Metroid Fusion -Análisis-

ADVERTENCIA: Si no te gusta leer mucho, esta no es tu entrada.
Si quieres un resumen, al menos moléstate en ir al final de la entrada para verlo.

Desde SNES, no habíamos vuelto a ver nada de Metroid. En un E3, se mostró un prototipo de Metroid IV, el sucesor de Super Metroid (Metroid III), desarrollado para game boy color. El video mostrado era realmente confuso, con cosas como una samus con un diseño bastante raro andando por las paredes. Más adelante, Nintendo anuncia Game boy advance, y algo más tarde se anuncia Metroid Fusion, la versión definitiva de Metroid IV, desarrollado para la nueva portátil de nintendo.

Al fin, tras tantos años de espera, los seguidores de la serie obtuvieron la tan deseada secuela de la tercera parte de la saga.

• Primeras impresiones
Algo a destacar nada más empezar el juego es un detalle muy importante: Samus habla.
Tampoco abiertamente, pero Samus nos relata su historia de cómo fue infectada con un organismo desconocido y como su vida casi acaba de no ser por la vacuna creada a partir del último metroide.

La intro se presenta con unas ilustraciones en alta resolución (para la época, bastante buenas) dibujadas a mano. Los gráficos presentan colores vivos con unos fondos detallados que nos sumergen totalmente en el juego. El control y la formula de juego parece similar al anterior metroid, aunque con unos ligeros cambios.

• Gráficos
Las capacidades de GBA dotan a la paleta de colores mucha mayor variedad de estos para crear sprites coloridos y mucho más detallados respecto a juegos anteriores, siendo este uno de los primeros juegos que más aprovecharon la capacidad gráfica, tanto en los sprites como en el movimiento de estos. Este último es muy fluido y acertado para el ritmo del juego, rápido pero a la vez preciso.

Los tiempos cambian, y tambien el traje de Samus lo hace.

No hay mucho más que comentar, el detallismo de los escenarios y su estilo tenebroso hace que nos sumerjamos en la atmosfera del juego de un modo más natural que otros juegos.

• Jugabilidad y control
Para los que hayan jugado a Super Metroid, no hay mucho que decir. El control es el mismo, con unos ligeros cambios y una jugabilidad más pulida. Saltamos con A, disparamos con B y si pulsamos dos veces abajo, nos transformamos en morfoesfera.  Hasta aquí bien, pero en el anterior juego, pulsábamos un botón para ir eligiendo armas distintas, en cambio, con mantener R, podremos disparar misiles en vez de nuestro rayo actual, y del mismo modo soltar bombas de energía con la morfoesfera. Con el botón L podemos levantar el cañón de modo que dispararemos diagonalmente, ya sea hacia arriba o hacia abajo, facilitando el alcanzar objetivos aéreos o bien en el techo del escenario.

Esta es la primera vez que Samus habla de sus recuerdos y de sus sentimientos.

La gravedad y las físicas del juego han sido mejoradas respecto a Super. Los saltos son mucho más precisos y rápidos, al igual que los disparos. Una novedad es el poder agarrarte a las cornisas, desde las que podremos subir a lugares que solo podemos alcanzar llegando a estas, o bien entrar por pasillos estrechos convirtiéndonos automáticamente en morfoesfera. También podemos agarrarnos a escaleras (o techos en algunas ocasiones), desde las cuales podemos disparar en cualquier dirección opuesta.

La capacidad de inmersión del juego es bastante alta.

El juego mantiene el esquema de sus entregas anteriores. Nos movemos por una estación con una estructura laberíntica, guiados (una novedad que facilitará las cosas a los nuevos en la saga) por un ordenador que nos indicará que debemos hacer y adonde debemos ir. Respecto al juego anterior, el juego es mucho más lineal, con lo que es casi imposible perderse, cosa habitual en Super, además de estar guiados constantemente, cosa que no puede gustar a los puristas, pero que se ve contrarrestado con una gran variedad de habitaciones secretas donde podemos encontrar alguna  de las expansiones disponibles (Tanques de energía, para aumentar la cantidad de energía disponible, expansiones de misiles o bien expansiones para bombas de energía), algunas muy bien escondidas y que no se ven a simple vista.

Para una vez que habla, y lo que suelta. Si es que es una cachonda mental, no lo puede evitar.

Una pequeña novedad del juego, y que solo aparece en esta entrega de la saga, es la inclusión del SA-X, un despiadado clon perfecto de la “antigua” samus (Esta pierde su viejo traje climático, junto a todas sus habilidades adquiridas, debido a la infección del parasito X), que en algunos puntos del juego intentará darnos caza, por lo que deberemos escondernos hasta que se vaya ya que no hay manera de derrotarlo, aunque más adelante deberemos de huir de él a toda pastilla, ayudándonos con los misiles de hielo, que harán que se congele unos pocos segundos.

