Publicado: 16:36 02/06/2012 · Etiquetas: · Categorías: Análisis
Muy buenas tardes, últimamente no he tenido tiempo de meterme a escribir análisis,aunque ganas no me han faltado. Como tampoco quiero tomármelo como una obligación he ido confeccionando tranquilamente este de FFXIII-2 y lo publico con bastante atraso. Desde entonces ya he terminado Mass Effect 3 (por cierto Badgirl, el final me ha encantado, no entiendo las quejas), y espero currarme un buen análisis tarde o temprano.
Como siempre, que lo disfrutéis, y gracias por los comentarios. ANÁLISIS : FINAL FANTASY XIII-2 Square firma una nueva entrega de la serie Final Fantasy con aires renovados, desarrollo semi-abierto y los siempre atractivos viajes en el tiempo. Square-Enix nos sorprende, involuntariamente, en los últimos tiempos. Incapaz de seguir de cerca las nuevas tendencias o continuar fiel a su propio estilo, aboca a su saga más famosa a un experimento tras otro con resultados desiguales. Si FFXII supuso un arduo viaje basado en la exploración y constante combate, de marcado gusto occidental que poco o nada tenía que ver con lo que se esperaba tradicionalmente de la serie, FFXIII parecía dirigido a un público enteramente oriental, abogando por una línea argumental que ahogaba en sus exigencias al apartado jugable del título, mostrándose totalmente lineal y carente de ambición, salvo en los altos valores de producción e ingenioso sistema de combate. Dos caras de una misma moneda, enteramente opuestas y que ponen de manifiesto tanto el amplísimo enfoque de la saga como las erráticas idas y venidas de su productora. A pesar de las reticencias de un numeroso grupo de jugadores, FFXIII supuso un claro éxito comercial, sobre todo en su versión principal en PS3. La secuela directa se planteó rápidamente en aras de no alargar de nuevo un desarrollo interminable para el próximo episodio de la saga, y así aprovecharon no solo el motor gráfico creado para el original sino gran parte del diseño, personajes y ambientaciones de FFXIII. Paals a 700 años vista. Las similitudes con FFX-2 son obvias en el sentido de que se nos plantea una aventura mucho más abierta, con varias ramificaciones, decisiones que tomar, multitud de lugares y misiones secretas, e incluso varios finales. Sin embargo, se puede afirmar sin duda alguna que en esta ocasión el hilo argumental sí ha sido tomado en serio, retomando directamente los hechos acontecidos en su predecesor con gran acierto, explicando en detalle sucesos que no quedaron claros en la anterior entrega y que tendrán graves consecuencias en FFXIII-2. La historia se desenvuelve en un tono muy distinto, que se aleja la mayor parte del tiempo de la epicidad y grandilocuencia imperante en FFXIII. Esta vez es más intimista y melancólica, con sus buenas dosis de humor por parte de Mogu o Chocolina, pero que se siente a menudo claramente encaminada a la desgracia. Los nuevos protagonistas presentados en esta secuela son parcos en número, pero resultan interesantes y disponen de un transfondo y personalidad que se sustenta sin problemas de principio a fin,de una sensible evolución en el caso de Serah y Noel, y ahondando en los motivos y sufrimientos de Yuul y Caius. El bien y el mal son dos líneas que a menudo se encuentran e intercambian su lugar en una trama en la que las acciones de unos y otros están más motivadas por razones personales que por algún ideal en concreto o la salvación del mundo en algún punto de la historia, que parecen excusas para justificar su comportamiento y la cruzada a la que ambos grupos se entregan.Es, pues, un argumento con numerosos matices, que puede provocar que nos cuestionemos las acciones de Serah y Noel, a la vez que sentimos empatía e incluso lástima por Yuul y Caius, este último uno de los mejores villanos que Square se ha sacado de la chistera desde FFVII, o el más reciente The Last Remnant. Marca el ritmo El desarrollo de FFXIII-2 se halla definido por los diferentes viajes en el tiempo en que Serah y Noel deberán embarcarse para llegar hasta Valhalla, una tierra de nadie donde el tiempo no sigue su curso y mora la diosa Etro, protegida por Lighting. El mapa del juego es un auténtico entramado de portales separados por distintos tipos de artefactos que unen el camino de unos y otros, y que podemos encontrar esparcidos por los distintos escenarios. Algunos