio por su cabeza. Por último, el viejo Peppy sustituye a Pepper como general del ejército de Corneria debido a una enfermedad.
Ahora, desde Venom, surge de la nada un ejército de hombres-pez llamados Anglar, quienes invaden todos los planetas del sistema Lylat rápidamente. Fox decide hacerles frente, pero no podrá hacerlo solo.
El juego muestra a un Fox más serio y solitario, distanciado totalmente de sus viejos amigos, ya que no sabe nada de lo que han hecho todo este tiempo hasta que les pide ayuda o los encuentra en su camino. El juego contiene bastantes guiños a juegos de la saga (las dos primeras imágenes de la intro, nombran planetas como Sauria o a los propios aparoides, etc.), pero los finales no dejan de ser un fanservice bastante casposo y de pésimo gusto centrándose en algunos personajes en concreto.
Algunos puntos realmente negativos son el enfoque que dan a Andross, que no tiene nada que ver con todo lo que conocemos sobre él, el culebrón Fox-Krystal, realmente innecesario y bastante estúpido ya desde la intro, o bien el cambio de actitud de algunos personajes respecto lo ya visto o bien sus apariciones y desapariciones repentinas sin el menor sentido. Tampoco se entiende como puede ser que de repente todos los personajes tengan una nave propia y sepan pilotarlas a un nivel de infarto, incluso algunos que no han tocado una nave en su vida.
• Música
La mayoría de temas usados son remixes dándole un aire de tranquilidad en las fases estratégicas y un toque rítmico a la hora de entrar en acción. Cada personaje tiene un tema propio de combate, aunque algunos personajes concretos cambian de tema al entrar en combate con naves nodrizas. Las músicas que más destacan son las de algunos planetas en concreto y algunos temas de batalla, pero no pasa de ambientar.
NOTAS:
Gráficos: 7
Escenarios algo vacios y algunos rediseños decepcionantes.
Jugabilidad y control: 6.5
Parte de una idea genial, pero la puesta en práctica es repetitiva y rancia.
Historia: 6
Empieza bien, pero da pie a culebrones innecesarios, finales casposos y personajes que entran y salen sin ton ni son. Al menos tiene guiños interesantes.
Música: 7
Ambientan cada parte de cada misión, no destacan demasiados temas.
TOTAL: 6.5
• Lo mejor y lo peor:
+ La idea de mezclar estrategia y acción.
+ Partes estratégicas.
+ Guiños a otros juegos de la saga.
+ Las decisiones entre misiones.
- Algunos diseños, sobretodo nuevos.
- Misiones repetitivas.
- Los finales.
Mis opiniones:
Cuando me enteré de la existencia de Command, mis expectaciones subieron a lo más alto, un Starfox de naves en mi DS. Cuando supe que mezclaba estrategia y acción, me asuste un poco, pero irónicamente, el primer punto es el que más me ha gustado, mientras que el segundo deja bastante que desear.
Muchos fans lo respetan por el hecho de recuperar la antigua formula de Starfox 2, pero su puesta en práctica en este juego es horriblemente repetitiva, nada que ver con la original. Posiblemente, el hecho más diferenciador es que Starfox 2 consiste en una gran misión que puede durar unas 2 horas como mucho, pero Command tiene 30 y pico misiones prácticamente iguales, en las que solo cambia el factor estratégico. Me encantó la posibilidad de escoger tus propias decisiones, y me gusta la pinta que lucen las conversaciones pre-misión, pero su contenido no tanto…
Me pareció también una ofensa el culebrón que se llevan Fox y Krystal y el hecho de meter personajes nuevos bastante inútiles y unos pocos interesantes que regresan a los que no se les ha sacado el jugo lo más mínimo, con apariciones ridículas, siendo los más sacrílegos para mi Dash, Bill y un spoiler. Al primero, por ser el único personaje nuevo mínimamente interesante y que no se le ha sacado jugo, el segundo porque es uno de los pocos pilotos de alta gama de la saga de parte del ejercito corneriano y solo sale en dos misiones para decir un hola y adiós, y el tercero…porque no tiene ningún sentido su aparición en una de las misiones finales.
Es un juego con el que quedé seriamente decepcionado sobretodo en los finales, que me esforcé por completarlo al 100% y que me ha llegado a aburrir considerablemente. Pero lo que más me jode es que es un juego que podría haberse aprovechado muchísimo, ya que tiene un gran potencial, pero que se ha llevado a cabo de una manera pésima.
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