Por no perder la costumbre, os dejo con mi listado de los juegos que he terminado este año. Esta vez he decidido tirar de backlog para ir aprovechando juegos que se estaban muriendo de pena en la estantería, especialmente algunos de Wii que no encontraron su momento cuando era la época. Por desgracia, y al igual que el año pasado, la improvisación ha tenido que salvar algunos meses complicados que, por unas cosas u otras, me han dejado poco tiempo para dedicarle al vicio. Al menos, me quedo contento manteniendo mis 25 títulos anuales y también por la satisfacción de haber descubierto algunas joyitas inesperadas, aunque sea a destiempo.
Os dejo con unas breves valoraciones sobre cada título: Secreto: (Pincha para leerlo) Heavy Rain: Una aventura interactiva muy entretenida que se merece todos los halagos que he leído sobre ella. Tanto el guion como los personajes están muy cuidados y la forma de "jugar" consigue que te metas mucho en la historia. Desde luego, el efecto que pretende está muy logrado. Este año me gustaría jugar a Beyond como antesala del Detroid: Become Human, aunque tengo entendido que se queda un poco corto en comparación. Ranko Tsukigime's Longest Story: Soberana fumada de juego. ¿Qué se puede esperar del dichoso Suda51? Si es que no aprendo la lección. Este batiburrillo entre novela visual y beat'em up a contrarreloj dura un suspiro y no aporta nada de nada. Si lo compráis, que sea por los cortos de animación, que es lo vale la pena de verdad. Valkyria Chronicles: Grandiosérrimo juego de estrategia que lamento profundamente no haber probado antes. La dinámica es divertidísima y las misiones son tan retantes como variadas. Si S.T.E.A.M. es la mitad de divertido que este, tengo claro que se convertirá en un título potencial para este 2016 (si es que no me pongo con el VP2 de PSP). Quien no lo haya catado todavía, que aproveche alguna de las múltiples ofertas de Steam porque es de mis más recomendados de la lista. Wario Land: The Shake Dimension: Uno de los juegos que más me arrepentí de no jugar en su momento. Jugándolo del tirón no es un título que brille demasiado, pero es al exprimir el 100% cuando su fuerza sale a relucir de verdad. Desde luego, un plataformas muy digno y de lo más notable en su generación. Ultimate Marvel vs. Capcom 3: Me encantan los juegos de lucha, pero soy un manco de cuidado. En este también. No tengo mucho más que destacar (Phoenix y Amaterasu molan un coj*n). Klonoa: Door to Phantomille: Confieso que solo lo jugué por los comentarios de Jimmytrius, pero la verdad es que ha sido una experiencia bonita. El juego es más bien de corte infantil y su dificultad, más allá de la torre especial, es bastante baja, pero es un plataformas muy simpático y con ideas bastante interesantes. Sin embargo, se nota demasiado que procede de PlayStation, con todo lo bueno y todo lo malo que ello supone. Como anécdota de interés, decir que mi copia pertenecía originalmente a CacaManPowa y por ello vale miles de millones. Además, ahora estoy embarazado. The Sky Crawlers: Innocent Aces: La película me encantó y pensé que esta podía ser una buena alternativa a los Ace Combat tradicionales. Cuánto me equivoqué. Al control tosco y a la historia sosa se le suma una aburrida falta de variedad en las misiones y el estúpido sistema de persecución, que no contenta a nadie. En definitiva, un juego que no hace justicia ni al filme ni a la serie de Bandai Namco. The Wolf Among Us: Cuando ya pensaba que Heavy Rain se iba a coronar como mejor guion del año (en mi lista, entiéndase), el juego de Fábulas aterrizó de pronto para hacerle la competencia. Lo compré un poco a ciegas motivado por sus buenas críticas y las del propio cómic, y la verdad es que no solo no me ha defraudado sino que me ha sorprendido muy gratamente. Como aventura interactiva no se le puede sacar mucha punta a las mecánicas