son imprescindibles para avanzar en la aventura, mientras que otros, los llamados artefactos maestros, nos abren el sendero de los portales de cristal, totalmente opcionales y que suponen casi la mitad del mapeado que podremos visitar, albergando una gran cantidad de secretos, misiones, recompensas y monstruos específicos a los que domar. Aunque se nota un menor esfuerzo en estos tramos del juego, componiéndose en su mayor parte de escenarios ya visitados en épocas diferentes, resultan a menudo muy entretenidos, narrándonos pequeñas historias paralelas que profundizan aún más en la historia general, o en personajes concretos como Mogu o la propia Lighting. Disponen además de retos diferenciados, por ejemplo, los Montes de Yaschna se componen de un buen número de misiones secundarias, en Oerba se nos reta con puzzles de dificultad creciente,las Cumbres Infames añaden un escenario “nuevo” y una concisa e interesante aventura paralela, o Xanadú nos obsesionará con sus exigentes carreras de Chocobos y sus insaciables tragaperras. En todo momento podemos acceder a varios caminos y decidir nuestro destino independientemente de nuestro objetivo actual, pudiendo volver al mapa con total tranquilidad en cualquier instante sin que peligre nuestro progreso actual. Square se aleja, pues, de la extremada linealidad de FFXIII, ofreciendo una jugabilidad más abierta y al gusto del usuario, sin embargo no exenta de fallos.El más grave es la acusada repetición de los mismos escenarios en diferentes momentos de la historia, que además conservan, inexplicablemente, un idéntico mapeado aunque hayan transcurrido 200 años de un portal a otro, demostrando en este aspecto pocas ganas de trabajar en el contenido opcional o un presupuesto limitado. Y como suele suceder en este género, algunas de las misiones y retos secundarios son puramente testimoniales e incluso insulsos. La única razón para completarlos es la satisfacción personal de haberlo conseguido todo. Por otra parte, entrecruzar diferentes tiempos y lugares para poder cumplir ciertos requisitos es una buena idea que podría haberse tornado insufrible, pero Square en este sentido nos facilita las cosas para desplazarnos por las diferentes eras, gracias a un sistema rápido,accesible y eficaz. En cuanto al sistema de combate y evolución de personajes, el cambio más significativo radica en la Mesnada. A medida que vencemos a ciertos monstruos podremos incorporarlos a nuestras filas ocupando el tercer puesto en el combate. Los monstruos que se pueden adquirir son muy numeroros y de habilidades y profesiones específicas, que nos servirán para cubrir aquél rol que hemos dejado de lado con Noel y Serah, o del que deseamos tener dos o incluso tres integrantes(una buena muralla puede salvarnos en según qué momentos).Qué profesiones cubriremos con la Mesnada es cosa nuestra y depende en gran medida de nuestros gustos y forma de enfocar las batallas. Los monstruos no solo varían en sus habilidades comunes, sino que cada uno dispone de un ataque(o protección) especial e individual que se puede activar una vez hemos rellenado un medidor de afinidad. También evolucionan de distintas maneras, pues algunos son fáciles y baratos de conducir a su poder máximo pero son de desarrollo prematuro, quedando desfasados y sin posiblidad de mejorar más adelante(por ejemplo Jenizaro), mientra que otros suponen toda una odisea para desatar su potencial, y no siempre valen la pena nuestros esfuerzos. Aquéllos que simplemente quieran alcanzar el final sin muchas complicaciones no deberían preocuparse excesivamente por este ámbito del título, que es casi un minijuego en sí mismo. Es más recomendable que opten por aquéllos monstruos más amigables a la hora de sacarles partido y cuyas habilidades se ajusten más a sus preferencias.