El pasado 2 de diciembre se dio a conocer al mundo entero algo que era un secreto a voces desde hacía bastante tiempo. El brasileño Kaká se coronaba como mejor jugador del mundo conquistando el famoso galardón que otorga la revista francesa "France Football": el Balón de Oro. Obtuvo 444 votos, superando al portugués Cristiano Ronaldo (277 votos) y al argentino Lionel Messi (255 votos).

Sucede así en el palmarés al italiano Cannavaro y se convierte en el cuarto jugador brasileño de la historia en conseguirlo, tras sus compatriotas Ronaldo, Rivaldo y Ronaldinho. También Brasil es el país que más galardones acumula después del premio a Kaká. 5 en total en los últimos 10 años.





Desde que llegó al Milán en verano de 2003 he seguido a este jugador. El caso es que en el Mundial de Corea y Japón me llamó la atención que un chaval tan joven fuese convocado con Brasil y tuviese apenas media hora de juego en todo el torneo. Vi que en Sao Paulo ya le tenían como un futuro crack y entonces el Milan pagaba apenas 9 millones de dólares por su fichaje. Hoy en día es probablemente el jugador más desequilibrante y más completo del mundo.

Me alegro muchísimo por él ya que es mi jugador extranjero favorito. Sinceramente estoy orgulloso de verle con el Balón de Oro, porque lo sigo desde hace mucho tiempo y desde el primer partido que le vi con la camiseta del Milán supe que tarde o temprano este día llegaría. El reconocimiento al esfuerzo y al sacrifico verdadero.

Espero que se quede muchos años en el Milán, yo creo que le debe mucho a este club como para dejarlo tirado y pienso que no se irá en mucho tiempo. Pero lo que más deseo es que siga sumando títulos como éste a su palmarés.

Grande Ricky, ahora a por el FIFA World Player





Kaká: Simply the Best