A lo largo del juego iremos adquiriendo habilidades tras derrotar a los jefes o bien entrando en salas de descarga en momentos concretos. Algunas de ellas son misiles de hielo, el famoso salto en barrena y el rayo de plasma entre otras, como los distintos trajes, tres en total (traje fusión, desde el principio del juego, traje climático, para zonas de temperaturas extremas, y traje gravitatorio, para andar de forma normal por el agua y soportar la lava).

• Diversión
Este juego hará que te quedes pegado a la pantalla. Es un juego que hasta que no lo pasas, no puedes parar de jugarlo, siempre quieres ver qué zona vas a visitar a continuación y que nuevas rutas y enemigos vas a encontrarte. El aliciente de exploración de Super se ve reducido, pero el juego invita a conseguir todas las mejoras disponibles, muchas muy bien escondidas, en el menor tiempo posible, habiendo unas 5 o 6 imágenes distintas en función del tiempo y el porcentaje del juego.

No me gustaría tener un clon letal y despiadado que me siguiese la pista.

El factor rejugable del juego es el que hace que aunque lo hayas completado, tengas ganas de hacerlo una segunda, tercera, o todas las veces que se quiera, el juego te invita a pasártelo tantas veces como quieras sin perder ni un ápice de diversión.

• Historia
Sorprendentemente, este es el primer Metroid que hace énfasis en la historia, estando presente en todo el juego, a diferencia de la casi inexistencia de esta en Super, que solo tenía principio y final.

Varios años después de los sucesos de Super Metroid, la federación decide explorar el planeta en el que vivían los metroides antes de que Samus los destruyese, SR388. A regañadientes por volver a aquel repugnante planeta, Samus lidera el equipo de investigación, debido a que es la única que ha pisado aquel lugar desolado. Durante la expedición, un organismo desconocido, al que llamaron “X”, ataca a Samus. Cuando la misión acaba, Samus pierde el conocimiento y choca con un cinturón de asteroides.

Si, son "ellos" ¿acaso creiais que no iban a volver a salir o qué?

El X es un parasito que ha invadido tanto a Samus como a su traje, por lo que tienen que extraérselo de forma quirúrgica, ya que se ha quedado ensamblado con Samus. Poniéndola en un estado gravísimo, tanto que se le llegaba a dar por muerta. Por suerte, alguien propone usar al último metroide para crear una vacuna contra el X. Esta surge efecto y elimina el parasito, aunque ahora Samus tiene información genética metroide en su organismo y su traje cambia de apariencia. Una estación espacial de los laboratorios Biometrox manda una señal de socorro, por lo que Samus acude rápidamente a esta, con una nueva nave comandada por un OJ computerizado que le dará órdenes, aunque a ella no le haga nada de gracia.

Aunque puede parecer simple, la historia va avanzando con el juego, desvelando secretos sobre los metroides, el X, la propia federación y también conoceremos los pensamientos y sentimientos de Samus, en forma de monólogos entre zona y zona.

• Música
La música va concorde la atmosfera del juego: desoladora, siniestra y con peligros acechando en cualquier esquina. Escucharemos algún tema de alguna entrega anterior, pero la mayoría son nuevas. Los efectos de sonido en su gran mayoría son un reciclado de Super Metroid, aunque no todos.

NOTAS:

Gráficos: 9.5
Animaciones fluidas y escenarios detallistas.

Jugabilidad y control: 9
Control y jugabilidad genial, pero su duración y su linealidad le juega una mala pasada.

Diversión: 10
Altamente rejugable y divertido.

Historia: 9
El primer juego de Metroid que toma su argumento en serio, los monólogos de Samus son geniales.

Música: 9
Acorde con la atmosfera del juego, te pone en situación.

TOTAL: 9.5

• Lo mejor y lo peor:

+ La inmersión en el juego.
+ Divertido y altamente rejugable.
+ Animaciones fluidas y fondos detallistas.
+ Los monólogos de Samus.

-Demasiado corto.
-Algo lineal respecto a sus antecesores.

Mis opiniones:
Desde el media Summit y la información de Other M, mi mono de Metroid ha aumentado, sobre todo con el tiempo que hacía que no jugaba a uno. Casualmente, vi el juego por 15 lereles de segunda mano y con instrucciones. Sin pensarlo, lo pillé. De pequeño me lo dejaron y lo disfruté en mi antigua GBA, que no se veía ni tres en un burro, pero la sensación de jugar en mi DS tocha (Bendita retroiluminación) es genial.

Es uno de los mejores juegos de GBA, siendo además la ultima parte de una historia que comenzó con un peso argumental flojo, pero que en este juego se da bastante importancia, sobretodo en la propia Samus, dando a conocer por primera vez sus sentimientos más profundos, y que no solo es una bella mujer embutida en un traje de combate, si no ante todo, es una persona. Gran juego, gran personaje, gran ambientación, gran todo. El único detalle que me ha fastidiado bastante es su duración, muy corta para mi gusto, pero el juego te compensa retándote a conseguirlo todo en el menor tiempo posible, ya es que es posible conseguir el 100% por alrededor de una hora y pico de juego, con una rejugabilidad que hace que no te canses de él.