(lo siento Cactilión, no compensas) Como novedades, también podemos observar un mejorado sistema de equipamiento, que limita nuestras elecciónes respecto a los accesorios en base a un peso límite. Es igualmente un acierto haber reemplazado la innecesariamente compleja forja de armas y complementos por la tienda de Chocolina, la cual nos venderá equipamiento exclusivo si le llevamos los ingredientes apropiados. Otras pequeñas pero bienvenidas correcciones consisten en poder controlar directamente y en cualquier momento a los dos personajes, de forma que la partida no termina si aquél que manejamos cae en combate(muy a lo “Persona”). La eliminación de la animación previa al cambio de formación, por su parte, contribuye a agilizar notoriamente los enfrentamientos prolongados y de estrategias elaboradas, que además esta vez no son tan exageradamente largos como en el original. Si hemos de definir con una palabra las sensaciones que esta secuela produce en el jugador respecto a sus antecesores, sería “equilibrio”. Equilibrio tanto de la línea argumental, que no absorbe todo el desarrollo del juego, como del contenido opcional, la exploración y posibilidades que se nos otorgan. FFXIII-2 es un punto intermedio entre la inabarcable dimensión jugable de FFXII y la intensa emotividad de FFXIII, una línea que esperemos se vea ampliada en una más que posible secuela con un mapamundi de los de antes que conecte de forma natural un vasto mundo por descubrir. El arte sobre la técnica. Como era de esperar, FFXIII-2 luce de manera espléndida la mayor parte del tiempo, exhibiendo escenarios repletos de detalles y dotados de una dirección artística muy cuidada que enmascara notablemente que no nos encontramos ante un nuevo referente técnico dentro de la serie, sino que se explota sabiamente el motor gráfico creado en su momento para FFXIII. Desde recónditas playas paradisíacas a ciudades o torres futuristas, pasando por eriales desiertos o ruinas abandonadas, ambientaciones de muy distinto calado que, sin embargo, sufren de ciertos altibajos de calidad, siempre explicados por medio del argumento, pero que en general dan la sensación de haberse podido trabajar más en cuanto a presentación. Los personajes, por su parte, siguen la tónica del gusto por el detalle que caracteriza a Square, con modelos obsesivamente perfilados, en los que podemos apreciar hasta el más mínimo complemento o arruga, animaciones faciales muy logradas, y un movimiento suave, rápido y natural de los protagonistas, que podemos apreciar en las escenas de vídeo o el combate, pero también sencillamente recorriendo los escenarios y comprobando la verosimilitud con la que se comportan ante las diferntes situaciones o niveles de terreno. El conjunto, lastrado por inoportunas ralentizaciones que nunca afectan al combate, no es impresionante, pero sí preciosista, colorido y de buen gusto, dotado de una dirección artística propia y muy japonesa, que se aleja acertadamente del RPG occidental. FFXIII-2 dispone de una heterogénea banda sonora, que abarca muchos estilos de música según el momento de la aventura, tanto J-Pop como pistas tradicionales de la saga remezcladas, y un elenco de nuevas composiciones que se mueven entre alegres o emotivas tonadillas e increíbles temas orquestados que subrayan las situaciones claves de la trama. Es difícil clasificarla globalmente a causa de la variedad de la propuesta, dándose el caso perfectamente de que detestemos un tema y adoremos el siguiente, ya que la BSO no dispone de una gran cohesión musical. El doblaje, en inglés, conserva una calidad más que aceptable, sobre todo en el caso de Serah y Noel, Caius o Mogu, manteniéndose fiel al estándar de la saga. Por último, la duración del juego depende en gran medida de la forma de afrontar la aventura por parte del usuario, ya que si éste quiere tan solo alcanzar el final del título puede terminarlo en unas 20 horas, una cifra claramente inferior a lo esperado en este género. Sin embargo, FFXIII-2 no ha sido diseñado para afrontarse de esta manera, sino que nos invita a explorar a fondo todos los destinos temporales, conseguir y entrenar a los mejores monstruos, cumplir misiones secundarias o participar en los juegos de Xanadú o los combates del Coliseo. La duración puede doblarse fácilmente si nos enfrascamos en una mínima parte de estas tareas, e incluso suponer una cifra aún mucho más elevada si deseamos desentrañar la mayoría de retos del juego. Conclusión. Una secuela directa de una saga que tradicionalmente se ha reinventado en cada entrega no presagiaba, en principio, nada bueno. FFXIII-2 peca de un desarrollo apresurado y un presupuesto que se percibe limitado, pero supone un buen paso adelante en la dirección correcta, una fusión entre la inmediatez y accesibilidad que se espera de las producciones actuales y la profundidad y posibilidades de los JRPG más tradicionales. Square ha sabido enmendar los errores cometidos en FFXIII, no sin ciertos atajos y tropiezos, en una nueva historia que bebe del universo creado para el original, pero que presume de propia personalidad y una jugabilidad más rica,profunda y variada, que no debe, ni permite, ser soterrada bajo un centenar de líneas de diálogo. 9 comentarios :: Enlace permanente