en sí, pero su rejugabilidad lo convierte en un título interesante con el que disfrutar desgranando la historia y sus múltiples variantes. Dynasty Warriors Gundam 3: QUÉ PEÑAZO DE JUEGO. Mi fiebre Gundam se mezcló con el buen recuerdo que tenía de Hyrule Warriors y me animé a probar esta entrega de la saga, convencido de que la variedad de Mobile Suits me motivaría todavía más a exprimirlo por completo. Sin embargo, esta variedad es lo único bueno que tiene: el juego es lento de narices y la variedad en las misiones es prácticamente nula, por lo que aparte de la historia original (que tampoco está muy inspirada) no hay muchas razones para jugarlo. Quizá debería haberme esperado a comprar el Reborn, que pinta un poco mejor. Sin & Punishment 2: Successor of the Skies: Se aleja bastante del concepto de la primera entrega, pero no deja de ser un arcade muy adictivo y rejugable. La verdad es que como "antecesor" de Kid Icarus Uprising, resulta un reto muy fresco y agradable; se lo recomiendo a todos los que busquen un juego de acción trepidante heredero de las mecánicas de los Star Fox. 3D Dot Game Heroes: Tremendísimo homenaje a las series clásicas de rol japonés. 3D Dot Game Heroes coge lo mejor de The Legend of Zelda y de Dragon Quest para presentar una aventura de lo más divertida que poco tiene que envidiar a ciertos juegos de Nintendo. Sin embargo, su mayor virtud se convierte también en su mayor defecto, pues su condición de homenaje pesa demasiado como para aportar nada verdaderamente original al género de aventuras. En cualquier caso, me parece un imprescindible para todo fan de las series arriba mencionadas. Xenoblade Chronicles X: Es a lo que estoy jugando ahora mismo y probablemente me dure hasta bien entrado el año. Su predecesor fue uno de los títulos a los que dediqué más tiempo en Wii y este tiene todas las papeletas para seguir el mismo camino, aunque solo sea por la abrumadora cantidad de contenido. Como muchos, coincido en que es uno de los grandes lanzamientos del año y, posiblemente, uno de los pilares de la generación, pese a su pobre tirón comercial en comparación con otros de caraterísticas similares. Monument Valley: Arte interactivo, pero poco más. Pese a su precioso apartado artístico, los puzles no ofrecen ningún tipo de reto y son más un mero trámite que otra cosa. Lo conseguí gratis en una oferta y me alegro de que así haya sido, desde luego no vale lo que cuesta. Pokémon Shuffle: Pues sí, yo también he caído en la trampa de Nintendo. Lo estuve jugando durante meses hasta que la cosa empezaba a exigir pasar por caja para poder atrapar a los bichos o superar siquiera sus fases. Está bien para cuando tienes cinco minutos, pero no es un juego en el que invertir muchas horas. Al Pokémon Picross también le he dado un tiento pero creo que pasaré de jugarlo como este. El profesor Layton vs. Phoenix Wright: Para "descansar" de la entrega anual del profesor, pensé que ya era hora de jugar a este crossover que tanta ilusión me hacía. El juego une lo mejor de ambos mundos y tiene que gustar por fuerza a los fans de una u otra rama, pero aunque es un título notable, el número de puzles y de juicios se me antoja escaso, como si faltara la mitad del contenido. En cualquier caso, un experimento de lo más correcto. Super Metroid: No puede faltar en mi lista un pequeño "rincón de la vergüenza", así que este año el elegido ha sido esta aventura de Samus que confieso que no había completado hasta ahora. No soy ningún fan del género, y si bien no creo que juegue a otro Metroid en bastante tiempo, comprendo y alabo las virtudes de esta entrega que sin duda sentó escuela hace más de 20 años. Desde luego, se merece el título de "clásico". Broken Age: Otra aventura gráfica, y una muy especial. Podría extenderme un tanto sobre lo mejor y lo peor que tiene, pero os animo a leer las impresiones de Kamek