Decepcionado con PGR4

Mi relación con Project Gotham Racing 4 siempre ha sido algo tortuosa, en su tiempo quedé completamente maravillado con su segunda parte en Xbox, tanto en aspectos de jugabilidad como técnicamente. Además tenía uno de los mejores modos 1 jugador que he probado en la vida, todo en aquélla entrega de la saga parecía medido al milímetro, a pesar de algunos fallos concernientes a la IA. Y es que soy de esos pocos que nunca juega online, no me gusta, especialmente si se trata de modos únicamente competitivos.

Y los tiempos cambian, las prioridades de la mayoría mandan y los modos para el jugador solitario son completamente subyugados por el temido modo online. PGR4 no fue una excepción, ya apuntaba maneras en su segunda parte y en las siguientes cobró un protagonismo casi total.
Hace años empecé la primera partida a PRGR4 y muchisimas cosas me decepcionaron y me parecieron inferiores a su homónimo de hacía casi 10 años, aún así me gustó aunque lo dejé a medias.
Estos días lo retomé para terminar aunque fuera el modo arcade, compuesto por 60 pruebas diferentes, y me ha costado dios y ayuda, mi opinión del juego no ha hecho sino empeorar con el paso del tiempo.



Las razones son variadas, para empezar se nota el desgaste de la serie y la obsesiva necesidad de Bizarre de añadir contenido nuevo y totalmente superficial a un título que no lo necesitaba, PRG4 siempre ha tratado de conducir bien y con estilo, por eso resulta chocante encontrarte con pruebas realmente absurdas tipo "gana puntos haciendo el mono con derrapes incontrolables" o "derriba tal número de conos" . Algunas pruebas nuevas no están mal, como "tiempo vs kudos" pero si ya en las anteriores entregas sobraban conceptos insípidos como esquivar tantos número de conos, ahora más que nunca es evidente que añaden contenido porque sí, porque deben hacerlo para incluir cosas nuevas.

Y eso me lleva a las motos, muy bonitas, agraciadas y totalmente fuera de lugar. Solo diré que las pruebas de derrapes parecen hechas exclusivamente para ellas, y que en una carrera mixta tienen las de perder ante una IA hija de puta que te tirará al suelo a la mínima, pero lo mismo pasa si manejas un coche, se tiran encima tuya como si de un F-Zero se tratara, intentando que te metas la ostia madre....uno se pregunta cómo encaja eso en el lema de Bizarre de "jugar con estilo".



La jugabilidad es exactamente la misma que en su momento, solo que la IA parece aún más chapucera, para entendernos, en una recta laaaaarga siempre te adelantará la consola, da igual el coche que lleves que la IA mete el turbo y te queda atrás. Eso sí, en cuanto llegues a una curva los coches de delante frenarán el doble de lo necesario para dejarte paso cómodamente, de puta madre, muy agradecido. Y así hasta el infinito, debe ser el único juego de carreras donde las rectas dan más miedo que las curvas, por jodidas que éstas sean.

También el juego acarrea desequilibrios en la dificultad, yo siempre juego en "plata" o nivel medio, y me quedo flipado cuando algunas pruebas están regaladas y otras son casi imposibles de completar, todo en el mismo capitulo. Las pistas parecen distribuidas al tuntún y en resumen el modo 1jugador da la impresión de haber sido realizado en 4 días. Por si fuera poco la banda sonora consta de un número risible de composiciones, que se escuchan hasta la saciedad, abrir un género y verte 4 miseras canciones clama al cielo, y más cuando PGR2 tenía más de 100 temas diferentes entre los que elegir.



El apartado técnico es realmente impresionante, incluso con el paso de los años, pero una vez más me da rabia que hayan puesto más esfuerzo en hacer un montón de público en 3D todo contento con sus banderitas de honor patrio que en mejorar la jugabilidad, la IA, los desajustes varios y en resumen un modo 1 jugador inferior al de PGR2 en todos los sentidos. Y es que no solo no han corregido los errores que arrastraba la serie, sino que para mi gusto se han agravado.

Todo esto que comento es solo referido al titulo jugando en solitario, soy consciente de que el multijugador es enorme, con múltiples modos y posibilidades, y que debe mejorar en buena compañía, pero a mi ni me va ni me viene desgraciadamente.



A pesar de todo, en conjunto me parece un muy buen juego de carreras pero no puedo evitar pensar que nunca más tocaré este PGR4 cuando a su segunda parte sigo jugando por muchos años que pasen.

O tal vez me esté empezando a afectar la nostalgia...qué horror