Comentarios: (del primero al último) 17:01 02/06/2012
Todavía no he jugado al XIII pero, en el probable caso de que no me gustase y lo dejase sin terminar, ¿recomendarías la segunda parte? 17:12 02/06/2012
Te lo recomendaría en cuanto al juego en sí, que está mucho más trabajado, pero ten en cuenta que los argumentos se continúan directamente, por lo que si no acabas el XIII no te enterarás de nada en este. De todas formas, tendría que saber la razón de que dejaras a medias el XIII, si es por algo referido al sistema de combate olvídate de la secuela, porque en ese aspecto es donde menos cambios encontrarás. 02:00 03/06/2012
Pues mira,hace dias que llevo pensando en pillarlo para el verano,y viendo que tus gustos en Jrpg son similares a los mios,esta reseña me ha despejado toda duda,el XIII me gusto,no fue un juegazo que recordare,pero dandome mas libertad y ofreciendome unas buenas horas de entretenimiento me doy por satifecho. P.D:Sobre ME3,la gente es que hoy en dia despues de pasarse un juego no se que leches esperan,aparte que el mismo juego es un final entero,cerrando arcos argumentales con los Geth,Krogan,Asari etc. 10:32 03/06/2012
@Oberon X . Si te gustó XIII te lo recomiendo sin dudarlo. El argumento es mucho más profundo e interesante de lo que muchos afirman y la parte jugable sufre una gran mejoría en todos los aspectos posibles, incluso vuelven los puzzles jodidos, que en la mayoría de RPG actuales ya ni existen. El final de Mass Effect3 me pareció soberbio, la elección que tienes que hacer y todas las posibles ramificaciones hasta llegar allí son de quitarse el sombrero. Y como bien dices ponen punto y final a todas las subtramas planteadas en las anteriores entregas. 13:44 03/06/2012
Yo terminé 13, pero no me acabó de llenar. La historia no me gustó, me pareció corta de explicar, para meterla en un juego tan largo. Tampoco me gustó el sistema de batalla. Por lo que no sé que hacer con 13-2... Como está muy barato probablemente lo añada a mi próxima compra en Amazon por lo bajini xD. 18:15 03/06/2012
Enhorabuena por el análisis. Muy completo como suele ser habitual. Yo la verdad es que le tengo echado el ojo (tanto es así que, mira que casualidad, ayer hice una batida por mi ciudad a ver si lo veía rebajado) para jugarlo, ya que soy de los que, a pesar de sus fallos, disfrute jugando al FFXIII. 21:36 03/06/2012
@Jordav. Muchas gracias, mi buen curro les echo, no lo voy a negar XD Si os interesa el juego, de importación lo tenéis ya a 10 libras, y se encuentra en castellano igual que la versión Pal Esp. 17:26 04/06/2012
@bowsy: Un gran análisis. Yo no creo que le dé una oportunidad: no me gusta demasiado ninguna entrega de la saga y FFXIII en cuestión se me hizo cuesta arriba. He oído comentar que el sistema de viajes espacio-temporales recuerda "demasiado" al de Radiant Historia, pero aún así no me supone un aliciente. Lo que sí que me ha chocado de tu análisis es que comentas que el sistema de batalla es conservador y no supone un salto respecto a la primera parte. Me ha extrañado por eso de que lo hizo tri-Ace, pero me fio de tu palabra. La "Mesnada" me ha recordado a DQV. De nuevo, muy buen análisis y saludos. 16:14 05/06/2012
@Endimion. Muchísimas gracias por tu comentario. No he probado Radiant Historia, así que no sé si son tan parecidos en cuanto a los viajes espacio-temporales, pero el de FFXIII-2 está muy bien planteado y ejectuado, y más importante, es cómodo y rápido para desplazarse entre distintas eras, aunque un poco desaprovechado en cuanto a ambientaciones y lugares. El sistema de combate parte de la misma base que XIII, y es que era lo único que de verdad funcionaba en el original, han mejorado ciertas cosas que ya he comentado, y la evolución de los personajes es más libre, pero en esencia es exactamente igual. Si lo hizo Tri-Ace, no les llevaría mucho tiempo XD Saludos. Participa con tu Comentario:
Este blog no permite comentarios. |
Blogs en Vandal · Contacto · Denunciar Contenido