Koopa porque son justo lo que pienso, palabra por palabra. Persona 2: Innocent Sin: Para matar el gusanillo hasta la llegada de Persona 5, pensé que era un buen momento para echar la vista atrás y jugar a una de las entregas de culto en la saga. Sin embargo, la experiencia no ha sido, en absoluto, tan placentera como esperaba. El juego es muy bueno, eso es indiscutible, pero la dinámica de los combates se vuelve extremadamente farragosa, haciendo que la aventura se vuelva pesada para el jugador (y lo digo habiendo probado otros MegaTen más clásicos como Soul Hackers). No desaconsejo jugarlo, pero hay que saber a lo que se va antes de ponerse con él. Patapon: Aprovechando que ya estaba con la PSP, me sumergí en el simpático mundo de Patapon y sus peculiares aventuras. Tiene algunas ideas interesantes, pero es un juego entretenido sin más. Tengami: Un completo déjà vu del Monument Valley. Mi consejo para los interesados: gastaos ese dinero en la banda sonora, porque es lo único que vale la pena. Pullblox: El análisis de Markomaro me convenció para comprarlo y la verdad es que me ha gustado bastante. La curva de dificultad está bien ajustada y completar los últimos puzles provoca una gran satisfacción, aunque a veces dan ganas de arrojar la consola por la ventana. Ya tengo preparado Fallblox y espero jugarlo el año que viene si tengo la oportunidad. Undertale: El juego indie del año. De lejos. De muy lejos. Pero a riesgo de morir apedreado, creo que se exageran sus bondades y a mí, personalmente, no me parece que se merezca esa cualidad de perfección absoluta que todos le atribuyen. En concreto, creo que el juego es demasiado corto para desarrollar el mundo y los personajes de la forma que pretende, y aunque ciertamente logra calar en el jugador de una forma muy especial, todavía le falta un poquito para conseguir lo que, por ejemplo, sí que logran los MOTHER. De todas formas, es un título al que hay que jugar sí o sí. Niko: Through the Dream: ¿Un juego hecho por gente del foro? Si algo me ha enseñado la bilogía Vandal Quest es que cuando los manitos se ponen manos a la obra, el resultado solo puede ser bueno. Desde luego, a nivel audiovisual es delicioso y muy variado, y aunque las pruebas tienen sus más y sus menos, las ideas que esconde son muy interesantes. Quizá no sea un juego de sobresaliente, pero vale la pena probarlo. Mis felicitaciones a los miembros de Studio Paint. Fotonica: Un título cortito y sin muchas pretensiones pero que resulta adictivo por su marcado planteamiento arcade y por ofrecer diversión rápida (nunca mejor dicho) y directa desde el primer momento. Ideal para partidas cortas y para liberar tensiones al final del día. Policenauts: Con un poco de retraso, me atrevo por fin con el otro thriller de Kojima tras la grata experiencia que tuve con Snatcher. Apenas llevo un par de episodios, pero la evolución respecto a este es evidente y sospecho que me va a gustar tanto o más, así que solo me queda esperar a ver qué misterios me esperan junto al bueno de Jonathan Ingram. 2016 se plantea como un año complicado con la salida de varios RPGs que no sé si me dará tiempo a completar. Bravely Second, Dragon Quest VII, Gen'ei Ibun Roku #FE y The Legend of Zelda son compra asegurada, y a eso hay que sumar otros tanto o más esperados como Zero Time Dilemma o el dichoso MOTHER 4, que parece que no lo terminan nunca. Además, si no hay contratiempos, tengo previsto hacerme con una PS4 para recibir al Persona 5 como se merece, y es probable que se venga a casa con otros jueguecillos interesantes que ya han salido como Dragon Quest Heroes o Life Is Strange. Así que ya veis, va a ser un año muy ajetreado y probablemente no logre jugar a la mitad de los arriba mencionados, pero de ilusión también se vive. Veremos cómo termina la cosa. |
Categorías:
|
Blogs en Vandal · Contacto · Denunciar Contenido